quince

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Me desperté algo temprano para regresar a mi habitación pues esto se vería mal, el yo estar en la misma cama que Nikki Sixx pero tengo que aclarar que nada pasó anoche, tan solo me quedé dormida. Me levanté y me fui directo al baño para lavarme la cara pues siento que me veía asquerosa, y cuando salgo del baño, Nikki se muestra y me toma de la cintura para abrazarme por la cintura.

- hola. - me dice acercando se para darme un beso pero doy un paso atrás, como quiera sigue agarrado de mi. - ¿que?

- solo pensé que tu te acostabas con una chica esa noche y ya no vuelves a hablarle.

- yo no me acosté contigo. - me toma del rostro y me empuja a la pared para seguir besando me y no me quejo, que buena manera de despertar. - por mas que así lo deseé. - me susurra.

Alza mis manos y las dejó pegadas a la pared pues el empieza a besar de mi cuello y luego tomando de mis pechos para bajar a mi cintura. Estaba disfrutando tanto esto hasta que la puerta la tocan y me escondo detrás de la puerta. 

El la abre sin ningún miedo alguno y se muestra Doc, eso lo intuí por su voz.

- Nikki  ¿has visto a Margot? - oh no, me estaban buscando. ¿pero por qué?

- no. - es lo único que dice, y se hace un silencio. - estoy con una modelo candente  si no te molesta... - empieza a cerrar la puerta.

- tenemos que irnos de nuevo a California, te veo en una dos en el camión. -  y ahora si cierra la puerta.

- diablos, tengo que irme. - fui a la cama a tomar mi bolso y mi ropa de ayer, ahorita me encontraba usando su camiseta así que tenía que cambiarme, voltee a ver el baño pensando si entrar a cambiarme.

- me volteo si quieres. - asentí y me quité su camisa. - aunque ayer te vi desnuda ya pero no importa. - voltea un poco y le lancé su camiseta a la cara. - no me puedes culpar por querer voltear.

. bien Nikki Sixx, espero y tu herida sané y que tu gira siga siendo de lo más exitosa. - estaba por irme a la entrada cuando este me detiene. - ¿olvide algo?

- que te pasa? - me mira confundido.

- ¿como que que me pasa? Nada pasó aquí. - me toma de los hombros y me sienta en la cama, el se sienta en la cama gemela de enfrente. - ¿verdad?

- no lo sé, eso me lo tienes que contestar tu

- ¿y que? ¿ahora somos novios o algo así? No Nikki, eso no pasará. Para ti, un chico apuesto con millones de chicas hermosas que puedes tener a diario... no creo que prefieras pasar tus días con la aburrida Margot.

. deja de hacerte menos, todo el tiempo haces lo mismo y me parece una mierda que hagas eso. - ahora yo fruncí el ceño, me volvió a hablar como antes. - si Margot, dije la palabra mierda y no tiene nada de malo.

. no dije nada.

- pero lo pensaste. - me conoce bien. - yo solo se una cosa, se que me gusta mucho estar contigo, se que no quiero que salgas de esta habitación y que no vuelvas a hablarme, se que quiero que seas mía. - se levanta y se acerca a mi para verme directo a los ojos, después mirar mi boca. - se que quiero ser el hombre que te haga el amor tan duro que me pidas que quieras mas. 

Nuestros rostros estaban a menos de un centimetro y eso hizo que mi respiración fuera mas agitada.

- lamento arruinarte tu fantasía pero tu sabes como soy y como pienso.

- si, tienes razón. - me acaricia la mejilla. - y estoy dispuesto a esperar.

- ¿que pasó en una noche para que desdieras ser así conmigo?

- ¿tu en verdad crees que lo nuestro lleva tan solo una noche? aunque no te acuerdes, tu me habías pedido que te besará.

- te dije que no recuerdo eso. - me reí y esto dejó de ser un momento serio, el también se ríe y se tira en la cama conmigo para hacerme cosquillas.

- Nikki. - se escucha en la puerta a Anastasia, por un momento me había olvidado de ella. - ¿estás ahí? si, es así, ábreme que quiero cocaína y algo se sexo mañanero ¿te apuntas?

Me incomodé un poco al escuchar eso y me levante para de nuevo esconderme detrás de la puerta, lamento mucho no poder ser como ella y darle ese sexo que el quiere y se lo mucho que quiere pues estaba consciente de lo mucho que lo tenía antes, mínimo cuatros veces al día y con personas diferentes.

Abre la puerta y cuando ella entra a la habitación lo empieza a besar, empujándolo a la pared, no me iba a quedar aquí viendo esto, así que me salí. Había dejado todo ahí y solo me quedaba en la camiseta de Nikki pero en verdad esperaba que nadie me viera así en lo que llegaba a mi habitación. 

Llegué a mi habitación y lo primero que quería hacer era darme un baño y cambiarme esta maldita camiseta pero fue algo tarde ya que Ruby estaba en mi cama esperando me. Me ve y abre la boca.

- no es lo que parece, en verdad no es lo que parece. - y es cierto, ella va a pensar que yo ya me acosté con el cuando nada que ver.

- Margot no me la puedo creer, te acostaste con Nikki Sixx. - casi lo grita y le tapé la boca, no quería que Tommy o los demás escuharan.- perdiste tu virginidad con el.

- no la he perdido, tonta. - me mira con el ceño fruncido, quité mis manos de su boca para poder explicarle. Me senté en la orilla de la cama y ella igual. - ayer el se cortó así que yo le cosí la herida y nos besamos, eso si pasó. Me quede dormida en su habitación y eso fue todo. - prometimos los dos no decir nada pero es mi mejor amiga. 

- ¿solo un beso? Eso no suena a algo que el haría.

- eso mismo pienso yo. - estoy tan confundida.

La puerta se escucha abrirse y es Anastasia la que entra, no esperaba verla tan pronto, supuse que se quedaría mas tiempo con Nikki. Le hice caras a Ruby de que no dijera nada, no quería que nadie mas supiera, en especial ella.

- hola Anastasia ¿que tal todo? - le pregunta Ruby. - ¿que hacías?

- cogía con Nikki.

- ¿justo ahorita? - le pregunta Ruby y ella asiente

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- ¿justo ahorita? - le pregunta Ruby y ella asiente.


Como pensé, muy bueno para ser cierto.

Beautiful liar | The DirtDonde viven las historias. Descúbrelo ahora