Me acerco hasta donde está Luke sentado y me siento con él. Levanta la vista hacia mí y, rápidamente, la vuelve a dirigir al juego. Creo que sí que está enfadado.
Eric e Inna están hablando en la pista y Ash, Alex y Maggie hablan en la barra dónde están pidiendo. Miro a Luke directamente y noto lo triste que está. ¿Por qué seré así de perra y mala?
-Luke -digo ganándome su atención.-
Cuando se gira a mirarme se me parte el corazón en cachitos muy chiquititos. Se ve que está triste y decepcionado porque no le haya hablado por Bertie. Puede que llevemos poco conociéndonos, pero Luke se ha convertido en el idiota al que más quiero en el mundo.
Sin poder aguantarme más me pongo de pie y lo abrazo como si la vida me fuese en ello.
-Lo siento -digo.-Lo siento, lo siento, lo siento, lo siento y lo siento. Lo siento mucho Luke. Perdóname, ¿vale? Siento no haberte hablado. He sido una tonta. Si no me quieres volver a hablar lo entenderé, pero no podré vivir sin ti. Eres un idiota muy querido. Sin ti moriré rodeada de gatos. Y tú no quieres eso, ¿a qué no?
Sigo con mi discurso y de repente escucho al risa de Luke en mi oido. Eso me hace un pelín más feliz de lo que ya estaba y hace que una sonrisa se ponga en mi cara.
-Te perdono con una condición -dice y yo me separo para mirarlo a la cara.-
-¿Cuál condición? -pregunto desconfiada.-
-Quiero un besito -dice señalándose la mejilla.-
-Uf, menos mal -digo dramáticamente.-Ya creía que me ibas a pedir ser tu exclava sexual o algo de eso.
-Eso suena mejor -dice sonriendo.-Pero me conformo con mi besito.
Me acerco hasta su mejilla y le doy un beso de esos que suenan fuerte. Me separo de él riéndome como una loca y veo que las chicas se acercan con los demás. ¡Volvemos a ser el grupo!
Luke y yo decidimos echar una partida los dos y, quién pierda, tiene que invitar al otro al cine y a cenar. Dios de la mala suerte, aléjate un ratito de mi anda.
Vamos terminando la partida y voy ganando a Luke por un pleno. Le toca tirar a él por última vez y si hace pleno gana, pero sino mañana tendré cine y cena gratis.
Le estoy rezando a todos los dioses que existen y Luke lanza la bola. Derrumba nueve de los diez y el último se tambalea y... cae. ¡Ha caido! ¡Dioses no os vuelvo a rezar en mi puñetera vida!
Mañana tendré que invitarlo al cine y a cenar. Lo del cine no me importa pero la cena... es que este muchacho come como yo que sé. ¡Come demasiado!
-Bueno mañan quiero ir a ver El heredero del diablo -dice con una sonrisa de oreja a oreja.-Y luego comeremos en McDonalds.
-No me gusta el título de la peli -digo con voz de niña chica.-
-Es de miedo, si -dice Luke.-Y por eso la vamos a ver.
-¿Para qué yo no duerma otra noche? -digo con terror en la cara.-
-Luego vienes a casa y duermes conmigo -dice Ash.-
-Ja, si viniese a casa dormiría conmigo -dice Luke.-
-Conmigo.
-No, conmigo.
Decido dejarlos discutir sobre con quién dormiría yo, aunque no dormiría con ninguno de ellos, y voy al cuarto de baño.
Al entrar todo está en absoluto silencio y una de las lámparas titilaba. ¿Por qué tiene esto que parecer una peli de miedo? Hago pis y, justo cuando salgo del baño, un chorro de agua fría me cae encima.
Miro hacia los lavabos y me encuentro a Cameron Dallas allí de pie, con la mano mojada y sonriendo de oreja a oreja.
-¡Dallas ven aquí que te mato! -grito y salgo corriendo tras él.-
Salimos a las pistas de bolos y sigo corriendo detrás de él chorreando. La gente se me queda mirando como si estuviese loca y se ríen, pero ahora mismo solo me centro en matar a Dallas.
Cuando estamos cerca de mi mesa, piso mal y me caigo de bruces al suelo. Todo el mundo se deja de reír y Cameron viene hacia mi corriendo. Al creer que estoy bien se empieza a reír.
-Te dije que te ibas a arrepentir -dice antes de irse.-
-¿Quieres guerra? -digo.-¡Pues guerra tendrás imbécil!
Intento levantarme del suelo pero tengo el tobillo echo polvo y me vuelvo a pegar de bruces contra el suelo.
-¡_____! -dice Maggie alarmada.-¡Luke, trae tu puto trasero aqui!
Al ver que estoy en el suelo y no me puedo levantar me coge en brazos y me lleva al coche.
-Ahora mismo te llevo al hospital -dice.-
