【ʟɪʙʀᴏ ɪ: ꜱᴀᴋᴜʀᴀ-ʜɪᴍᴇ ꜱᴀɢᴀ】
【ᴄʀᴏꜱꜱᴏᴠᴇʀ ɴᴀʀᴜᴛᴏ x ʙʟᴇᴀᴄʜ】
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Los susurros de su nombre, las historias de quién fue... Todo parece estar tan fresco en la memoria de la Sociedad de las Almas...
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Autora POV
— Me gustaría saber el propósito por el cual me han llamado. —habló con voz calma Unohana mientras avanzaba a paso lento hacia donde el trío de mujeres se encontraba. — Tsunade-san no fue exactamente específica en su mensaje... y no dispongo de mucho tiempo para perder en asuntos triviales. —comentó.
— Necesitamos asistencia médica... —se apresuró a responder Mito. — Estamos a punto de llevar a cabo un ritual para remover el sello que bloquea la memoria de hime-sama. —dijo haciendo un pequeño gesto hacia la pelirrosa. — Hay una gran probabilidad de que el proceso le infunda una gran cantidad de dolor... Es ahí donde entras tú con tus conocimientos médicos. —explicó.
— Lo haría yo misma, pero obaa-chan me necesita para otras cosas. —comentó Tsunade, sin ocultar la animosidad que sentía hacia la pelinegra. Unohana se mostró imperturbable ante este hecho.
— Sabes que no me gusta interrumpirte en tu trabajo sabiendo las responsabilidades con las que cargas como capitana del gotei... Pero eres la persona en la que más puedo confiar para esta tarea. —la pelirroja retomó la palabra, intentando aligerar el ambiente. La capitana de la división médica asintió pareciendo comprender la situación.
— Comprendo... Daré lo mejor de mí por el bien de hime-sama. —dijo la mujer de cabellos negros. — Sin embargo, les advierto que aún tengo trabajo que hacer y deberé volver a los cuarteles de mi división pronto... ¿Cuándo planean iniciar el ritual? —inquirió.
— En unos segundos... tan pronto como Hitsugaya-taichou regrese con los elementos que le he solicitado. —contestó Mito.
La pelinegra asintió una vez más antes de posar su mirada sobre la joven princesa.
— ¿Cómo se siente, Sakura-hime? —le preguntó a la ojijade, inclinándose ligeramente para estar a su misma altura.
— Estoy... nerviosa, a decir verdad... —confesó la pelirrosa sin ver la necesidad en mentir al respecto. — No sé qué esperar, y no puedo evitar sentirme un poco asustada por eso, pero... al mismo tiempo, solo quiero que el tiempo pase más rápido para poder liberarme del sello. Siento que no podré ser verdaderamente libre hasta que no me lo quite.
