Pasión Bajo las Arenas del Desierto Arabico (Trilogía Pasión Y Cultura#1)

Capítulo 21

P.O.V HADARAH

— Fadil no es lo que tú piensa. Estoy nerviosa por lo sucedido dentro de casa
— ¿Y qué es lo que pienso según usted?
— E-este.... — Hadarah vi todo lo que sucedió, desde que madre entro al salón hasta donde tú le devolviste el golpe — Fadil no quiero que vayas a creer que voy por la vida dándole golpes a mis mayores el sonríe — Lo sé mi flor solo fue una reacción después de todo ella siempre que puede te agrede verbalmente, — lo miro atónita — si mi flor se que desde que ella tiene oportunidad ella te insulta. Pero ya no hablemos de esto, hoy vamos de pasa día al jardín mi flor.

Así pasaron la semana mi araba consintiendo me, pero sin hacerme el amor estoy verdaderamente frustrada por el tema, pero esta noche no me daré por vencida o dejo de ser hija de mis padres.
Al caer la noche me visto lo mas provocativa que puedo ya que mi barriga esta grande. En la habitación de Fadil hay un reproductor de música le voy a bailar. Pasan los minutos y Fadil tarda cosa muy extraña ya que siempre llega muy temprano al rededor de una hora Fadil entra por las puestas de su pieza, me hago la dormida, siento como pasa su mano por mi rostro
— Nuestro hijo te tiene muy dormilona, se me hizo tarde en pozo. siento como se aleja y entra a los baños supongo que se irá a bañar así que me paro de la cama prendo las velas el aroma se riega en el ambiente, luego de unos minutos que me parecieron una eternidad siento como la puerta se abres dejando a un Fadil bañado, tuve que usar todo mi auto-control para no correr hacia el
— ¿Hadarah? llama mirando hacia todos los lugares _— tome asiento, veo como frunce el ceño
— pensé que esta..... — Silencio hablo callándolo de su conversación, levanta las manos en señal de paz se sienta en la silla que antes había colocado antes de cerrar la puerta, pulso el botón y la música comienza a fluir.

P.O.V Fadil

Tomo asiento cuando de repente comienza a sonar música, pero no logro ver a Hadarah según cuando hablo el timbre de su voz sonó desde la parte más oscura de la pieza, cuando voy a hablar nuevamente de la oscuridad sale una Hadarah ataviada, con una vestimenta que por Allah! debería de estar prohibida, la veo dar paso al ritmo de la música se me acerca, levanto mi mano para tocarla pero ella levanta su dedo diciendo que no.

Los movimientos están en sincronía, miro su cadera que están más ancha gracias al embarazo, pero no por eso dejan de dejarme sin aliento, me mira con su penetrante mirada y sabe que me gusta el movimiento de sus caderas ella las menea a un ritmo pecaminoso, el embarazo le sienta de maravilla, sus movimientos son sensuales, lentos, siento como mi cuerpo comienza a calentarse, de solo pensar lo que puedo hacerle, o lo que ella puede hacerme.

Me pierdo en sus movimientos. Camina hacia mí, coloca uno de sus pies sobre mí, yo al instante desciendo y beso sus pies. Ella me baila al rededor y yo solo puedo respirar con dificultad veo la lujuria en sus ojos esa pasión que nos consume a ambos, que hemos suprimido por meses, pero mis manos pican por tocarla, para escucharla gemir mi nombre, nuestros cuerpos sudorosos siento como me toca se sienta sobre mis piernas para luego besarme levanto mis manos pero ella las aparta, besa mis labios de una manera, hace que mi cuerpo reaccione de manera impresionante, sus beso van descendiendo por mi cuello llegan hasta mi pecho y paran levanta su cabeza me mira a los ojos y desprende prende los botones de mi camisa mientras nuestras miradas están conectada, me besa y hace un reguero de ellos por todo mi pecho, desciende hasta mis pantalones de dormir, dejo de respirar y pienso pararme, pero ella me detiene con una mirada me quedo tranquilo observando que piensa hacer me da leves toques a mi cintura para que levante lo hago y baja mis pantalones, dejándome desnudo, a su merced. Hace que me ponga de pies. Baila muy pegada a mí para así bajar a esta altura del baile se pone sobre sus rodillas y me mira veo malicia en su mirada, toma mi pene y lo acaricia lento gimo y hecho la cabeza hacia atrás, su mano sube y baja sobre mi falo, — Hadarah.... hablo en susurro por el éxtasis, de sentirla acariciar me sin pudor alguno, abro los ojos al sentir como sopla la punta de mi pene me volverá loco— ¿te gusta? Me pregunta ella mirándome mientras todavía sus manos siguen con su magnífico trabajo — S-si. Mi voz esta mas ronca que de costumbre miro hacia ella y veo como pasa su lengua sobre sus labios sé lo que le está pasando por la cabeza — no ha— darah..... Cuando se metió mi pene a su boca dejándome sin aire.
— _fi sabil allah hablo en árabe....... y me dejo ir