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Cuando las 15:30 se dieron la vuelta, Jeongin gimió y salió de su pequeño sofá, aterrizando en el suelo con un ruido sordo. Se sentó y se puso de pie, usando la mesa de café como palanca, y caminó una corta distancia hasta su habitación. Una vez allí, agarró su ropa de trabajo y se cambió, pasando rápidamente sus manos por su cabello al darse cuenta de la hora. Corrió hacia la sala de estar otra vez y apresuradamente se puso los zapatos, agarró su teléfono, una chaqueta y una billetera antes de salir corriendo de la casa y caminar rápidamente hacia la florería.

Eran las 15:55 cuando llegó. Fue saludado por la ola entusiasta de Felix y la ola desinteresada de Minho, que estaba ocupado poniendo unos tulipanes en un estante. El menor de todos saludó con la mano y les sonrió a ambos, aunque el mayor se dio la vuelta y caminó hacia atrás, colocando sus pertenencias en su casillero y saliendo al frente.

– Jeonginnie, ve a ayudar a Minho, ha estado luchando durante unos 10 minutos tratando de levantar todas las flores y todavía se tiene que ir– Dijo Felix, haciendo gestos llamativos hacia el Lee mayor– Las flores están en la parte de atrás.

Asintió y sonrió, maniobrando a través de los estantes, una vez más, para tomar las flores adicionales de la habitación trasera. Vio un par de ramos de flores de diferentes tipos, agarrándolos y llevándoselos al niño que lucha.

– Ahh, gracias Innie– Agradeció Minho, sonriéndole al pequeño y quitándole las flores.

– ¡No hay problema!– Felizmente saltó hacia el australiano nuevamente– ¿Hay algo más que deba hacer?– Le preguntó, bajando la mirada ligeramente para mirar a los ojos de Felix.

– Uhh, no estoy seguro, ¿pero podrías barrer el piso con pétalos secos y otra basura que pueda estar por ahí?– Sugirió. Yang asintió, saltando al armario de suministros y agarrando todo lo necesario para barrer los diferentes pétalos.

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– Jeonginnie, es hora de cerrar, ve a buscar tus cosas para que podamos irnos– El australiano fue hacia la parte de atrás, aconsejando al menor que agarrara sus cosas para poder irse. Jeongin regresó en cuestión de segundos, sonriendo a los dos mayores y abrazándolos antes de trotar en otra dirección.

Happy [Hyunin]Where stories live. Discover now