9. Under my command (Parte 1)

729 47 1
                                    

         //Bajo mi mando//

—Chat, no te dejes engañar, entrégame tu akuma, éste tipo te está sonsacando. —dijo sin que los nervios la dejaran en paz. El villano de blanco la observaba fijamente, con odio y ganas de hacerla pagar por cada una que le debía.

Jean soltó una fuerte carcajada y observó a Chat Blanc para darle una sola órden.

—Destrúyela.

Inmediatamente el gato se lanzó contra Ladybug para comenzar a atacarla y terminar con ella de una vez, en ésta ocasión sin que nadie ni nada pudiera detenerlo, pues podía usar su cataclismo las veces que se le diera la gana.
Ambos corrían literalmente por al rededor de toda la Torre Eiffel sin parar; el miedo nunca dejó en paz a la superheroína y éste aumentó en cuanto Chat Blanc utilizó su poder para destruír el suelo y que ella pudiera caer al vacío.
Afortunadamente eso no pasó gracias a que su agilidad e instintos le ayudaron antes de que el desastre ocurriese, sino ahora mismo estuviera bajo una enorme roca aplastando su cuerpo.

Cuando él se acercaba lo suficientemente no tenía mas opción que golpearlo y defenderse con ayuda de su yo-yo, haciéndose un escudo para que él evitara hacerle algún otro daño a parte de los golpes que ya le había regalado.

Una fuerte patada en la cara fue suficiente para debilitarlo y salir corriendo de ahí e ir a buscar otro escondite.
Otra vez se encontraba en el mismo lugar donde llegó con anterioridad, pero Hawk Moth irrumpió su camino de sorpresa con su teletransportación antes de que Ladybug pudiera huir; ésta frenó sus pasos rápidos de golpe provocando que casi cayera frente a él, pero se quedó de frente, lista y atenta por si intentaba atacarla.
Ésto no hizo falta ya que Chat Blanc la pudo alcanzar de vuelta, atacando a la chica por la espalda, sujetando fuertemente sus manos y apegándola con brusquedad a su cuerpo.

—¡No! —gritó desesperada cuando se encontraba acorralada por la fuerza del gato blanco.
El rubio cubrió la boca de la indefensa muchacha para que impedir que gritara.

—Se acabó tu tiempo, Ladybug. —le susurró en el oído para después disponerse a quitarle uno de los aretes.
Jean sonrió victorioso, el traje y antifaz de Ladybug comenzaba a desaparecer poco a poco y ambos aretes empezaron a palpitar rápidamente. Quitarle el segundo pendiente sería como quitarle un dulce a un bebé.

—¡Adrien, detente! —esa voz femenina llamó la atención de los tres combatientes.
Era Emilie Agreste y se salió del auto lo más rápido posible para llegar hasta donde estaban ellos.

—¡Emilie, no! —Gabriel intentó detenerla, pero le fue imposible. Ella no permitiría que su hijo se convirtiera en un monstruo.

—¿Mamá? —el villano se quedó perplejo al verla llegar hasta ahí.
Pero esos no fueron los únicos que se quedaron en shock frente a la inoportuna presencia.
Ladybug aprovechó la distracción del gato para arrebatarle el arete que sostenía en sus dedos y se safó de sus brazos con un fuerte golpe en la costilla, el cual casi fue en vano ya que no le provocó tanto dolor a su enemigo.
Su traje rojo volvió a la normalidad y sus pendientes dejaron de parpadear en cuanto devolvió su arete al agujero de su oído.

Tal hecho sólo fue visto por ellos dos a razón de que Jean se encontraba bastante asombrado por la presencia de Emilie.

La chica de coletas estaba sufriendo por un leve colapso mental por la sorpresa que se había llevado hace unos segundos, acababa de descubrir la identidad de su enemigo de la manera mas tonta e inesperada. Su cerebro aún no podía procesar con exactitud la noticia.
Ella se giró completamente para quedar cara a cara con Chat Blanc, lo que le sirvió para darse cuenta que él se mostraba preparado para lo que se venía.

Bajo Mi Mando (Miraculous ladybug)Where stories live. Discover now