5

914 142 47
                                    

Muy temprano por la mañana del sábado, la mamá de Taehyung preparó el desayuno, el día anterior su hijo había llegado bastante distante, imaginaba el motivo así que decidió animarlo un poco.

Un muy adormilado Taehyung sobaba sus ojos con pereza, observó su techo unos minutos pensando en que si fingía un ataque tal vez su mamá le dejara quedarse en casa, sin embargo las palabras de Seokjin aún retumbaban por su cabeza, sus disculpas parecían sinceras aunque su semblante lo hizo temblar. En el ambiente se esparcía el olor de su desayuno favorito lo que le indicaba que su madre se había dado cuenta de su humor. Sonrió con ternura de que esa mujer siempre trataba de hacerlo sentir mejor. En definitiva no podía escapar del recital, eso era un hecho.

Decidido, se levantó colocándose las sandalias para estar en casa, bajó hasta la cocina donde su mamá ya había ordenado todo para un desayuno en familia, su padre estaba en la sala viendo el televisor y lo saludó cariñosamente al verlo. Seulbi sirvió el desayuno para su familia y sus dos hombres se sentaron para devorar sus platos.

—Cariño, Taehyung y yo vamos a ir a un recital.

—¿Y yo no estoy invitado?

—Oh, solo le dieron dos pases.

—¿Y se puede saber a quién irán a ver?

La cara de Taehyung se puso roja, aunque que confiaba en su madre sobre esos temas, se sentía un poco cohibido con su padre a pesar de que este le aceptara al cien por ciento.

—Un amigo de Tae, amor.

—Amigo —dijo con una risa inmiscuida en sus palabras—, claro, y yo no soy editor.

—¡Papá! —Taehyung se sintió avergonzado.

—Bueno, yo solo decía. Es claro que irás a ver a un chico que te gusta —el castaño terminó asintiendo—. Solo recuerda lo que vales ¿bien? No quiero que nadie se sobrepase contigo.

Cosas como esa siempre le recordaban sus padres, en parte debido a su condición los hacía más sobreprotectores, sin embargo querían darle la confianza de que podía hacer lo que él considerara necesario y valerse por él mismo en este mundo tan descortés.

A unos cuantos kilómetros, Seokjin tomaba un buen desayuno aunque temía que con los nervios regresara la comida por donde había entrado. Su madre estaba bastante nerviosa pero muy orgullosa de su pequeño.

El recital sería alrededor de las cuatro de la tarde, pero Seokjin debía estar antes para un último ensayo general de todos los números. Luego del desayuno hizo sus necesidades y tomó un baño caliente para tranquilizarse, se vistió casualmente ya que el traje que usaría se lo pondría estando en el auditorio.

—Seokjin, tu padre te está esperando —dijo su madre en el umbral de su puerta—, Dios, Seokjin estoy muy emocionada por ti.

—Mamá, solo es un recital —comentó restándole importancia.

—Eres mi hijo y siempre estaré orgullosa de tus logros, ahora ve, ya sabes que tu padre es desesperado —besó su frente.

Seokjin tomó sus pertenencias, abrazó a su madre y salió corriendo hasta la camioneta. Sus padres lo alcanzarían a las tres. Iba platicando un poco con su papá para aligerar el bombeo irregular de su corazón.

Una vez dentro del auditorio viendo a sus compañeros y su profesora se sintió en confianza. Pasaron un par de horas y era momento de cambiarse, se observó en el espejo del baño asegurándose de que todo en el traje estuviera en orden. Llegó hasta el escenario y miró con curiosidad por la cortina, el recinto se estaba llenando de los familiares y amigos de sus compañeros, en medio observó a sus padres y se alegró. Una vocecita en su cabeza le decía que Taehyung debía estar ahí, no quería pensar mucho en ello porque lo pondría nervioso.

Hiperventilación [taejin]Where stories live. Discover now