I am not a Lady [MAMP#2]

18. Cero interrupciones

CHARLIE

Alejé a Liam todo lo que pude de su hermano, así que ambos nos quedamos en mi habitación cuando escuchamos como la puerta de cerraba a la salida de Drew. Estaba algo intranquila por las palabras de su hermano, las cuales seguían rondando en mi cabeza y parecía que no querían salir todavía. Estaba muy callada, Liam notó que algo pasaba conmigo. Yo ya sabía que era complicado engañarlo, pero debía intentarlo.

—Dime qué ocurre contigo.

—Nada —respondo como robot programado—. Creo que estoy un poco nerviosa por la situación, es todo.

—Mala decisión.

—¿Qué?

Se acerca a mí y pierdo el equilibrio hasta resbalar a mi cama, con suerte logro mantenerme sentada.

—Mentirme.

Sabía que sería un fracaso intentarlo.

Arrima sus brazos a ambos lados de mi cuerpo para dejarme sin salida. Levanté la cabeza para poder ver sus ojos, porque pensé en lo bello que sería eso con la luz de la luna que se reflejaba por las ventanas y espejos de la habitación.

—¿Vas a decirme qué pasa?

—Nada.

—No te creo. —la frialdad en su voz me hizo recordar un poco a Derek.

—Pensaba en ciertas cosas.

—¿Cómo qué?

Como que un loco de nuestro pasado nos sigue y quiere acabar con nosotros, que estamos en peligro mortal y que tu hermano se acababa de declarar en ese balcón a mis espaldas.

No sabía si decir la última parte.

—¿Siempre te gusta hacer todo tan difícil?

—¿Acaso no me conoces? —no sabía si lo mejor era retarlo, pero sabía que si no decía algo pronto como explicación empezaría a sospechar.

—Lo hago —sus ojos se centran en los míos—, es por eso que pregunto.

—Cosas sin importancia.

—Estoy oliendo algo —hace señas de que halló un mal olor—. Capto mentiras en el aire, ¿lo hueles?

Me levanté de inmediato de la cama cuando pude notar que un empujón bastaba para sacarme de ese aprieto. Lo hice por la simple razón de que su intimidación era real y deseaba saber qué estaba ocultando, pero no sería fácil explicar lo que acabó de suceder con Drew. Liam lo mataría si tuviera la oportunidad, no por sentir lo que él llamó "amor", sino por ocultarle algo así después de tantas cosas.

Caminé con algo de torpeza hacia el baño.

—Dime por qué huyes.

—¿Y por qué no hacerlo?

—Siento que no captas ese aroma tan desagradable.

—No, Liam. No puedo olerlo.

—Sé que me ocultas algo, ¿ocurrió algo cuando estuve fuera?

—Nada que comentar —odiaba mentirle, pero era necesario—. Deja de mirarme de esa forma, me estás poniendo nerviosa. —cuando entrecierra los ojos y me ve, siento algo revolverse en mi estómago. Ahora sentía que debía ir al baño con urgencia.

—Charlie...

—No quiero ser grosera, pero el baño me llama.

Cierro la puerta apenas entro y evito que Liam me siga, pero sabía que esperaría a que saliera y maldecía por la idea de que en ese lugar no había más que un intento de ventilación. Tomé una toalla pequeña y la remojé para ponerla un momento en mi frente, de esa forma pensaría mejor, ya que usaba las palabras "pensar con cabeza fría" literalmente. Tras unos minutos de recobrar el valor, salí de mi escondite. Liam ya no estaba donde lo dejé y mi escaneo rápido de la habitación arrojó que no estaba en ninguna parte. Cuando di un paso fuera, sentí como mi corazón da un vuelco cuando siento unas manos en mi cintura.