32- ¡Hija de la gran puta!

11.1K 589 50
                                    

Siento como me acarician el cabello y abro los ojos poco a poco para encontrarme con una mirada triste de esos ojos marrones que tanto adoro.

Acerco mi cuerpo al suyo y él me abraza por la cintura con ambos brazos, apretando para que no me pueda escapar de su agarre. Agarro su camiseta para que él tampoco se pueda escapar y nos quedamos así, abrazados.

Levanto la cabeza un poco tras unos minutos de silencio y veo que mira hacia mi pared con una expresión que no se descifrar. Le cojo la cara y hago que me mire a los ojos.

Cameron baja su rostro hasta la altura del mío y empezamos a besarnos como si no hubiese mañana. El beso empieza siendo suave pero, conforme pasa el tiempo, se vuelve más caliente.

Cam gira y hace que quede bajo su cuerpo mientras seguimos besándonos. Empieza a deshacerse de mi chaqueta y la tira por algún lado de la habitación, yo hago lo mismo con su camiseta.

Seguimos besándonos y yo toco el torso desnudo de Cameron a mi antojo.
Él gira de nuevo y esta vez soy yo la que estoy encima suya.

Agarra el bajo de mi camiseta y empieza a subir sus manos por mis costados y la camiseta va saliendo, dejando paso a mi piel desnuda.

Termina de quitarme la camiseta y desaparece junto a la suya por alguna parte del cuarto.

Mientras seguimos besándonos y toqueteándonos, los pantalones desaparecen y quedamos los dos en ropa interior. Me quita el sujetador y rueda de nuevo, quedando encima mía y mirando mi cuerpo.

Un rubor empieza a teñir mis mejillas y quiero taparme los pechos con las manos, pero la mirada de aprobación de Cameron me atrapa completamente y hace que me olvide hasta de mi nombre.

-Todavía estamos a tiempo para parar -dice con voz ronca.-

-¿Quieres parar? -pregunto.-

-No.

-Pues sigamos.

Vuelvo a atacar su boca y seguimos besándonos contacto piel con piel.

Empieza a besar mi cuello y va bajando hasta mis pechos. Suelto un gemido ahogado cuando besa ambos y sigue descendiendo hasta mis bragas.

Termina quitándome las bragas y vuelve a subir besando el mismo camino que había hecho al bajar.

Vuelve a besarme en los labios y, sin dejar de mirarnos a los ojos, le quito los boxers.

Cameron me coge de las manos y me vuelve a besar.

-Mírame a los ojos -ordena.-

Hago lo que me dice y siento como nos hacemos uno solo por un dolor agudo que siento entre las piernas.

Cameron se queda quieto una vez que ha entrado completamente y me reparte besos por toda la cara. Se asegura de que ya no sienta dolor alguno y antes de comenzar a moverse dice:

-Te amo.

Esas dos palabras hacen que mi corazón esté a punto de estallar en mi pecho y lo beso con fervor.

-Te amo, Cam.

Empieza a moverse en mi interior con una sonrisa en los labios y los dos comenzamos a gemir como locos. Cam empieza a moverse más rápido conforme le va llegando el orgasmo y yo me corro segundos antes que él.

Se tumba encima mía cuando ha terminado y me empieza a dejar besos húmedos en el cuello. Sale de mi y me atrae a su pecho con sus brazos.

Nos quedamos dormidos en un completo silencio después de haber hecho el amor. Porque creo que eso hemos hecho, ¿no?


-¡Hija de la gran puta!

Ese grito hace que me levante sobresaltada y mirando para todos lados. Cameron sigue dormido a mi lado, Maggie está en el quicio de mi puerta mirándome con los ojos abiertos como platos, el reloj marca las once de la mañana...

¡Maggie está en el quicio de la puerta!

Me levanto de la cama, asegurándome de dejar a Cameron tapado para que ella no vea nada, y cojo la bata que tengo en el cuarto de baño. Vuelvo al cuarto y veo a Maggie intentando mirar a Cam bajo las sábanas.

La cojo de un brazo y la saco de mi cuarto. Cierro la puerta y la miro esperando que me regañe o algo por haberme acostado con Cam, pero en cambio me está mirando con una sonrisa de oreja a oreja.

-Tus padres no están -me informa.-Me han abierto y se han largado a comprar.

Suspiro de alivio y ella comienza a reírse. Comienzo a reírme con ella y me abraza, pillándome completamente desprevenida.

-Te has tirado a Cam, zorra.

-Si -digo sonrojándome.-

-¿Qué tal lo hace?

La miro con los ojos abiertos, pero aun así le respondo.

-Como los dioses.

-Tienes que darme detalles -dice emocionada.-

Nos sentamos en el suelo frente a mi puerta, una tontería lo sé, y empiezo a relatarle el como acabamos haciéndolo ayer. Le doy los mínimos detalles para que ella se quede contenta y me acaloro de solo recordar lo que pasó anoche.

Ella me entrega una camiseta que le había dejado, que era por lo que había venido, y se marcha prometiéndome que no se lo contará a nadie.

Subo a mi habitación y veo que Cam sigue en la misma postura que lo dejé y dormido como un tronco. Entro en el baño y me doy una ducha para quitarme refrescarme.

Vuelvo al cuarto y veo a Cam mirándome apoyado sobre uno de sus codos. Se levanta completamente desnudo y me besa apasionadamente.

-Has hecho mal duchándote sin mi -dice palmeándome el trasero.-Vuelve al baño.

Entro en el baño entre risas juguetonas y... ya os podéis imaginar lo que pasó.

Mi Odioso Vecino (Cameron Dallas y tú)Where stories live. Discover now