Garden of Hesperides || BOOK 4#

XVI - Repasar el Saber Amoroso

— ¿Por qué no puedo ir contigo? Jin es mi-

—Es muy peligroso. Si lo que dijo Taehyung es cierto, Kai está cerca impidiendo a como dé lugar que me acerque a Jin para sacarle de ese estado—terminó de atar la muñequera—. No creo que haga falta recordarte la falta de limites que tiene tu tío.

—Ya no soy un niño pequeño, un jabalí no me puede matar. —afirma Vernon más que ofendido por la poca confianza que aparenta tener Namjoon para con él que su primer y único hijo hasta le momento.

Además de todo y como resultado a la unión de sus padres, es el dios de la guerra amorosa por llamarlo de alguna manera. Es quién tiene el último voto en quién está condenado a perder al amante que esté en disputa. Un ejemplo muy claro de esto, es Troya: Ya está más que decidido de que Dongju -Paris-, moriría y Hwanwoong -Helena-, se iría con Youngjo -Menelao-, tras la pérdida de la guerra.

Todo este conflicto se predestinó para surgir cerca de su nacimiento y que para cuando tuviera pleno conocimiento de su lugar, fuese quién diera la mayor de las conclusiones. Incluso en uno de los hijos mortales de Seunghyun, el más hermoso sobre la faz según cada deidad a la que se le pregunte.

Una de las tonterías que hizo Jin, pero bueno, quién obliga a nadie a apostar con él en cuanto a Belleza. Algunas veces Hwasa y Namjoon pecaban de atolondrados y rabiosos con el tema*.

—Kai no va a ser un jabalí—asegura pasando de Vernon—. Ha decir verdad... Ni siquiera él es tan tonto de venir en mi contra como un jabalí y ojalá lo fuera.

—Tu me has dicho que es muy imprudente y hace todo sin pensar ¿Qué si necesitas ayuda? —pregunta angustiado de que algo pudiera salir mal. Namjoon le sonrió.

—me subestimas. Kai es imprudente y actúa sin pensar, es muy cierto, pero dentro de su propio margen es muy predecible. No quiero que vengas conmigo... sino por la parte trasera.

Vernon lo miró confundido. Namjoon es el estratega maestro, sólo él comprende en pleno espectro que es lo que pretende. Esa sonrisa confiada en su rostro inspira confianza de que pronto tendría a Jin de regreso y podría dormir en su regazo cuando Namjoon estuviese ocupado en la guerra de Troya.

Se entusiasmo como un niño, para que negarlo.

...

—Yoongi no va a volver.

Jimin no comprendió a que vino esa repentina información por parte de Jin. Su expresión lúgubre le da a pensar que es cierto lo que dice. Yoongi se perdió en el bosque tras esa divina figura acompañada de un corcel flamante. De a pequeños toques en el brazo le hizo saber lo que pensaba hacer.

—No quiero que salgas solo, sin Yoongi somos más vulnerables de lo que siempre hemos sido. Es peligroso. —le acaricia la cabeza. Jimin infló los mofletes.

Quiere ver si es cierto que Yoongi no va a volver. Quizá solo se quedó dormido a mitad del bosque y es posible ayudarlo. Soltó el agarre de Jin y salió a prisa de la vivienda con dirección al bosque. Jin suspiró con cansancio.

Algo muy en el fondo le decía que Yoongi no iba a volver... No el Yoongi que han tenido todo este tiempo.

Caricias en los hombros lo sorprendió y abrió sus ojos lechosos hasta el extremo posible. Alzó la cabeza.

—Que extraño... No eres el de siempre.

—Me hubiera gustado ser yo antes que otro tocándote.

—Y a mi... Quién no confiesa sus pensamientos, no vale para amar.