E A S T S I D E-Jjk-

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Durante el camino hacia el restaurante ninguno habló.
Todo estaba en silencio a excepción de la radio que estaba en una emisora donde una persona hablaba sobre el clima del día siguiente.

Jungkook estaba al volante y Yang solo miraba la ventana y aveces desviaba su mirada hacia el perfil de su "chico", admirando lo hermoso que era. Y ella notaba como el sonreía de vez en cuando.

Yang volvió su mirada a la ventana mientras que Jungkook buscaba una manera de poder hablarle o una excusa. El chico nunca había sido bueno para iniciar una conversación, de hecho cuando no quería hablar con sus amigos las conversaciones consistían de un: hola, ¿cómo estás?, bien que bueno, adiós. A excepción de Yang se pasaba horas hablando con ella o simplemente texteando.

Y una idea chocó con su cabeza, o más bien sus pensamientos, cuando sintió otra mirada de Yang. De inmediato quitó una mano del volante y apago la radio.

- Me vas a desgastar de tanto mirarme- usó la típica frase de películas. Llevó su mano al volante y miró a YangMi con una pequeña sonrisa en sus labios.

- Esa frase me suena...- fingió pensar mientras fruncía el ceño- la e escuchado en otro lugar...

Jungkook la miró y ella hizo contacto con su mirada.

- ¡Ah! ya se, lo he leído mucho en los libros, muchas veces cuando la pareja está en una situación incómoda...-

Y ahí empezó a hablar sobre los libros. La verdad es que si Jungkook usaba frases típicas o alguna acción romántica con ella, YangMi siempre terminaba hablando de libros. Para Jungkook ya se le hacía normal. Yang era libros por aquí, libros por allá, libros en todos lados.

A Jungkook le gustaba que su novia fuera así, pues era su personalidad y la amaba como era.

- Ya le tengo envidia a los libros- dijo mientras sacaba una linda risa. Miró a Yang y esta se cruzó de brazos mirándolo con una cara de pocos amigos. Y Jungkook quiso disculparse- Lo siento...yo-

Y una carcajada de YangMi lo interrumpió.

- Enserio creíste que me molestaría, Jungkook nunca te cambiaria por nada- puso su mano en el antebrazo de su chico- los libros son mi vida si, pero tú significas más- y dio un pequeño beso a su mejilla.

Jungkook se sonrojó y decidió terminar la conversación sobre los libros.

- Bueno, ya estamos casi por llegar- anunció mientras paraban en un semáforo de la autopista-

[...]

El lugar era muy lindo, no era tan grande ni tan pequeño. Las mesas estaban decoradas con unos manteles color blanco que tenían unos diseños color dorado y pequeñas flores azules.

Cuando la pareja había llegado a la mesa, el chico sacó la silla de Yang para que esta se pudiera sentar. Luego se sentó el en su lugar.

YangMi veía todo el restaurante con delicadeza. No era un lugar costoso, más bien era como una pequeña cabaña muy bonita.

Miró hacia el techo notando que este tenía unas pequeñas luces de navidad en el. Sonrío al recordar que pronto entrarían en octubre y estarían más cerca de navidad y su cumpleaños.

YangMi volvió su mirada hacia la mesa donde había una pequeña vela en medio de esta. Al frente suyo tenia una copa. Miró a JungKook quien tenía una sonrisa de conejo. Se sonrojó al verlo de esa forma.

- ¿Te gusta?- preguntó observando su alrededor, las personas conversaban mientras comían de su plato.

- Es perfecto...- YangMi se dio cuenta que JungKook también tenía una copa frente a el.

- No más que tú-

YangMi se sonrojó y sacó una pequeña risa.

"Otra típica frase romántica"

Yang iba a decirlo pero no quería formar otra vez la conversación de los libros. Así que prefirió quedarse callada.

- Veamos qué hay de comer-

[...]

- Gracias por la noche- posó su mano en la nuca de su novio

- No tienes que agradecer. Quería probar algo más que tener que venir tarde en la noche para verte escapar de tu ventana-sonrío- aunque disfruto cacharte desde abajo de tu casa- Yang rio dándole un pequeño golpe a su hombro. JungKook acarició su cintura.

- No digas tonterías, todavía mamá y papá me dicen lo típico de: "todavía eres una niña, debes cuidarte y blah, blah, blah"- imitó la voz de su padre y ambos rieron.

- Creo que cumplirás cincuenta años y seguirán diciéndote eso-

- Y tú seguirás con la misma cara de rata- YangMi soltó una carcajada y JungKook ni sonrío- entonces...¿un conejo?

- Tu conejito-afirmó y de inmediato sintió los labios finos de su novia tocar su nariz.

- Mi conejo- y estampó sus labios en los de su chico.

- Basta...empalagan- una voz grave los hizo separarse de inmediato.

- ¡Choi Kwan!- YonHee interrumpió dándole en el hombro a su esposo.

- ¿Que?- miró a la pareja y ambos estaban sonrojados.

- ¿No ves que los interrumpes?

- No, mamá ya iba a entrar y JungKook ya se iba, ¿cierto? -miró a JungKook y este iba a negar cuando ella le dio un codazo en las costillas. Y este afirmó sobándose un poco donde recibió el golpe- Si, si, pues adiós- le dio un pequeño abrazo rápido y el castaño subió al auto para luego irse.

- Tu y yo jovencita tenemos una conversación pendiente- dijo su padre y ella tragó en seco-

- Ella y tú no tienen nada de que hablar- YonHee miró mal a su esposo- Ven cariño vamos a tu habitación, debes dormir mañana tienes escuela.

- Gracias mamá...-le susurró-

- No hay de que- y le guiñó un ojo.

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