namjoon ; imaginas, reacciones, one shots y +

drunk confession ; one shot

Narrador Omnisciente

A pesar de ser viernes, había sido un día de mucho trabajo. Hyebin ya estaba exhausta, pero lo único que la mantenía motivada era que al otro día sería sábado y por fin iba a poder hacer sus actividades favoritas.
Trabajaba en un estudio de arquitectura en el centro de Seúl, justamente estaba revisando unos planos para la construcción de un nuevo centro comercial en la ciudad.

—Hyebin-ah, encontré el plano que faltaba —Namjoon se asomó por el umbral de la puerta y le entregó el gran papel. Le contestó con un "gracias" y siguió enfocada en su trabajo.

Namjoon era su compañero de trabajo, él ya estaba en la empresa desde antes que Hyebin entrara. Fue su mentor durante las primeras semanas y ahora el tipo de relación que tenían era de compañerismo dentro del trabajo, no se veían fuera de la empresa a no ser que salieran todos los empleados a cenar o para las fiestas de fin de año que organizaba su jefe.
Era un tipo tranquilo, súper eficiente e inteligente; se la pasaba callado la mayoría del tiempo pero no porque sea tímido sino porque se concentraba mucho en sus tareas. Pero además de eso también era amigable y respetuoso.

—Nunca te lo he dicho, pero creo que Namjoon y tú harían linda pareja.

Hyebin lentamente se giró para ver a su otra compañera de trabajo, Yeji, quien se limaba las uñas y la miraba de soslayo.

—¿Es en serio? —preguntó la chica con incredulidad. La de cabellos teñidos color rubio asintió. —Que tonterías dices...

—Es verdad. Los dos son iguales, trabajadores y sensatos... —afirmó la compañera. —Hasta creo que le gustas un poco. —añadió.

—Y yo creo que mucho chicle te afectó la cabeza —respondió la castaña con gracia. Se giró otra vez para seguir con lo suyo.

—Lo digo en serio, Hyebin-ssi —insistió. —He visto la manera en que te mira...

—Yeji-ah, estás viendo cosas que no son —contestó aún dándole la espalda. —Además, estoy segura de que tiene novia o está casado, es imposible que alguien tan... —dejó de hablar para buscar las palabras correctas.

—¿Tan qué? ¿Huh? —dijo Yeji. —Tan amable, tan guapo, tan inteligente ¿sigo?

—Eh, si, eso... —Hyebin sacudió la cabeza. —Es poco posible que una persona así no tenga pareja —la chica se encogió de hombros y volvió a mirar los planos arriba de la mesa.

—Las posibilidades son bajas, pero nunca cero... —dio por sentado Yeji y se fue de allí quién sabe a donde.

Hyebin prefirió no darle mucha importancia a la reciente conversación y de una vez por todas se puso a revisar los planos y papeles. Así pasaron unas cuantas horas, la chica estaba tan sumida en su trabajo que no se dio cuenta de lo tarde que era. Suspiró con cansancio y escuchó tres golpes en el marco de la puerta de su oficina. Namjoon se encontraba allí con su abrigo puesto y ambas manos en los bolsillos.

—Es hora de cerrar —dijo él y la chica instintivamente miró por la ventana,  ya era de noche y no se había percatado. 

—Woah, si no venías a avisarme era capaz de quedarme toda la noche aquí —contestó ella ordenando sus cosas y tomando su abrigo. Sintió una risa por parte del chico. 

—¿Estás de humor para ir a tomar algo? 

Hybien lo miró. Era la primera vez que él la invitaba a un lugar, normalmente el chico saludaba a todos a la salida y se iba. Pero sorpresivamente la chica estaba recibiendo una invitación de su parte. 

La verdad es que si estaba de humor para tomar algo, había tenido un largo día y al llegar a su casa seguramente tendría que cocinarse y acostarse a dormir. Prefería divertirse un poco y desestresarse.