【ʟɪʙʀᴏ ɪ: ꜱᴀᴋᴜʀᴀ-ʜɪᴍᴇ ꜱᴀɢᴀ】
【ᴄʀᴏꜱꜱᴏᴠᴇʀ ɴᴀʀᴜᴛᴏ x ʙʟᴇᴀᴄʜ】
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Los susurros de su nombre, las historias de quién fue... Todo parece estar tan fresco en la memoria de la Sociedad de las Almas...
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Autora POV
Eran alrededor de las tres de la mañana, el cielo nocturno brillaba con todo su esplendor, ni un alma podía ser escuchada en la calma del vecindario, y aun así Sakura se veía incapaz de conciliar el sueño.
Los acontecimientos de aquel día la tenían intranquila, haciendo que rodara de un lado a otro en la cama mientras dejaba que su mente divagara con múltiples preguntas para las cuales no tenía una respuesta.
Había visto espíritus, shinigamis, y aquel monstruo extraño... ¿Un hollow? La pelirrosa estaba casi segura de que así era como Rukia e Ichigo se habían referido a aquella criatura.
Todo sonaba tan alucinante, como si fuera parte de un extraño sueño, o incluso como si se tratara de alguna especie de leyenda folclórica. Y... en el fondo, la pelirrosa deseaba que solo hubiese sido eso, un sueño, o incluso una alucinación producida por su medicación, pero por más que deseara que no fuese real, había una pequeña voz en su interior que le decía que todo aquello era real. Había algo extrañamente familiar en todo aquello, pero la ojijade simplemente no podía descifrar por qué.
Mientras más pensaba en ello, una imagen de dos figuras borrosas surgía en su mente. Un hombre de cabellos rubios, una mujer de cabellos púrpura... Los conocía, pero de nuevo, mientras más vueltas le daba al asunto, más enigmas sin respuesta surgían, haciendo que su cabeza doliera, y desistiera de seguir buscando una respuesta.
Luego de que todo el caos de aquel día terminara, Rukia dijo que con el tiempo respondería a sus dudas, pero no había dado muchos detalles al respecto. No estaba segura de sí sus caminos volverían a cruzarse, por lo que había grandes posibilidades de que la pelinegra no cumpliese su palabra.
Durante su camino a casa, el pelinaranja, Ichigo, se había ofrecido a acompañarla. El chico había afirmado que Rukia mantendría su palabra, y compartió algunos detalles con ella.
Según lo que Sakura había conseguido aprender, Ichigo era un shinigami sustito, solo había obtenido sus poderes gracias a la pelinegra. Él había afirmado no tener mucha idea acerca de la sociedad de las almas o los hollows, alegando que aún estaba aprendiendo, sin embargo, el pelinaranja había mencionado que estaba dispuesto a batallar contra esos monstruos con tal de proteger a las personas inocentes.
