-¿Cómo estás mamá?.- James me aparta el pelo de la cara.
-Me duelen los riñones.- Gimo de dolor.
-No te muevas mucho.- Me ayuda a acomodarme.
-¿Estáis bien en casa?.- Lo miro.
-Intentándolo.- Asiente.
-Espero que me den el alta.- Suspiro.
-Si no estás bien, no.- Besa mi frente.- Te he hecho sopa.
-Gracias mi vida.- Agarro su mano y la beso.
-¿Quieres algo?.- Acaricia mi brazo.
-Quiero ver a Lucy.- Lo miro.
-Esta tarde la traigo.- Deja un beso en mi sien.
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-¡MAMI!.-Lucy me abraza fuerte.
-Hola reina.- La abrazo aún más fuerte.
-Mami te quiero.- Me sigue abrazando con la misma fuerza.
-Oish.- Acaricio su pelo.- ¿Cómo te has portado?
-Bien.- Se tumba en mi pecho.
-Muy bien.- Beso si frente.
-¿Me puedo quedar un ratito contigo?.- Me mira.
-Claro amor.- Acaricio su espalda.
-Señora Horan.- Entra el médico.- Ya tenemos sus resultados.
-¿Sí?.- Lo miro.- Dígame.
-Tiene una infección en su sistema urinario.- Mira su papel.
-¿Y como ha podido pasar eso?.- Me incorporo un poco.
-Se le pegó una enfermedad por transmisión sexual.- Me mira serio.
-Eso no puede ser.- Niego.- Mi marido no tiene ninguna enfermedad.
-¿Quién dijo que la enfermedad la tenía su marido?.- Se cruza de brazos.- ¿Tuvo sexo con alguien más?
-¿Usted cree que soy tonta?.- Ruedo los ojos.- Estoy casada desde hace 20 años y tengo dos hijos. No.
-Pues entonces pregúntele a su marido si se acostó con otra mujer.- Asiente.
-Mi marido, ¿con quién se va a acostar?.- Se me sube la sangre a la cabeza.
-Pregúntele, pregúntele....-Niega y se va.
-Será cabrón.- James se levanta del sillón enfadado.