CAPITULO 33. Turbulencia

1.2K 89 14
                                    

NARRA: _____

La turbulencia es un laxante para el vomito muy bueno, en las cuatro horas que llevamos de viaje he vomitado más veces que toda mi vida.  En cambio Tom está plácidamente sentado y viendo una comedia malísima, aunque veo que se ríe muy seguido, cada quien sus gustos ¿no?

El viaje durará unas tres horas más y por fin podré salir de este monstruo metálico.

Ahí bueno, otra vez.

Las bolsitas para el vomito empiezan a escasear, help.

—Respira, trata de dormir, ven— dice y me abraza.

—Ya lo intente y no puedo—estoy desesperada.

—Estás horriblemente fría _____— rueda los ojos y comienza a buscar algo en su mochila de viaje —, ten póntela, te sentirás mal calentita— me entrega una sudadera negra, presiento que será un poco grande para mi.

—Gracias—comienzo a ponerme la sudadera.

Al momento siento como el frío que tenía se empieza a transformar en un calor tan reconfortante, respiro hondo, el perfume de Tom es delicioso, de verdad que huele bien.

—Recuéstate— dice y se pega en el hombro.

—No te quiero incomodar Tom— me ve un poco enojado.

Chaparrita, no incomodas, en este momento lo único que quiero es ser tu chico, el que es romántico— me agarra de los cachetes y me da un beso— , ahora solo recuéstate y descansa—

Y lo hago, me recuesto, con el calor de la sudadera y lo cómodo que es Holland el sueño por fin llega y caigo en los brazos de Morfeo.

...

¡Mami!— me estoy viendo, estoy aquí, pero ahí también. Estoy viendo a mi yo de siente años.

—Oh mi amor, ven, gira conmigo— veo a mi mamá que me llama con los brazos abiertos.

Mi yo pequeña corre, salta y es atrapada por mi madre, él comienza a girar con ella en brazos; cuantos recuerdos.

—Mi amor si algún día no llego a estar, se fuerte, ten las agallas de seguir, toma impulso, corre y salta, como lo acabas de hacer, pero esta vez hacia tus sueños, ¿quieres ser doctora?— yo asiento decidida— Quiero ver que lo logres, yo sé que lo lograrás, quiero ver que seas la mejor de tu clase, que digo de tu clase, de toda la Universidad. Aunque no lo creas nosotros tenemos mucho dinero, y lo tenemos porque hemos sido constantes, tu padre y yo no nos rendimos. Y tú— me señala el pecho— tampoco lo harás. Tu padre, oh, el hombre de mi vida, ámalo, ámalo más de lo que los haces ahora, eres la luz de sus ojos. Todo lo que él hace es por ti, absolutamente todo. Ah, se me olvidaba, ve más allá de lo que todos te dicen, cuídate hasta de tu sombra, no todos son los que aparentan, se lista hija. Y también aprende a perdonar, a entender a los demás, ponte en sus zapatos. Piensa en frío. Eres preciosa hija. Te quiero— veo, a lo lejos, como mi yo pequeña cae de pie, mi madre desaparece como humo, y mi yo solo se queda mirando un punto.

¿Todo está bien madre? Esa pregunta da vueltas hasta que siento un movimiento que cambia mi postura.

—Corazón— me hablan al oído, me muevo— chst, chst, chst— me soplan al oído—, chaparrita, hemos llegado. — y mi mente conecta, por fin.

—Tom...—digo

—Estás un poco pálida— me toca la frente—, estás sudando, ¿todo esta bien? —No, mi sueño fue...raro. No lo digo, lo pienso.

—Si, solo que tengo un poco de calor —sacudo la sudadera en busca de aire— ¿hemos llegado?— asiente.

—Solo faltabas tú en despertar, te veías tan tierna durmiendo— dice y me tiende la mano, la tomo y me levanto. —La casa de mis padres, donde están mis abuelos, está a unos treinta minutos de aquí, así que entre más rápido bajemos del avión más rápido llegaremos hermosa—

—Entonces vamos, andando— comenzamos a caminar por el pasillo del avión, somos casi los últimos, sus padres ya están afuera, junto con Paddy.

Nos subimos al coche que ya estaba estacionado aquí. Todos tenemos una cara de sueño.

Londres es tan diferente a Manhattan, aquí aunque hay la misma cantidad de gente aglomerada por la calles, el ambiente se siente más tranquilo, sin tantos claxons soñando por doquier.

Volteo a ver a Tom, que esta del otro lado, Paddy a decidido sentarse entre nosotros, es un niño tan dulce. Holland solo me sonríe y guiña un ojo.

—¿Tom te ha contado de Tess?— asiento a la pregunta de Paddy—Le caerás bien, o bueno eso espero, las otras chicas que Tom ha conocido no han sido fans de Tess— dice y sonríe.

Tom solo lo calla y me vuelve a sonreír un poco apenado.

Sigo pensando en el sueño, aunque cada vez que trato de recordarlo mejor se esfuman partes, como si tuviera un tiempo exacto para estar en mi memoria.


¿Que pasara? ¿qué misterio
habrá? Puede ser mi gran
noche. Tun turun tun.
–𝖜𝖆𝖑𝖐𝖎𝖓𝖌 𝖒𝖊𝖒𝖊 🥐

AMOR CLICHÉ || T. H. [EN PAUSA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora