Capítulo 32: El amor es...

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Juliet:

El pedido de los centros de mesa llegaron casi a medio día, Evan manejo hasta el restaurante para poder dejar las cajas de las velas, las hermanas de Kelly fueron de mucha ayuda para poder arreglar el lugar, todo estaba saliendo bien, hasta que vi a mí amigo sentado en una de las sillas del restaurante mientras miraba a la nada.

- Oye ¿estás bien? - pregunté mientras tomaba su mano - mierda... Estás sudando y estás helado - puse mí mano en su frente - creo que estás haciendo fiebre, te traeré una pastilla...

Evan me tomó de la mano antes de que me alejara y puso ojos de venado

- ¿Y si ella me dice que no?

Aquí íbamos de nuevo... No era la primera vez que le daba un ataque de nervios y me preguntaba lo mismo. Cuando el me dijo que quería pedirle matrimonio a Kelly varias posibilidades pasaron por mí cabeza, incluyendo el que le dijera que no, no hice ningún comentario al respecto por qué no quería sonar pesimista o desanimarlo, pero cuando el puso el tema sobre la mesa tuve que explicarle que a veces un acto sorpresa con gran audiencia muchas veces podía ser abrumador para alguien, que es poner presión sobre una persona para obtener una respuesta, eso tocó hasta la más sensible de sus fibras, me sentí mal pero me hubiera sentido peor si no le hubiera advertido al respecto.

- Recuerda lo que te dije, si ella dice que no ,está bien, es normal que no quiera llegar a esa parte, pero eso no significa que ella no te quiera o que no quiera estar contigo - suspiré - pase lo que pase, nosotros debemos estar ahí para ella, en especial tu, no olvides que hubo amistad entre ustedes antes de todo lo demás.

Eso pareció calmarlo, de todos modos pedí que le prepararan un té para que pudiera recomponerse.

Ya en la tarde me encontraba en mí departamento alistando me para el evento de esta noche, Jenn también vendría y luego de la cena, iría con sus amigos a un club, al comienzo ella dudó mucho en salir pero la animé para que pasara lo que quedara de la noche con sus amigos, siempre se la pasaba trabajando, definitivamente se merecía una noche libre.

A veces me pregunto si la vida de Jenn hubiera sido más fácil si nuestros padres aun estuvieran con nosotras.

Miré por última vez mí reflejo en el espejo, Jenn pasó buen rato maquillándome y peinándome, varios recuerdos de la infancia pasaron por mi mente, cada vez que ella me cuidó y arreglo, aun cuando nuestra tía y el primo Joe decidieron hacerse cargo de nosotras, ella nunca se despegó de mi, es por ella que sigo estudiando y por la que estamos en Londres, ella es la razón por la cual siempre me empujo a mi misma sacar las mejores notas posibles, es lo menos que puedo hacer, por que no piensa dejarme trabajar aun que a veces las cuentas nos pisen los talones.Sin pensarlo levanté mi mano y la coloqué sobre la suya, Jenn dejó de cepillar mi cabello y miró mi reflejo en el espejo

-¿Que pasa?

- Jenn... te quiero mucho, disculpa si no te lo digo tan seguido...

Ella sonrió ampliamente - Yo también te quiero Jul - dijo antes de darme un abrazo de oso- y no es necesario que me lo digas todo el tiempo.

Eran estos momentos de calidez con mi hermana los que disipaban los grises y algo perturbadores momentos que tuve hace unas semanas, volvía a sentirme un poco más como yo de nuevo, no como la versión que despertó en el hospital después del accidente, no es que esa versión de mi haya estado haciendo algo malo; pero había estado muy lejos de la realidad e ignorando varias cosas que pasaban a mi al rededor y que eran importantes, esta vez iba a prestar más atención a los que amo, los iba a escuchar más y en lo que pudiera los iba ayudar, mis pesadillas se irían de la misma forma en la que vinieron, ellas si eran unas de las cosas que debía ignorar, dejaría de montar las bicicletas como si fuera alguna doble de riesgo, tomaría el metro y nada malo me pasaría otra vez, comenzaría a ser tan feliz como lo fui cuando llegué aquí, incluso si... incluso si eso significara pretender que todo lo que pasó, que ese alguien que conocí, si es que en algún momento fue un alguien; nunca existieron.

Iris (Thomas Brodie - Sangster)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora