Alfa en alquiler [KookGi] PAUSADA

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La estancia: vacía.

El comedor, la cocina, el baño de la estancia... Todo en silencio y vacío. Sin rastro de una sola alma.

Sin embargo, el pasillo que da a las habitaciones era distinto; apenas dar dos pasos podías sentir la combinación de aromas de dos especies distintas en su celo, una cosa asquerosa para los ajenos a la situación pero para los involucrados, era el aroma de dos personas asumiendo sus deseos.

El aguante físico tanto del alfa como el Omega era bastante, tanto que les permitió culminar sus necesidades por más de seis horas, con un descanso a cuando el nudo bajaba, para continuar una y otra y otra vez hasta que sus cuerpos cayeron en sudor y excitación.

Por ahora, solo estaban cansados, sólo querían dormir hasta el día siguiente sin pensar en las consecuencias y por parte del menor; en el como tendría que terminar todo esto, si cuando Yoongi recobrará el sentido podría aclarar sus sentimientos...

Pero ahora, las horas que le quedaban no quería pensar en eso, quería disfrutar el tener a Yoongi desnudo entre sus brazos y satisfecho. Le gustaba sentir su cuerpo un poco húmedo y su respiración aún agitada, ver esos ojitos pequeños entrecerrados a punto de dormir, su cabello mojado en sudor que aún conservaba ese aroma a manzanas.

Yoongi lo tenía tan atrapado, si él se lo pidiera estaría a sus pies; rompiendo ese estereotipo del Omega sirviendo al alfa, él sería su esclavo si solo así pudiese tenerlo cerca.

Atrajo al pálido más a su cuerpo, con esa necesidad de no soltarlo nunca y un quejido salió de sus labios

—¿Te hice daño?— susurro cerca de su rostro

—No, bueno, creo que es normal que mi cuerpo duela tanto...— dijo aún con los ojos cerrados, con su voz ronca pero sin ese tono meloso que había usado desde el día anterior —Jamas lo había hecho tantas veces en un solo día— murmuró pegándose al pecho ajeno, Jungkook no pudo reprimir una sonrisa al notar esas mejillas sonrojadas

—Duerme un poco y después nos daremos una ducha y pediré comida— beso su frente, cerrando sus ojos

—Que sea mucha comida.

—Pedire todo el restaurante si es necesario, cariño...— Yoongi sonrió por lo bajo, presenciando una nueva faceta en Jeon; el chico atento y amoroso.

—Cariño... Me gusta— susurro antes de quedarse dormido

La mente de Yoongi se encontraba en un gran dilema; Jungkook estaba siendo tan amable, tan tierno demostrando que en verdad gusta mucho de él. Otro en su lugar se hubiese limitado a seguirle la corriente de manera frívola y él en ningún momento le hizo sentir mal, no fue brusco y se preocupó por atender cada una de sus necesidades.

Era muy poco tiempo pero, ya estaba desarrollando sentimientos por Jungkook, mentiría si dijera que estar entre sus brazos, hacer el amor con él y ser tratado como un ser divino no le gustaba.

Después de un par de horas despertó, no quiso hacer un gran escándalo porque sintió que el pelinegro aún dormía. Se vio en la necesidad de alzar el rostro y contemplar al ser más bello que pudo existir; Jungkook dormía tranquilamente con una expresión dulce y una diminuta sonrisa escapando de sus labios.

Él... Él estaba feliz.

Y quería creer que no era porque tuvo sexo como si el mundo fuese acabarse ese mismo día. No, en realidad era la sonrisa de un alfa que había encontrado su hogar, Yoongi quería creer que ambos estaban en casa, con su persona especial.

¿Así es como se debía sentir querer?

Es decir, él amaba a mucha gente, su familia por ejemplo, pero claro, este es un caso distinto y sin comparación. Porque lo que comenzaba a sentir por Jungkook era nuevo, le asustaba, sí pero su pecho se sentía tan cálido a su lado, sentía que mientras estuviese cerca de Jungkook jamás volvería a sentir frío.

No tenía mucha experiencia con alfas, eran contados los pretendientes o parejas que tuvo en toda su vida pero no se sentía igual, no podía comparar a su primer amor con lo que sentía ahora.

Y su perspectiva sobre el amor cambiaba con solo mirar a los ojos a Jungkook.

No sabía que hora era, pero definitivamente su estómago ya pedía por comida, su cuerpo estaba pegajoso y sonrió vergüenza al bajar la vista y toparse con su abdomen lleno de sus propios fluidos o sentir su trasero y muslos pegarse por lo que escurrió horas antes por allí. Con cuidado se sacó los brazos del alfa de encima suyo, este se removió un poco cambiando la posición de su cuerpo, quedando boca arriba. Aprovecho para pasar con cuidado sobre él para bajar de la cama e ir a ordenar algo para comer

—¿Que sucede? ¿Necesitas algo?— dijo un medio dormido Jungkook, cuando sintió el cuerpo de Yoongi sobre él

—No bebé, duerme— se inclinó para dejar un beso dulce en sus labios, pero Jungkook tomo de sus caderas inmovilizando su cuerpo

—No soy un bebé— dijo con la voz ronca y los ojos aún cerrados, Yoongi río bajo

—Ahora pareces uno— Dijo en un tono suave, besando su nariz —Anda, sigue durmiendo, es mi turno de conquistarte— Jungkook sonrió soltando al pálido, feliz de escuchar esa última palabra.

Sin embargo, Yoongi moría de vergüenza, no era eso lo que quería decir, él se refería a "consentir" y su mente y lengua le traicionó haciendo que hablara cosas que debían permanecer en su mente.

Bajo de la cama y observó su celular en la alfombra, no recordaba cómo llego ahí pero lo tomo llevándolo al baño con él.