El Mar En Tus Ojos. |Rick Grimes & Tú|

16

Él no está muerto

En la calle había manos, brazos, piernas descuartizadas, era un grupo muy grande de personas matando a nuestra gente.

-Morirás hoy.

Dijo alguien, me agaché, me acerqué lentamente y era uno de este grupo apunto de matar a Denisse.

Llegué por atrás y el machete cortó su cuello, ahora su cabeza no pertenecía a su cuerpo. Denisse me miró asustada, temblaba.

-Vamos a la enfermería, no podemos perderte.

Asintió, me siguió, abría paso para ambas, maté a dos en el camino.

Entramos a la enfermería, estaba Tara, Eugene, el padre Gabriel.

-No salgan, ¿oyeron?

-Podemos pelear.-dijo Tara.

-Apenas te estás componiendo. Si van a pelear entonces defiendan este lugar, traeré a personas heridas.

-De acuerdo.

Caminé hasta la armería para tomar algunas armas, Olivia me dio autorización, un sonido fuerte se hizo presente, la bocina de un trailer empezó a sonar.

-¿Qué es ese sonido?.-preguntó nerviosa.

-Atraerá a la horda. Iré a apagarla. Qué nadie entre.

Salí, empecé a disparar a esta gente loca que mataba sin compasión. Salí y un camión había chocado con un edificio afuera de Alexandria.

Subí al trailer, quité el muerto y apagué el sonido. Cuando bajé estaba Spencer.

-¿Qué haces ahí parado?

-Venía a apagar la bocina, le disparé a él, hubiera tumbado la reja.

-Bien. Agachate.

Detrás de él venía alguien, apunté, salió Maggie con Deanna herida.

-Somos nosotras.-Maggie dejó a Deanna con Spencer.-Los caminantes no tardarán en llegar.

Entramos de nuevo a la comunidad. Morgan estaba rodeado de un grupo de ellos. Saqué mi machete, maté a uno, Morgan se encargó de los demás pero no los mató.

-¿Qué haces? Debemos matarlos.

Disparé a todos en el suelo.

-Toda vida es valiosa, Rowan.

-No la de ellos.

Giré para seguir matando a los que quedaban, de un arbusto alguien salió aventandose a mi, me tiró al suelo, mi machete salió volando.

Era una mujer encima de mi con una W en la frente, eran ellos los qué hacían eso a los caminantes.

Forcejeaba para que no me matara, sacó su cuchillo e hizo un corté cerca de mi yugular, sentí miedo morir.

Solo empecé a sangrar un poco, no iba a morir hoy, lo presentía.

Un disparo y había caído sobre mi, sin vida. El padre Gabriel le tendió la mano, me llevó con Denisse, había varía personas siendo atendidas por Eugene, Rosita y Tara.