XXII

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~22~ 1930 - 2016

La lluvia impregnaba su ropa oscura y se confundía con las lágrimas que caían con lentitud de sus mejillas.

Todos estaban allí, Todos menos Jungkook. Sin embargo, No lo tomó muy en cuenta. Ni siquiera estaba prestando atención al sermón del padre y al llanto hipócrita de los padres de Yoongi.

Todo era tan irreal...

Otra vez volvía al cementerio, Primero con sus padres y luego con su mejor amigo.

Ninguno de los chicos se acercó a él pensando que necesitaba tiempo.

Pero, quería un abrazo.

Un apoyo.

Sin embargo, Nunca llegó.

Ya no había nadie que lo confortara, Ni que lo detuviera en el momento que se posó en la bañera con cuchillo en mano.

Llorando.

Sonriendo.

El mismo brazo estirado. 

El mismo cuchillo.

El mismo corte.

Profundo.

Muy profundo.

La misma sangre.

La misma impotencia.

Se desvanece.

Espera a que alguien aparezca.

Sin embargo... Nadie llega.

En ese momento se sintió libre.

No hay dolor.

No hay vida.

No hay nada...

~~~~~

Un mes después.

Marzo 05, 2016.

Jungkook observaba las dos lápidas frente a él, Neutro.

Ninguno de los dos merecían ese destino, O por lo menos así lo creía él. Jimin y Yoongi eran buena personas, A comparación de lo que él ya conocía se dio cuenta de que ellos tenían un carisma enorme.

Lo tenían a comparación de...

Oppa.  —Esa voz tan adorable lo hizo mirar a su lado derecho.

Su pequeña.

El traje de enfermera le quedaba bastante bien, Incluso le causaba nostalgia verla cuando apenas era ayer cuando la crió desde los cinco años.

—SukJa. —Sonrió Jungkook.

—¿Qué haces aquí? Debemos irnos ya, Oppa. Nuestro trabajo aquí terminó. Los tenemos.

Trabajo...

Jungkook miró a SukJa con una expresión triste.

—¿Qué pasa, Kook? —Inquirió SukJa.

—Es raro... —Murmurlló—. Es raro esto, Cielo.

SukJa dio una mirada a las lápidas de Jimin y Yoongi, Regresando su vista al castaño.

—Kook, ¿Lo dices por ellos o lo dices por Taehyung?

Jungkook se sonrojó de golpe.

—Tonto. —Rió SukJa por la reacción de sh compañero—. Tú ya tienes a tu Taehyung, Jungkook.

SukJa sacó de su bolsillo una cadena de plata con un crucifijo invertido. Se puso de puntillas para colgarlo del cuello de Jungkook. La joya brilló de color verde al igual que los ojos del chico, SukJa sonrió conforme.

—Un poco más, Kook. Sólo espera un poco más.

Jungkook asintió.

Y tomados de las manos desaparecieron en una nube color negro.

Faltaba poco...












FIN SMOKE.

𝑆𝑚𝑜𝑘𝑒 ||Yoonmin||Where stories live. Discover now