Capitulo 6 "Soy tu manipulador"

70.2K 2.6K 438
                                    

Me visto como normalmente, mis pantalones de chándal más una sudadera de Calvin. Por cierto, le estoy dejando sin ropa, dentro de nada ira desnudo por el internado… no me llaméis desesperada pero creo que… no está del todo mal, ¿verdad?

En fin… me da pereza ir a clases pero no puedo faltar porque mis supuestas amigas me arrastran de las orejas. ¿Tener amigas para esto? Dios, esto está mal hecho, exijo una nueva organización de la sociedad.

- ¡Date prisa, Lily, llegamos tarde como tardes mucho más! – grita Silvia más que alterada.

Hace un rato, para seros sinceros, he llegado a pensar que había perdido la cabeza por completo. Se había puesto mi ropa con unos calcetines desparejados, uno rojo y el otro verde. Para ella eso es algo… imposible de ver, en mi… no tanto.

- Vale, entonces no me peino – digo sonriendo feliz, no tenía ganas de peinar mi hermosa mata de pelo de león de la Sabana.

- Hay días en los que me pregunto a mí misma, muy preocupada, ¿Cómo pude hacer amiga tuya? – Dice Sam desquiciada – no te diré que te peines porque eres de cabeza dura y no me escucharas asique vámonos pero Lily, a diez metros de mí.

- Que sean mejor centímetros – me pego corriendo a ella – me gusta estar cerca de ti – le comunico con una malvada risa de bruja constipada.

- Dios mío… menos mal que Fran es amigo tuyo, sino no se acercaría a mí – se lleva las manos al pelo y se lo revuelve provocándome la risa, ahora ella parece el león – no te rías, me estresas.

- ¡Pero vámonos par de tortugas, hace como dos minutos que ha tocado el timbre de entrada y no sé vosotras pero yo tengo calculo con el cascarrabias de Nick! – exclama la peliazul más alterada que antes, es raro que no le hayan salido canas con todo el estrés que acumula.

Me encojo de hombros y luego me coloco una de mis gorras nuevas.

- Lo bueno se hace esperar, querida pitufina – explico sonriente – por dios, vámonos ya que me toca con el Sr. Edwards y tras lo del año pasado… dios mío, luego nos vemos.

No les doy tiempo a decir nada pues salgo corriendo como una loca. Ese señor busca cualquier excusa para echarme fuera de clase o castigarme, simplemente me pone de los nervios y que me haya tocado de nuevo con ese señor me pone los pelos de punta. Le vi hace dos días y sigue teniendo cara de rancio.

En definitiva, la ex-directora sigue sin darle lo suyo. Lástima.

Tras diez minutos de retraso llego a la clase y con toda mi educación entro sin pedir permiso y como es lógico, el profesor deja de hablar para mirarme enfurecido mientras que mis compañeros me miran con cierta adoración por interrumpir la clase y cierta curiosidad por llegar a estas horas y con dicho profesor.

Con la mirada busco un sitio libre y acaba siendo al lado del idiota de Peter. ¿Pero esto que es? ¿No hay otro jodido compañero que sienta cierto cariño a ese idiota? No, claro que no. Tiene que tocarme a mí, pues empezamos bien…

Está claro que los comienzos de clases no son lo mío. ¡Yupi!

- Te sienta bien tu nuevo peinado – murmura Peter una vez me he sentado.

- No me he peinado – explico haciendo que abra la boca sorprendido y aparte la mirada de mi avergonzado – además, ahórrate todo esto, te detesto con todo mi corazón. Es más, tengo ganas de romperte las pelotas pero hoy me he levantado de buen humor, tienes suerte chaval.

Escucho un carraspeo por parte del profesor y me giro con una sonrisa de niña buena o angelito, como prefiráis.

- Buen días Sr. Edwards, se le ve más gordo que antes, ¿la mujer le tiene estresado? – pongo una mueca de disgusto más falsa que su peluquín.

Intento de chico popular (IDCP2)Where stories live. Discover now