La reunión trató más que nada de darles las listas de los nombres de los miembros de su equipo.

— Entonces reuniremos a nuestros equipos hoy y mañana comenzamos a trabajar—dijo Xenna. 

— Si, en el caso del meteorito, será en otras instalaciones, ya que fueron acordadas por la NASA—contestó Collins.

— Bueno, le diré a Will que mande los correos con la dirección de las instalaciones—dijo Zeki.

— Bueno, es todo, nos vemos mañana, yo estaré monitoreando con nuestro satélite a ver si hoy encuentro algo.

— Si.

Collins salió de la sala dejando a Zeki y a Xenna solos.

— Capitán Blow, ¿cuánto tiempo?

— Doctora, ha pasado mucho.

— ¿Qué rayos?—se acercó y abrazó a Zeki.

— Xenna.

— Saliendo del trabajo me invitas a comer algo.

— Claro, Zally y Will se alegrarán al verte.

— Cierto, debo hablar seriamente con Zally, ya sabes por qué.

— Si, en estos momentos necesitamos tus consejos.

Ambos salieron de la sala y vieron gente nueva que venía de otros países pero decidieron ir a la oficina de Zeki.

Will había ido a la cafetería por un té para Zeki, le había pedido dos. En la cafetería vio a varios grupos de científicos, y reconoció a una persona en específico. Era una gran coincidencia, era nada más y nada menos que Masha.

Zeki y Xenna fueron a la cafetería a buscar a Will para que comieran los tres ahí. Will quedó sin palabras y no sabía que decir, por un lado volvió a ver a Xenna pero por otro a Masha, literalmente.

— ¡Will!—lo abrazó—. Los extrañé mucho.

— Xenna, me alegra verte, hoy sí que hay muchas sorpresas—soltó una risa nerviosa.

— ¿Pasa algo Will?

— ¿Hace falta que te lo diga?—con la mirada señaló discretamente hacia donde estaba Masha, quien estaba platicando con otros científicos, sonriente y parecía estar emocionada.

Zeki quedó paralizado por un momento, la miró directamente, no podía creer que ella estuviera ahí.

Ella se dio cuenta y también lo vio, dejó de sonreír y le dio la espalda a Zeki.

— Zeki, vamos a la oficina—dijo Xenna y lo tomó del brazo.

Los tres fueron a la oficina para hablar.

— Al parecer Masha estará en mi equipo—Xenna leía el documento con los nombres de los integrantes de su equipo.

— Jamás creí volver a verla.

— Te paralizaste, Zeki, ya pasó mucho tiempo, lo mejor será que lleven una buena relación de compañeros de trabajo—dijo Will mientras dejaba los tés en la mesa.

— Estoy de acuerdo con Will.

— Bueno, cambiemos el tema, al parecer el gobierno estadounidense está exigiendo un encuentro con Zally.

— Oh cierto, vaya problema, yo digo que no lo haga, no pueden obligarla—Will se recargó en la pared.

Al final del día, Cindy se quedó en su clase de jiu jitsu. Y Zally fue a buscar a Will afuera de la escuela. No se imaginó para nada que vería a Xenna.

— ¿Xenna?—Zally la miró. Xenna saló del auto.

— ¡Zally!—la abrazó.

— Xenna no puedo creerlo. ¡Por fin nos vemos!

— Tengo tanto que platicarles, por cierto, mírate, te ves más feliz—la miró a los ojos.

— Lo estoy, bueno, ahora no tanto, supongo que ya sabes por qué...

— Sí, no te preocupes, puedes platicarme todo lo que pienses, vamos a casa. 

Los cuatro fueron a la casa, donde Zeki preparó un delicioso espagueti con albóndigas y la increíble salsa.

— Extrañaba esta salsa, lo juro—dijo Xenna.

— ¿Entonces van a construir un robot?—preguntó Zally.

— Sí, ayudará a rastrear actividad parecida a las muestras que encontramos en el centro comercial.

— Wow.

— Bueno, ahora eres Red Girl ¿qué pasó Zally?

— Fue una locura, yo jamás creí poder hacer algo así, aún me sorprende demasiado.

— ¿Lo volverías a hacer?

— ¿Eh? No lo sé.

— Vamos, inténtalo.

— Bueno, no debo tener miedo.

Zally se puso de pie e intentó hacer que esa armadura apareciera, sin embargo nunca apareció.

— Armadura ¡aparece!—no aparecía—. ¡Súper traje!

— Tal vez aparece cuando sientes estar en pelígro—dijo Xenna—. Así como los escudos que haces o tus ataques.

— Déjame intentarlo—Will se puso de pie, invocó su ballesta y apuntó a Zally—. Zally, por tu bien será mejor que hagas que aparezca tu traje. 

— Por dios—Xenna se asustó un poco, pues nunca había visto a Will hacer algo así.

Will no esperó más y disparó, y Zally se cubrió con su brazo, esto hizo que aparecieran las muñequeras y después se fue formando todo el traje o armadura.

— Wow, Zally eso es increíble—Xenna estaba más que impresionada—. Zally, debo preguntar algo.

— Dime

— ¿Ayudarías en la armada de la EAF?

— Xenna, yo ya había dicho que no deberíamos meter a Zally en esto—dijo Zeki.

— Quiero que conteste Zally.

— No me gusta la fama de superhéroe, pero sin duda ayudaría.

Vo Slavu I: Paz y amor en el planeta Tierra.Where stories live. Discover now