Cap. 120 Un sentimiento de desajuste

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Esta postura restrictiva estimuló a Xia Yao a un punto de emoción excitante, probando sus límites. Las corrientes eléctricas se dispararon desde su cóccix hasta su columna vertebral, haciendo que sus neuronas temblaran. Una ola de mareo lo cubrió bajo la sensual atracción de Yuan Zong, haciendo casi imposible continuar su débil resistencia.

"Jódete ... idiota ..." Incluso la voz de Xia Yao estaba empezando a temblar.

Inesperadamente, Yuan Zong metió su mano en la camiseta de Xia Yao, pellizcando sus dos sensibles pezones.

Como si hubiera sido electrocutado, Xia Yao luchó con todas sus fuerzas para alejar la mano de Yuan Zong. Sin embargo, esto condujo a más ataques de lluvia por parte de Yuan Zong mientras su dedo persigue la delicada piel de Xia Yao. La sensación mixta de dolor y picazón hizo que Xia Yao girara para agarrar el cabello de Yuan Zong, tratando desesperadamente de liberarse.

Sin perder un solo latido, Yuan Zong enterró su cabeza debajo de la ropa de Xia Yao para explorar cada gota del sudor de este hombre con su lengua.

Esa sensación familiar una vez más atacó el frágil sistema nervioso central de Xia Yao cuando volvieron a aparecer destellos de experiencias placenteras y sentimientos indescriptibles. Además, todos estos recuerdos fueron provocados por la hábil lengua de Yuan Zong, es como una llave que abre fácilmente la última defensa de Xia Yao y luego lo tortura de manera dominante.

Después de la lucha interna contradictoria, Xia Yao balancea irracionalmente su cintura para seguir la lengua de Yuan Zong, coordinando rítmicamente con ella.

Las pupilas de Yuan Zong se pusieron de color rojo brillante, recuerda el baile seductor de Xia Yao en el escenario de esta noche, así como las miradas apreciativas, casi sucias, expresadas en la audiencia. Esas dos imágenes se enfrentaron para convertirse en un fuego furioso dentro de Yuan Zong, rogándole que llevara a cabo una masacre.

De repente, Xia Yao sintió un intenso dolor en su trasero.

Yuan Zong le había arrancado el cinturón de Xia Yao con rudeza y le había bajado los jeans de una manera bárbara.

"¿No te gusta alardear de tu cintura a menudo? ¿No te gusta mostrarle a los demás tu gran trasero? Déjame ayudarte a bajarte un poco los pantalones para que puedas lucirlo".

Una fuerte sensación de humillación convierte la lucha de Xia Yao en un feroz esfuerzo por escapar, pero solo despertó más la naturaleza bestial de Yuan Zong. Agarró las muñecas de Xia Yao con un apretón mortal y lo forzó a sus espaldas. Los botones en los pantalones de Xia Yao se separaron bajo la fuerza extrema cuando la habitación de repente hizo eco de un doloroso sonido de jeans rotos.

Al sentir un viento frío golpear sus nalgas, las venas de la mano de Xia Yao salieron, su cara explotando en un vergonzoso enrojecimiento.

"Joder ... pervertido".

Yuan Zong le quitó todos los pantalones y la ropa interior a Xia Yao, pero no se los quitó por completo. En cambio, los dejó descansar justo por encima de los muslos de Xia Yao para exponer la redondez del trasero de Xia Yao.

Pero debido a esto, Xia Yao sintió el calor de la carnalidad degradante.

"Muévete, sigue".

Otra poderosa nalgada cayó sobre el trasero desnudo de Xia Yao, haciendo que apareciera una huella de palma rosa.

Xia Yao lanzó un doloroso gemido. Todo esto pronto había excedido su límite de supervivencia. Incluso cuando su relación se fortalecía, Xia Yao nunca había soportado un juego tan emocionante, y mucho menos durante este período de guerra fría con Yuan Zong. Las pupilas de Xia Yao se dilataron solo pensando en torcer su trasero desnudo frente a un hombre. Su corazón se sacudió bruscamente; ya no puede sufrir esta humillación.

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