El diario de Jeon Jungkook || taekook

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Lunes 10 de Noviembre

— ¡JEON JUNGKOOK! LEVÁNTATE YA QUE SE HACE TARDE— Gritó mi mamá y yo caí de la cama golpeándome mi trasero.

—Auch— Me sobé mi trasero y me metí al baño a darme una ducha. Cuando salí me vestí y bajé a desayunar, mamá ya me había preparado mis huevos revueltos y yo gustoso me senté y los saboree. Me fui a lavar los dientes, me despedí de mi mamá y junto con Jin me fui a la escuela.

—Hoy vendrán mis amigos a la casa.

—Hoseok y ¿Quién más?

—Namjoon y Taehyung, aún no conoces a Tae, hoy lo conocerás.

—Ok— Y un sentimiento extraño se apoderó de mi cuerpo.

Llegamos al colegio y ahí ya estaba Yoongi y los amigos de mi hermano.

Y él chico que me gusta...

—Hey Jin— Dijo Hoseok mientras se saludaban con el típico saludo de amigos. —Hey, hola Jungkook

—Hola— Dije tímido.

—Jungkookie— Dijo Yoongi. —Mira él es Taehyung, él que me ayuda a hacerle bromas a Namjoon.

Levanté la mirada y lo vi. 

Era hermoso. 

Cruzamos miradas y él me sonrió.

—Hola, soy Taehyung— Su voz era hermosa.

—Hola... Soy Jungkook.

—Un gusto Jungkook. 

Tocaron el timbre y Yoongi me jaló y ya ni tiempo me dio de despedirme de los chicos, voltee por última vez hacia Taehyung y él me veía. Me sonrió y después de eso lo perdí en el mar de gente que se dirigía hacia sus salones.

Las primeras clases se pasaron rapidísimo y cuando menos nos lo esperábamos nos encontrábamos en la cafetería tratando de buscar un lugar para almorzar. Hoy Jimin no fue a la escuela y Yoongi andaba un poco triste por ello pero rápido se reponía.

Vimos como Namjoon nos llamaba para que nos sentáramos con él y sus amigos y como toda la cafetería estaba llena no nos quedó otra alterativa más que sentarnos con ellos.

—Gracias hermano— Dijo Yoongi.

—No hay de qué Yoongi

Yoongi se sentó a un lado de Jin y el único asiento disponible era a un lado de Taehyung, en la orilla, y me tuve que sentar ahí.

Todos hablaban menos yo y me encontraba un poco aburrido por lo que ya quería que tocaran para irme a clases.

—Estás aburrido, ¿no?

Levanté la mirada para ver quien había dicho eso y era Taehyung, y mi corazón latió desenfrenadamente.

—Si...— Murmuré sonrojado. El rió y yo me sonrojé más.

—Hey, lamento lo del otro día en el baño.

—Oh, no importa.

—Claro que importa, te salió sangre de la nariz.

—Pero no me pasó nada grave

—Bueno si, pero en verdad lo siento.

—No importa.

—Bueno... ¿vas con Yoongi, verdad?

—Si— Contesté.

—Que bien

Tocaron el timbre y gracias al cielo pude salir de esa incómoda conversación con Taehyung mientras Yoongi y yo nos íbamos al resto de las clases.

Cuando las clases dieron su fin, Yoongi y yo nos fuimos a entrenar mientras que mi hermano y sus amigos se iban a la casa, entrenamos durante unas largas dos horas yo ya estaba muy cansado y ya no podía hasta que el entrenador dio por terminado el entrenamiento. Me fui a las duchas junto con Yoongi y nos metimos a una regadera. Salí de los vestidores ya cambiado y esperando a Yoongi para irnos, pero olvidé mi libro de matemáticas en mi casillero, tendría que ir por él.

—Yoongi te espero en la entrada, olvidé mi libro.

—Vale.

Fui hacía mi casillero y al abrirlo cayó una hoja, se me había olvidado lo de mi admirador secreto.

La abrí y esta decía:

''Me encantan tus ojos,

La más bonita mirada sin dudar,

Tu sonrisa con brackets me mata

Y aun si es por mí me encanta,

Quisiera hablarte más,

Pero pena a mí me da,

Pequeño eres, yo no

Pero contigo hago la excepción.''

Un poema, o casi un poema, me escribió esa persona pero: ¿Quién será? 

Muero por saberlo.