Capítulo 11 "Confesión"

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Valentina POV

Durante la cena de anoche en ese restaurante tan importante para ambas, no pude evitar el que por momentos mi vista se perdiera en los detalles del rostro de Juls, nunca le había prestado tanta atención a esos rasgos que ahora notaba han cambiado de un tiempo para acá.

Su rostro ya no es ovalado como cuando la conocí, sus pestañas han adoptado un ondulado lindo, sus pupilas parecen adquirir un brillo renovado, ¿o siempre lo ha tenido?
No lo sé, pero ¿por qué no había notado que mi mejor amiga es demasiado linda? Y en cuanto a linda no solo me refiero a físicamente, ella... es la persona con la forma de ser más noble y hermosa que he conocido, no hay día en que no piense en lo afortunada que soy de haberla conocido, Juliana Valdés es lo mejor que me ha pasado en la vida y no quiero perderla.

— ¡No puedo creerlo! — Juliana entra pisando fuerte a mi apartamento y pone su teléfono frente a mí queriendo que vea su contenido.

En la pantalla reconozco el logo del blog de TMZ y bajo de él leo el título de la noticia: "Valentina Carvajal ya no oculta a su esposa".

Lentamente bajo hacia el cuerpo de la noticia donde es visible varias instantáneas de nosotras mientras comiamos en el restaurante, en una se ve como ambas reímos, en otra como estoy colorada del rostro de tanto reírme, una más donde me recargo en el hombro de Juls y ella recarga su cabeza sobre la mía. Cualquiera que viera estas fotos sin duda pensaría que si somos una pareja real.

—¿Qué piensas? Ellos invadieron nuestra privacidad, podemos dem...

— No, esos paparazzi estuvieron en el momento y lugar indicado — le entrego su teléfono —. Sin querer ellos ayudaron a hacer más creíble nuestro matrimonio.

— Tienes razón — toma asiento justo a mi lado, la noto nerviosa —. Bien, Val, sé que no es el momento indicado, pero hay algo importante que debo decirte antes de continuar con todo esto, es necesario que lo sepas.

¿Decirme? ¿Qué podría ser? ¿Y si tiene novio? ¿O tal vez besó a alguno de mis ex? No, no, no, ella no me ocultaría algo así.

Ay, mejor cállate Valentina, que tú también le ocultas algo y ni de loca se lo vas a decir.

— Juls, mira, no es necesario, nada de lo que me digas va a cambiar lo nuestro, eres mi mejor amiga — le digo tomando sus manos entre las mías a modo de confortarla y relajarla.

— Ok, ammm... ¿nunca eh notaste que... no he... andado con nadie? — balbucea —. ¿O que siempre evado... los chicos que me presentas?

— Oh, túúú....

Juls me insta con la mirada a que acomplete mi pensamiento, el cual, a decir verdad no tengo nada claro.

— Yoooo...

— Ammm, ¿tebesasteconLucho? — digo rapidamente.

— ¿¡Qué!? ¡Claro que no! ¿Lucho? ¡Jamás! Estoy segura que besar a mi perro Tambor sería mil veces más agradable — sentencia entre risas.

— Bien, entonces no sé de que se trate — encojo los hombros en señal de rendición.

— Ufff, aquí voy — me mira y trata de no titu1bear —. Val, esto es algo que... debí decirte hace muchísimo, pero el miedo fue más grande. Desde que tenía... 15 años yo... me di cuenta que ocultar esto era lo mejor, evitaría destruír vínculos con los de mi alrededor, no viviría bajo señalamientos, llevaría una vida normal...

Los ojos de Juls comienzan a ponerse rojos, sus ojos ahora están cristalizados al punto de casi llorar, nunca la había visto tan vulnerable.

—... en la escuela siempre me hacían de menos, nadie me notaba, siempre fui la nerd, el punto más bajo y oculto de la pirámide estudiantil. ¡Imagínate que habría sido de mi vida si supieran que soy gay!

— ¿Gay? ¿Tú eres...? ¿O sea que a ti te gustan..? What!? — un universo de interrogantes ha explotado en mi cabeza, ninguna es negativa, solo... wow.

— Soy gay, Val, siempre lo he sido y no te lo contó no porque no te tuviera confianza, solo... tenía miedo, miedo de como reaccionarías, justo como lo estás haciendo — se mece de los cabellos y se pone a caminar por toda la sala de mi casa en atisbo de nerviosismo —. Yo te veía estar de acuerdo con los bullys para burlarte de los homosexuales en el instituto, por eso nunca me acerqué a tí, por miedo.

Ella tiene razón, siempre seguía la corriente en las burlas aún cuando yo no esta de acuerdo, pero llevarles la contraria era mandarme al foso de la pirámide estudiantil.

Juls me tenía miedo, miedo porque pensaba que soy homofóbica. No, nunca la odiaría, jamás.

— Hey, cálmate — la detengo en su ir y venir que en poco tiempo podría lograr hacer un zurco en el piso de madera —. Aquí estoy, no me vas a alejar de tí solo por ser gay, al contrario, tienes todo mi apoyo, y lo hubieras tenido incluso hace 10 años, no estás sola.

Nos fundimos en un fuerte abrazo que ambas necesitábamos, en mi caso esperando que ella sintiera que lo que dije es real. Sus brazos me estrechan de una manera como nunca antes lo había hecho, la siento relajada.

— Por eso no quería aceptar lo del matromonio falso — explaya tras desenrredarnos del abrazo y sentarnos en el sofá —. Tantos años fingiendo ser hetero, y ahora fingir ser gay. Ya no quería seguir con las mentiras.

Eso me hizo reflexionar sobre el hecho de que estoy obligando a una persona a participar en este fraude, porque eso es, un fraude.

— Entonces no lo hagamos — tomo mi teléfono —. Llamaré a Robert para contarle la verdad, que cancele todo.

— No, no — ella me quita el aparato de entre las manos —, ya firmamos un contrato, estoy segura que luego de que no me dejaras leerte el documentos, tú tampoco lo hiciste.

— ¿Cuánto dinero piensan quitarme? — me tapo la cara preparándome para escuchar la cifra.

— Cero pesos.

— ¿Qué? ¿En serio? — la miro sorprendida.

— Si. Si rompes el contrato te quedas sin el trabajo en la televisora.

Es un hijoe... No puedo creer que Robert haya hecho eso.

— Val, más que nunca debemos hacer ese jodido reality, no puedes perder el trabajo de tus sueños, y si tengo que seguir "mintiendo" con la verdad entonced hagámoslo, démosles el material que desean.

Juliana adopta una postura aguerrida, ahora es ella la que lleva las riendas de esto.

— Está bien. Si queremos lograr la meta debemos meternos en el papel desde ya. ¿Con qué sugieres que empecemos? — le digo tras un lapso de silencio.

— ¿Qué te parece una mudanza improvisada?

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NA: Perdón por actualizar tan tarde, la realidad es que se me había olvidado🙈, la diferencia horaria entre Estados Unidos y España no ayuda, ya me había dormido😁.

Como sea, espero disfruten esta nueva entrega, voten, comenten y compartan en sus redes sociales.

¡Nos leemos el próximo martes🤘!



¿Debería quedarse en Las Vegas? [Fic Juliantina AU]Where stories live. Discover now