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Los días pasaban, el rey y la reina caminaban por el jardín del palacio, creían que así la bebita crecería sana y salva, es lo mejor que pasaría, la verdad es que a pesar de eso no se daban mucha cuenta del peligro que corrían con Dionne, la ex-reina y Dionne planeaban la muerte de la reina, ellas solo querían lo mejor para el pueblo o es creían; cada día era diferente, de un momento a otro Megara se empezaba enfermar, nadie sabía que pasaba con ella, la reina tenía su rutina y varias veces se había desmallado, la gente del pueblo estaba muy asustada, adoraban a su reina Megara, cada día el pueblo recibía noticias sobre su soberana, Niles estaba más que desesperado, su amada no mejoraba y su dulce niña no dejaba de llorar, en aquel cuarto el doctor trabajaba hasta el cansancio para poder saber que le pasaba a la reina, el al igual que el rey sufría por no saber lo que le pasaba a su reina, esa chica se había ganado su cariño, fue cuando se dio cuenta de que la reina empezaba a brillar.

-Calliope trae al rey –dijo y la chica salió corriendo –todos fuera de aquí – se levantó de la silla, camino hasta las cortinas y las cerro, el rey y la sirvienta entraron.

-¿Qué sucede?- dijo el, vio el brillo y le entendió –Calliope trae a mi hija ahora y después quédate si – la chica lo hizo –hola Mairk, ¿Cómo estás? – Niles se había encariñado de la diosa, casi podía jurar que la nada tanto como a su esposa.

-Muy enferma ¿Dónde está mi niña? –dijo ella colocando su mano en la de él.

-ya viene en camino –dijo el con una sonrisa –hace tiempo que no aparecías ¿qué sucede?

-Ella agoniza –dijo de golpe –alguien la envenena – Niles solo decía en su mente otra vez

–quiero que me digas ¿Quién es ahora? – el estaba muy molesto

-lo lamento tanto –Calliope entro con la bebe –no puedo decírtelo –ella la vio – hola hermosa – Calliope puso a la bebe en sus brazos – eres tan preciosa mi dulce niña, mira ella me reconoce como su madre, quiero que sepas que te daré pistas – esa bebe la hacía inmensamente feliz –sabes quería decirte que yo te quiero mucho creo que te amo – Niles abrió los ojos – no sientas que le eres infiel, quiero que me veas y me hagas sentir el amor que necesito, sabes solo quiero cariño, que me escuche si eso, no quiero que te veas forzado a decir o hacer lo que no quieras.

-yo amo a mi esposa – dijo el

-y lo sé, solo quiero que me trates como a ella, quiero cariño no que me hagas tuya ni nada, solo quiero ser amada –le sonrio.

-hay muchas formas de demostrar amor su majestad – dijo Calliope -con el debido respeto, puede demostrar amor por ejemplo, una cita, chocolate, flores, cariños, platicas hasta muy entrada la tarde, esas y muchas formas más.

-¿qué es chocolate? –pregunto la diosa

-nunca has probado los chocolates – ella negó –Calliope trae algunos chocolates para Mairk – la chica salió de la habitación – ahora mismo los probaras, son exquisitos amor mío -Mairk sonrió ante aquellas palabras.

-debes tener cuidado con esa chica –achico los ojos –Dionne, no confió en ella el que la envenena es la misma persona que contrato a la chica que le ponía anís –ella era feliz con su pequeña niña y le encantaba abrazarla.

-Parece que ella disfruta de estar contigo –sonrió – Dionne es una vieja amiga, la conozco

-ella conoce el aroma de su madre –respondió a lo primero que dijo -Niles la respuesta que encuentres no te agradara para nada.

-no quiero que me mal interpretes –tocaron la puerta y entro Calliope con una bandeja de chocolates –ya llego el chocolate, pasa Cali ¿te puedo decir así?

-si su majestad así lo desea –ella sonrió y Mairk le quería entregar a la bebe-

-carga a la nena –contesto Niles –creo que ella quiere pasar tiempo contigo, Cali deja la bandeja en la mesilla y toma algunas, siéntate –ella asintió y lo hizo – yo te daré chocolate en la boca Mairk.

-Bien esto será muy divertido –dijo Mairk – tu papi me dará chocolate como si fuera un bebe –le platico a la bebita- tu mami Megara es muy linda, y yo soy poderosa, mira –en su mano hizo una bola de luz que llamo la atención de Anthea y quería tocarla, cuando la niña toco la luz esta se convirtió en mariposas y pétalos de flores.

-Mairk – llamo la atención Niles – abre la boca –ella lo volteo a ver y abrió la boca –espero te guste el chocolate – ella probo el chocolate por primera vez en todo lo que llevaba de vida.

-esto esta delicioso -dijo ella con una sonrisa –creo que comeré otro, pero tengo que irme –sonrió y le dio a la bebe – adiós hermosa Anthea – ella cerro sus ojos y desapareció dejando a una pálida y triste Megara, demasiado cansada como para moverse sin ayuda, Niles estaba muy preocupado.

-Calliope vigila la comida de Megara -suspiro -prepara si alimento y traelo, cualquiera que se acerque a su comida me lo dirás -el volteo a verla - confío en ti, no me falles

Los días pasaban, el doctor implemento una nueva forma para que Megara se recuperara, Calliope vigilaba cada paso sobre la preparación de los alimentos, varias veces noto que la ex-reina pregunto por la comida que se le llevaría a la reina, eso la hizo sospechar después de todo ella nunca quiso a la reina; que el rey Niles eligiera a Megara en aquel baile no le parecía, pero sabía que era la única opción para que su hijo siguiera en el trono, lo que ella no se esperaba es que solo un error le costara todo lo que amaba, ella no esperaba que aquella aliada seria su verdadera perdición, ella solo quería el bienestar de su pueblo y de su hijo, ahora con el regreso de Dionne ella podría casar a su hijo con una digna reina, pero tenía que matar a la actual reina y hacer entender a su hijo que casarse con ella era la mejor opción, para Anthea, el reino y el, todo estaba listo el golpe final sería en unos días, pronto seria el cumple años de Megara y en ese momento ella aprovecharía para poner una gran cantidad de sarín para acabar con ella, solo sería otro atentado que acabó con la vida de la reina.

-Dionne espero que estés preparada para todo –dijo la ex-reina fijando su mirada en la chica sentada cerca de la ventana –serás la primera en la que sospechen.

-lo sé –respondió ella –ya arregle ese detalle, la sospechosa será alguien más –ella sonrió de manera macabra – dime algo que tal es esa Calliope como principal sospechosa, después de todo ella prepara sus alimentos.

-el rey confía en ella más que su vida, sabe que ella jamás le aria daño a la persona que le salvo la vida – Dionne perdió la sonrisa – sea quién podríamos culpar y sería más que factible que ella fuera la culpable, más de una vez se enojó frente a todos con ella.

-perfecto, esa chica será la indicada, solo hay que empezar a poner pruebas en su contra, que la odie no nos bastara –contesto Dionne.

-yo solo quiero que ella se muera ya – Dionne sonrió, era lo mejor que pasaba que la ex-reina empezara a volverse descuidada, ella llevaría todo el peso del crimen, claro que pondría pruebas contra la chica y aria que pareciera que la ex-reina puso los pruebas para culparla.

una venganza dolorosa (En Edicion)Where stories live. Discover now