Capitulo 22: Una provocativa tentación

14.5K 747 119
                                    

-¿Qué estás haciendo aquí Hunter?-. Pregunto tratando que no me tiemble la voz.

Él me mira molesto, ¿Ahora qué carajos hice para ganarme esa mirada?, o tal vez solo es su cara de pocas pulgas que tiene siempre.

-Venía a hablar contigo pero al parecer estás muy ocupada, así qué regresaré después-.

Dice y se gira, pero no se va sin antes lanzar otra de sus miradas de muerte al peliverde que se remueve incómodo a mi lado.

-¡Espera!- Le digo y se detiene pero no se voltea -Voy a salir y no se la hora a la que regreso. Mientras estoy fuera ¿Puedes ayudarme a buscar a alguien para reparar mi cerrojo por favor?-.

Hunter me ve por encima de su hombro despectivamente.

-¿Y porqué habría de hacer eso princesita?-. Dice brusco y ahora yo soy la que se está molestando con su actitud de mierda.

-Considerando que fuiste tú quién lo rompio, creo que es justo que seas tú quién me ayude. ¿Puedes ayudarme o le tengo que preguntar a otro?-. Mi tono sonó irritado y el motero solo rueda los ojos.

-Yo me encargo-. Y antes de que pueda agradecerle desaparece de mi vista, yendo a quién sabe dónde.

-Qué raro...-. Murmuro pero no digo nada, le doy una mirada al chico a mi lado y su cara tiene un matiz verdoso como su pelo -Oye, ¿Estás bien?-.

-¿Bien?, ¡Maldita sea Tasha!, ¡Estaba seguro de que el tipo me mataría a golpes de un momento a otro!, ¿No habías dicho que no pertenecías a ningún miembro?-. Dice con la voz algo aguda.

Frunzo el ceño un poco antes de contestar.

-Hunter no te hubiera golpeado, y si lo intentara yo no lo dejaría. Y no, no llevo el parche de nadie ni soy una VD, soy cien por ciento libre-. Aseguro pero él me da una mirada que derrocha sarcasmo.

-No sé como sean los hombres en Rusia, pero ese motero en particular te veía como un cavernícola furioso que acaba de encontrar a su hembra con otro macho-.

-Qué estúpido Darren, Hunter no está interesado en mi, tal vez solo le doy curiosidad para follar una vez para ver que se siente, pero eso es todo, además de que definitivamente eso no va a pasar entre nosostros-. Digo y trato de sonar convencida. El ojiverde niega con la cabeza.

-Te lo digo Tasha, ese cuervo te ve como si fueras suya, y ningún tipo que solo quiera follar con una chica se molesta tanto por encontrarla con otro-.

-¡Lo dices como si nos hubiera visto besándonos o sin ropa!-. Le digo ya exasperada por el tema.

-Me refiero a qué...-.

Pero no pude saber a que se refería, pues America eligió ese momento para después de una eternidad salir del baño.

Ambos vinos a la pequeña rubia que se puso como un tomate bajo nuestra inspección. Lo cierto era que se veía preciosa. Su pelo estaba suelto en bonitas ondas naturales que caían hasta unos centímetros bajo los hombros. La falda le hacía un culo espectacular, y los tacones le daban la altura que le hacía falta. Aún era más pequeña que yo, pero no me cabía duda que algunos corazones se romperían aquella noche.

-¿Me perdí de algo?-. Preguntó nerviosa pero Darren y yo negamos en una tregua silencioa.

No espantar a la chica con historias de moteros amenazantes que querían parecer golpear a su mejor amigo.

-Nada rubia, solo nos quejábamos de que te tardas mucho en el baño. Si casi nos salen canas esperándote aquí afuera-. Dice el peliverde divertido y America se pone más roja.

Te Reto a ConocermeWhere stories live. Discover now