Capítulo 12

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Mayo 8 - Día 38

Me desperté con un sobresalto, con el pecho agitado, y mi cuerpo lleno de sudor. Mi corazón latía frenéticamente en mi pecho, demasiado rápido. Nunca había latido tan rápido.

Estaba sentada con las sábanas enredadas en mi cuerpo, era como una pesadilla que no podía quitarme de encima, Un mal sueño que comenzó en el momento que me desperté. Me lleve mis dedos a mi cuello, sintiendo mi garganta hinchada, hice una mueca de dolor.

Dios no, por favor, no otra vez. No puedo hacerlo de nuevo.

Estaba oscuro en mi habitación. Habían sombras que pasaban y desaparecían al pie de mi cama. Pensé en llamar a Jisoo para que me abrazara hasta que estuviera bien, pero no quería preocuparla, me miraría con esa cara tonta que solo ella sabia poner, la expresión que hacía era peor que todos los 'lo siento' del mundo.

Pase mis dedos por mi cabeza, tirando desesperadamente a las hebras de mi cabello, con ganas de gritar y gritar y nunca más volver a hacer un sonido de nuevo. Estaba desgarrada, olvide como respirar por un momento. No, otra vez no.

Busque mi celular, lo sostuve con mis dedos temblorosos, Solo había una persona a quien podía llamarle.

Por favor contesta.

Te necesito.

Por favor.

Su voz cortó el tercer timbre, Su voz suave y adormilada calmaron el pánico que tenía en mis huesos– Jennie.

–Háblame por favor –susurre.

Escuche las sabanas moverse y su respiración a través de la línea del celular. Lisa no me pregunto que me pasaba o si estaba bien, me contesto con una voz lenta y segura– ¿Qué quieres que te diga?

–Lo que sea.

Ella hizo una pausa aclarando su garganta, para seguir hablando con su suave voz– Te puedo cantar, ¿está bien?

–Perfecto –me acosté de lado aprisionando mi almohada contra mi estómago mientras miraba la noche a través de mi ventana, se podía ver la claridad de la luna.

–Settle down with me, cover me up, cuddle me in.. –comenzó lentamente, su voz cuando cantaba era casi como cuando hablaba, era aguda y baja, un poco rasposa– Lie down with me, hold me in your arms....

Hubo un tono rosa en mis mejillas mientras seguía escuchando el tono de su voz. Quería verla, acostarme a su lado y esconder mi cabeza en su cuello sin tener que pensar en nada más. Escucharla a través del celular que tenía en mi mano fue suficiente para calmar los latidos acelerados de mi corazón.

Era como una canción de cuna. Su respiración y la mía podían escucharse cada vez que ella continuaba los versos y los coros con su dulce voz que juntaba todas las palabras.

Lisa continuo cantando poco a poco bajando el tono de su voz, las últimas líneas de la canción fueron desapareciendo mientras mis ojos se cerraban poco a poco.

*******

Me desperté con mi alarma a las 8 de la mañana, tenía dos mensajes de Lisa. Me quite mis sabanas de encima, sentí mis manos temblorosas, mi cabello revuelto, deje escapar un pequeño suspiro mientras me levante, camine hacia la ventana, eche un vistazo hacia la calle y luego mire mi teléfono que tenía en mis manos.

3:21am Lisa

-Espero que estés bien.

3:23am Lisa

-Que duermas bien.

Pase mis dedos por la pequeña pantalla, delineando los mensajes con ellos una y otra vez, hasta que estuvieron marcados en mi mente. Yo no estaba bien y tampoco había estado durmiendo bien. Mire hacia mis sabanas, estaban algo mojadas por mi piel sudorosa de hace unos minutos. Acomode un poco la cama y me recosté de nuevo, deseaba poder permanecer entre los suaves pliegues de las sabanas y nunca moverme de nuevo. No estaba segura si podría dormir, quería colocar una almohada en mi cabeza y no tener que pensar nada.

Pensé en llamar y decir que estaba enferma, pero sería hipócrita de mi parte, todos mis pacientes estaban enfermos permanentemente con cáncer. Entonces pensé que tal vez estaría pronto en su misma situación, en la misma situación de aquellos que tenían su camino cerca con la muerte.

