Star °°Yoonjin°°

°° 21 °°

—¡Hyung, abre la puerta! —Namjoon volvió a probar, sin resultado. —¿Lo ves?— El joven se giró hasta su mayor en el pasillo. 

      —Déjame a mí. — Hoseok apartó al más alto y golpeó la puerta de la residencia. —Min Yoongi abre la maldita puerta ahora mismo; somos tus amigos e intentamos ayudar. Deja de ser un maldito temperamental orgulloso, porque hasta donde sé, eso es lo que nos ha llevado a este problema. 

      Namjoon arqueó una ceja. No estaba muy seguro de si provocar a su amigo sería la forma de hacerlo salir. 

      Pocos segundos después, el sonido metálico del cerrojo en movimiento salió de la puerta antes de abrirse con furia. 

      —Bueno, Hoseok. ¿Qué tal si te vas a la mierda un rato? 

      El más alto se giró hacia el nombrado con cara expectante. 

      —¿Qué? —Se removió Hoseok. —Al menos ha salido. —Defendió. 

      —Pues mira cómo vuelvo a entrar. 

      Con la mano en la madera, Hoseok impidió que su mejor amigo les cerrara la puerta en las narices. 

      —Estamos aquí para hablar contigo, y eso haremos. 

      Suspirando, Yoongi abrió del todo la puerta y dejó pasar a sus amigos de la universidad. 

      Namjoon y Hoseok se acomodaron en la habitación. 

      —¿Qué ha pasado con tu novio, Hyung? 

      Yoongi se tensó en su sitio. 

      —No sé de qué... 

      —Vamos a fingir que por lo que ha pasado hoy en la reunión no es completamente obvio que estabais saliendo, y voy a decirte que os vimos después de un ensayo, así que podemos saltarnos toda la parte en la que finges que no sabes de qué te hablamos. —Hoseok cruzó los brazos por encima de su pecho. 

      Yoongi suspiró cansado. 

      —Y ¿qué mierda queréis de mí? 

      —¿Aparte de recordarte lo mucho que te costaron estas prácticas y que el Profesor Song te advirtió sobre todo esto? Lo has echado todo a perder, Hyung. ¡Lo has echado por la borda como si nuestros esfuerzo no hubiese valido la pena! 

      Yoongi miró al suelo avergonzado. Namjoon tenía razón. Esas prácticas habían sido su ultimátum y las había tirado a la basura casi a propósito. 

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El siguiente semestre dio comienzo y con él la época de prácticas en la universidad de artes. Los edificios de aquellas carreras en las cuales era necesario hacer un periodo de prácticas se empezaron a ver vacíos mientras sus alumnos buscaban un buen lugar donde aprender cosas útiles para su carrera.