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Te habías cansado de mirar a Robin pelear en un 1 vs todos-los-tipos-malos. No necesitaba ayuda eso estaba claro, pero decidiste acelerar un poco las cosas para cumplir con la tarea que se te había asignado. Caíste desde el edificio sobre un contenedor de basura y de ahí propinaste una patada a uno de los sujetos dejándolo al instante inconsciente. Está acción no pasó desapercibida por el otro justiciero, que llevó su vista de ti hacia el tipo que tenía enfrente. Un par de minutos después habían terminado con todos, Robin limpió su cara un poco, le había caído algo de sangre.
—¿Qué haces aquí, Anubis? .-Te preguntó sin mirarte.-
—Luces como si en verdad te sorprendiera.- Cruzaste tus brazos.— Visito a un viejo amigo, ¿Acaso no puedo?.
—No creo haberte invitado.
—Auch.- Viste que estaba a punto de disculparse, pero sonreíste para mostrarle que no te habías ofendido.—Es sólo que no te habías despedido de mí.
Él sonrió de vuelta.
—No creo que después de 4 años vinieras sólo a eso.
—Entonces otra petición. Ve y arregla las cosas con el viejo.-Iba a interrumpir pero no lo dejaste.— No te estoy pidiendo que vuelvas y seas su sidekick otra vez.
—No, al parecer esa eres tú ahora.-Rodaste los ojos.— Y siendo así no tengo nada a que volver a Gotham.-Él comenzó a caminar.-
—¡Oye!
—Pero si me alegra verte, y te extrañé. ¿Tú número sigue siendo el mismo? Te enviaré mi dirección por si quieres visitarme y hablar de asuntos que no involucren el trabajo.