Me levante de nuevo y me dirigí al baño, deje escapar un largo bostezo, alcance a ver mi reflejo. –Jennie, no estoy de humor para esto –dije levemente, aparentemente hablarme a mí misma era algo que hacia ahora.

Me frote mis ojos mientras deseaba poder borrar las bolsas y el color purpura que tenía debajo de mis ojos. Por el momento me di por vencida, fui a la cocina solo con mis leggins grises y una playera negra. Jisoo ya se había ido a la universidad, me dejo sola en el silencioso apartamento, tenía que prepararme yo misma mi café mientras tenía la urgencia de acurrucarme en mi misma y no tener que moverme nunca más.

Tome mi teléfono mientras pequeños destellos de Lisa pasaban por mi mente. Su cabello rebelde, aquel glaseado en la punta de su nariz. Sus dedos largos, sus manos. Quería verla de nuevo, estar a su lado hacia todo un poco mejor.

8:06am Jennie

-Gracias por preocuparte por mí.

Deje mi teléfono en la meseta de la cocina mientras caminaba sin coordinación, me quite mis leggins y los deje sobre una pila de ropa, me dirigí nuevamente al baño, deje mi ropa interior y mi playera en una esquina, camine adentro de la ducha, abrí la llave de agua caliente y deje que esta se deslizara por mi piel.

Mis pensamientos venían como remolinos en mi mente mientras colocaba el jabón sobre mi piel, el vapor de la ducha había nublado el espejo. No quería ir a trabajar, Quería sentarme en la cocina de Rosé, mirarla hacer muffins y escucharla cantar con la música. Quería hacerle bromas a Jisoo por cuantas veces a comido pollo frito. Quería estar con Lisa.

Pensé en ella, pensé en poder comprarle más tiempo, Pensé en como comía el glaseado de los muffins, la forma en que me sonrió mientras comía su pedazo de pastel de chocolate, ese momento fue especial. Pensé en que aquellos seis meses eran solo cinco ahora.

Camine afuera de la ducha, me envolví con una toalla y fui a mi habitación. Mi closet era un lugar frió lleno de playeras y pantalones ajustados. Me puse unos jeans rojos y una playera gris, era lo más decente y cómodo que encontré. Tenía el presentimientos de que mis pacientes entenderían mi vestimenta, ellos sabían exactamente como era tener un mal día.
Cuando regrese a la cocina, la pantalla de mi celular estaba iluminada por un nuevo mensaje.

8:30am Lisa

-Es un placer preocuparme por ti.

Fue una simple frase que no debería de haberme hacer sentido nudos complicados en mi estómago, pero lo hizo. Tenía que verla. Si ambas teníamos poco tiempo, quería pasar el tiempo que me quedaba con ella.

8:33am Jennie

-¿Te quedo algo de pastel?

Coloque el café semi caliente en un termo, le puse un poco de leche y cerré la tapa mientras esperaba que me respondiera el mensaje.

8:34am Lisa

-Sí.

8:34am Jennie

-¿Te queda suficiente para compartir?

Fui al baño para acomodar un poco mi cabello. Después de cinco minutos de frustración me di por vencida con este, así que simplemente me coloque un gorro y fui a hacerme un tazón de cereal.

8:35am Lisa

-¿Quieres que lo comparta contigo?

8:38am Jennie

-Si, esa era la idea.

8:39am Lisa

-Bueno ven entonces.

8:39am Jennie

-Estaré ahí como a las tres.

8:39am Lisa

-Está bien.

8:40am Jennie

-Nos vemos.

Di una media sonrisa mientras miraba su mensaje, movía mis dedos contra la mesa en un ritmo constante. Cerré mi teléfono y lo volví a abrir de nuevo mientras miraba los pequeños iconos en el menú, abrí mis contactos y comencé a desplazarme lentamente por los nombres, apareció el nombre de mi doctora, no la había llamado en meses. Tener el número de tu doctora no era la cosa más normal pero fue de cuando tenía cáncer.

Le marque y coloque el celular en mi oído mientras dejaba escapar un suspiro. No quería hacer esto, no quería hacerlo.

Una amable recepcionista me atendió, su voz animada sonaba extraña en mi oído– Hola le atiende Nayeon, ¿en qué le puedo ayudar?

–Hola –le conteste, con una voz temblorosa y rasposa– me gustaría separar una cita.

Catch Me, I'm Falling (Jenlisa G!P)Where stories live. Discover now