VEINTE

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Es increíble. Nunca llegué a confiar en Misuk, pero jamás pensé que haría algo así. Ha matado a Sensa sin tan siquiera parpadear y seguramente también se haya deshecho de Fiko. Y Yaroc... Ahora entiendo lo que me dijo. Llegará un momento en el que tendrás que elegir. Él ya ha elegido, ha elegido a Misuk pero... ¿por qué? ¿A cambio de qué? ¿Y qué sentido tiene que la androide quiera llegar al Centro de Mando Principal? ¿Acaso pretende advertirles del Vínculo? Son tantas preguntas que me duele la cabeza.

—Vaya, vaya, vaya. Aquí estáis —reconozco la voz de Misuk, con ese nuevo tono de suficiencia.

Me pongo en pie, en posición de ataque, frente a Hyo. Misuk nos enfoca con una linterna.

—Oh, niña, no seas ridícula —me apunta con el fusil—. ¿Qué vas a hacerme?

Le doy un puñetazo en la mejilla y ella solo sonríe.

—Vaya, qué valiente.

Me empuja y se agacha junto a Hyo. Quiero arremeter contra ella pero Yaroc me inmoviliza. La androide agarra a su hermano de la barbilla y le obliga a mirarle.

—Qué desperdicio —me apunta con la pistola—. Dame las coordenadas exactas y la dejaré con vida.

—¿Cómo puedo saber que cumplirás tu palabra? —escupe él.

—¡No le hagas caso! ¡No le des las coordenadas! —chillo.

Misuk suelta una risita y desvía la mirada hacia mí.

—¿De veras sientes algo por eso? Me decepcionas, hermano.

—Deja que se marche y te diré las coordenadas —musita Hyo.

Misuk se levanta y me examina. Entrecierra los ojos y da una vuelta a mi alrededor. Me agarra y coloca el cañón del arma en mi sien. Hyo me mira a los ojos, su mirada está llena de miedo. Yo los cierro, él ayer me dio las coordenadas, me dijo cómo localizar al Vínculo en el Centro de Mando, me dijo qué debía hacer para no perderme en caso que él no sobreviviera. Miro su mochila, allí guarda un walkie, lo único que me permitiría comunicarme con el Vínculo.

—No le digas nada, Hyo. No podemos dejar que llegue bramo.

—Oh... Cuánta lealtad.

Misuk me suelta y tuerce una sonrisa. Se agacha de nuevo hacia Hyo.

—¿No te da vergüenza hermanito? Ella no lo sabe, ¿verdad?

Él aprieta los dientes y le lanza una mirada furtiva. Yo les observo desconcertada. ¿Qué es lo que no sé? Frunzo el ceño y la observo decidida.

—Hyo no ha sido totalmente sincero contigo, Yadi —empieza a decir imitando el tono de voz de Yaroc.

—Eso es lo que tú te piensas.

Ella suelta una carcajada. Dirijo mi mirada a Hyo, en sus ojos veo remordimientos. No entiendo nada. Sé que Misuk lo está haciendo a propósito, quiere despistarme.

—Está mintiendo, ¿verdad? —le pido a Hyo.

Él baja la mirada y sacude la cabeza.

—No.

—Díselo Hyo, dile quién es LV —exclama Misuk.

¿Qué? Le miro extrañada. ¿Hyo sabía todo este tiempo quien era LV y no me lo ha dicho?

—¡Díselo! —chilla la androide.

—Tu padre —contesta Hyo con un hilo de voz. Alza la mirada. Por su voz sé que llora—. LV es tu padre, Yadei. No te lo dije porque pensé que no confiarías en el Vínculo.

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