NO WAY 2 - CAMREN

CAPÍTULO 4

Me ayudó a secarme y me abrazó...

-Te amo- dijo para luego darme un beso en la frente. Tomé su mano y volvimos a la cama eran cerca de las 6am.

LAUREN POV:

Desperté cuando sonó el timbre de la casa.

Bajé al primer piso y abrí la puerta, estaba aún con sueño...

-Buenos días, señorita Jauregui-dijo el cartero- menos la encontré aquí.

-Buenos días... ¿Qué se le ofrece?

-Bueno, tengo una carta importante para usted... Su tía lo dejó en la empresa en caso le pasara algo y mencionó debíamos entregársela a la señorita Lauren Jauregui-sonrió el hombre anciano.

-Oh, gracias- tomé el sobre entre mis manos y luego él se depidió.

Cerré la puerta y me senté en el sofá, abrí el sobre y pude leer que era una clase de testamento dejándome todo a mi... Todos sus bienes y su cuenta bancaria con todos los fondos... Eran palabras serias acerca de que me otorgaba todas sus posesiones y al final había una posdata.

"Vive siempre cada día como si fuera el último... Embriágate, baila, ama, llora, pero por sobre todo... Permítete ser feliz porque nadie lo hará por ti"

"Con amor... Tu tía favorita"

En ese instante mis ojos se llenaron de lágrimas por su peculiar forma de ver la vida... Pero más porque recordaba cada detalle de su personalidad y la manera en que siempre me ayudó a ver el mundo. Ella era única, de cierta forma necesitaba algo más, no me sentía completa aún... Quería saber si me había extrañado tanto como yo en estos meses.

Me puse de pie y fui al baño, me lavé la cara y me acerqué al balcón que quedaba frente al mar, podía sentir la brisa jugar con mi cabello y respiré profundo... Era un nuevo día en el que debía buscar ser lo más feliz posible.

Fui hacia la cocina y me puse en mi faceta de chef, quería hacer toda clase de comida para que Camila pudiese sentirse con la ligera libertad de escoger y probar de todo.

Cuando al fin terminé mi gran banquete, fui hacia la habitación y me recosté al lado de Camila, la abracé por la espalda y comencé a darle besos en la mejilla, ella sonreía y entonces supuse se estaba despertando, le susurré al oído...

-Despierta princesa... Vamos a desayunar...

-¡Qué te pasa! ¡No hagas ruido!

Casi me mató del susto y di un brinco alejándome de ella...

-Dios... Casi me matas... ¿Por qué gritas?

-¡No estoy gritando! ¡Deja de gritarme Lauren!

-Amor, no te estoy gritando...

-Me duele la cabeza, ¡Ah!- dijo eso y yo empecé a reír.

-A eso mi querida princesa, se le conoce como "resaca"-hice las comillas con los dedos y ella me lanzó una almohada.

Fui hasta ella gateando en la cama, le di un beso en la mejilla y le dije...

-Te espero en la cocina, te he preparado el mejor desayuno del mundo.

-¡Está bien! ¡Pero no grites!

-Okay-susurré y luego salí de la habitación riéndome.

Luego de 5 minutos oí por fin los pasos de Camila bajando las escalera y entró por la puerta de la cocina, se sentó con una expresión malhumorada...