Capitulo 15

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P.O.V MADRE DE FADIL

Aunque hayas retenido a tu hijo para que no vaya a ver a esa mestiza solo tuvo que tener un mínimo descanso para ir corriendo donde esa maldita mestiza, le digo a Adel el ni se inmuta solo me observa.

— ¿Qué piensas hacer? pregunto

— No lo sé—dice el pasándose las manos en el rostro. — El padre de Lamya me está cuestionando, sobre el compromiso de Fadil y Lamya, él dice que no nota interés en nuestro hijo.

— Pero como va a mostrar interés en Lamya si se anda arrastrando detrás de esa maldita mestiza, maldita la hora en que ella se cruzó en su camino

— Bueno querida deberías de agradecerle, a esa mestiza porque de lo contrario no tendríamos a nuestro hijo aquí. —Dice él dejándome sorprendida. — ¿Qué quieres decir que gracias a ella es que mi hijo a regresado? le digo alarmada. Se queda en silencio mirándome con sus penetrantes ojos. — Contesta me ADEL. Furiosa, Adel da un suspiro cansado se levanta de su escritorio y camina hacia las ventanales se queda observando hacia afuera. —Me han informado, que cuando Fadil llegó al pueblo, llegó acompañado de una mujer mestiza. Según tengo entendido él se la arrebató a unos bedwin del desierto que pretendían secuestrarla. Ella al parecer venía hacia aquí, él está aquí por ella esa es la razón por la cual se quedó, más sus intenciones nunca fueron regresar a casa. Lo miró asombrada —ósea que nuestro hijo no ha venido por nosotros

— No.

Estoy furiosa como se atrevió esa maldita mestiza mi hijo no puede mezclarse, ¿Qué dirán nuestras amistades? ¿Cómo quedaremos frente a nuestra sociedad?, nunca dejaré que mi hijo se mezcle con esa maldita mestiza, primero la mato, antes que tal atrocidad suceda. Primero muerta antes que ni linaje se mezcle con el de la maldita ramera de su madre. salgo hacia la sala de estar, pensando en que debo de hacer para apartar a mi hijo de esa mestiza, ahora que recuerdo la conversación que tuve con Adel sobre los forasteros del desierto, según tengo entendido ellos la querían, pues entonces vamos a dársela para que ellos hagan con ella lo que le plazca. Mis labios curvan una sonrisa. — ¿Madre que es lo que te causa tanta gracia? me dice Sadiq haciendo que me espante, — Tranquila madre. Me dice.

—Nada solo pensaba en el futuro compromiso, de tu hermano con mi querida Lamya, el frunce el ceño en modo despectivo.

—Madre mi hermano no ha dejado lo suficientemente claro que no quiere casarse con esa mujer. Dice lo último con un aire despectivo

— Pues se casara con ella, o que se olvide de nosotros.

— Madre esa mujer a la que tanto desprecias es la prometida de mi hermano, es la que porta un anillo de zafiro en su dedo, y es la mujer que eligió y sobre todo la mujer que él ama. Dice para luego levantarse dejándome más furiosa de lo que ya estaba

— AMIN! llamo a mi siervo para que me haga el trabajo. Llega hacia mí a pasos apresurados con el rostro hacia abajo —Si señora.

—Necesito que me hagas un encargo _Claro señora usted dirá..

— Que vayas a las cuevas de los bedwin... el levanta el rostro veo el pánico en sus ojos —Pero señora eso es muy peligroso.....

— ¿estás cuestionando mis órdenes siervo?... digo mirándolo enojada, — Que no se te olvide que eres un simple siervo en esta casa ¿me estás escuchando? — Sí señora.... —como te decía vas a ir a las cuevas y vas a preguntar por los bedwin que iban a raptar a una americana y un forastero se la arrebato. Le dirás que sabes donde esta esa mujer, y que si todavía están interesado en ella. Luego darás esta dirección digo sacando un papel que tomé del escritorio de Adel, se lo extiendo, él lo toma sin levantar el rostro. Puedes retirarte le digo, quiero que partas ahora mismo.

Pasión Bajo las Arenas del Desierto Arabico (Trilogía Pasión Y Cultura#1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora