Iris (Thomas Brodie - Sangster)

Capítulo 18 : Verla feliz

Juliet:

El sueño se me estaba pasando Y antes de decepcionar me al abrir los ojos, preferí buscarlo con mi mano, no estaba, perfecto.

Con el ceño fruncido me levanté de mi cama y comencé a alistar mi ropa para cuando saliera de bañarme, tenía que hacer algo, estaba furiosa, sólo le pedí que me acompañará a ver a mi mejor amiga en el hospital, pero no... tenía que irse...

- Jul ¿saldrás hoy? - preguntó Jenn desde el umbral de mi puerta.

- Si... Iré a ver a Kelly en el hospital, es que...

Había olvidado por completo contarle a Jenn lo que había pasado con Kelly en la cena de ayer, me tomó algo de tiempo, se sorprendió bastante pero se calmó de inmediato.

- ¿Irás sola? - me miró preocupada - por favor no me digas que tomaras el metro

- No, no, yo... Llamaré a Evan o Sebastian para que me lleven, no te preocupes - mentí.

- Está bien, te dejaré algo de dinero en la mesa, iré a alistarme para el trabajo

- Gracias.

Caminé rápidamente al baño y tomé la ducha más rápida de toda mi vida, había perdido algo de tiempo hablando con Jenn y no podía esperar más para ver cómo estaba Kelly. Al terminar de ducharme, me enrollé una toalla y salí del baño estaba quitándome algunos cabellos mojados de la cara cuando lo ví, estaba parado como una estatua al lado de mi cama y yo estaba en toalla, que vergüenza...

- Thomas...

- Yo... Esperaré afuera... - caminó afuera de mi habitación mirando al piso.

Cerré la puerta y mientras me vestía no dejaba de sentir toda mi cara roja, tomé un pequeño bolso donde guardar algunas cosas y salí de mi habitación.

Thomas, estaba sentado en el sofá mirando al suelo, pero cuando se dió cuenta que salí de mi habitación se paró de inmediato.

- Juliet, lo siento, no era mi intención verte en...

- Oye no pasó nada - le interrumpí - bueno si pasó... Pero fue un accidente, de haber sido a propósito te hubiera golpeado - hablé mientras tomaba el dinero que me dejó Jenn en la mesa - pensé que no me acompañarías, cuando me levanté tu no estabas y...

- Te dije que si te acompañaría - se paró a mi lado y tomó una de mis manos - tenía algo que hacer antes, pero ya estoy aquí y me quedaré todo el día de ser necesario

Lo miré fijamente y pude ver en sus ojos color avellana que no me mentía, estaba siendo completamente sincero conmigo.

- Gracias - lo abracé.

Sin nada más que decir, ambos salimos del departamento rumbo al hospital, en el camino llamé unas cuantas veces a Evan y compré unas margaritas para Kelly, le encantaban esas flores, Thomas y yo fuimos en taxi hasta el hospital, pues aún no me sentía del todo segura de querer subir al metro a su lado o recordaría todo el accidente.

Al llegar al hospital me la pasé caminando por varios lugares para poder encontrar la habitación de Kelly, ya estábamos por llegar cuando alguien me llamó

- Jul!

Volteé a ver de quién se trataba y vi a Evan corriendo en nuestra dirección, tenía unas ojeras enormes, sus rizos alborotado, en su mano derecha traía un vaso de café de Starbucks y en la izquierda traía varios globos de helio.

- Evan te llame varias veces creí que no venías - hablé cuando ya estuvo frente a nosotros.

- Dime como está ¿Ella está bien? - habló entrecortado.