CAPITULO VEINTINUEVE

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Cuando llegué al pasillo, comencé a contar las puertas de uno en uno, me detuve en seco al ver que era la misma puerta que estuvimos la otra vez.

Respire profundamente antes de tomar el pomo, luego de girarlo, abrí la puerta lo suficiente como para poder entrar. De inmediato los recuerdos llegaron, pero con fuerzas los esquivé.

Tal y como Ian dijo, fui a uno de los buros de la cama y el cajón, pero allí no estaba la pistola eléctrica. Repetí el mismo proceso con el otro buro, pero tampoco estaba.

El sonido de la puerta cerrándose hizo eco por toda la habitación. Di un pequeño salto por el susto.

-N-no está aquí.- titubie al darme vuelta y ver al de ojos grises.

-Lo se.-respondió lentamente.- la tengo guardada en mi bolsillo.

-¿Entonces para que me hiciste subir hasta aquí?.- conozco la mayoría de sus miradas, y la que me está dando ahora no me transmite nada bueno, como si algo en su mente no andara bien.

-Tenemos que hablar.-al momento que escuche esas palabras salir de su boca, un escalofrío me recorrió por el cuerpo, y no de la buena manera.

-¿Pasa algo malo?.- tenía miedo de cuál sería su respuesta.

-Me voy.-el cuerpo se me heló completamente, pero antes de que pudiera decir algo, el siguió hablando.- en un principio volví por el tema de nuestras familias y para buscarte, en sí no debería haberme quedado en el país porque debía volver con mi familia, pero lo hice por ti, ahora que tu estas con James, siento que sobro y que ya no debería ser más parte de tu vida.

Retrocedí algunos pasos, sorprendida por que lo que me había dicho. ¿Será ira otra vez?. Mis piernas chocaron con la orilla de la cama, automáticamente me senté en ella.

Algo me dentro de mi, me decía que tenía que tratar de detenerlo y que no se fue, pero la otra parte me recuerda que es decisión de el y que no debería entrometerme porque al fin y al cabo estoy con James.

-¿Sólo te irás?.- de alguna manera me sentía patética preguntando.

-¿Y que se supone que haga?.-por primera vez en toda la conversación me miro.- ¿Sabes lo que siento cuando te veo con él? ¿Te puedes hacer una mínima idea de cómo me siento?

-Si.-conteste sin dudar.- fue lo mismo que yo sentí cuando tu estabas con Jess.- hace mucho tiempo que no la nombraba.

-Lo hacia para protegerte.-se acercó.- ya te lo dije aquella vez Brooklyn, y dudo que estés con James para protegerme a mi.

Me quedé callada, no podía decir nada, un especie de vacío se instalo dentro de mi, las lágrimas se acumulaban en mi ojos, pero no quería dejarlas salir, no frente a él.

Camino hasta sentarse a mi lado, puso sus manos sobre las mías y las acaricio levemente.

-Es lo mejor para todos.-mire el suelo, si lo miraba a él, todo estaría perdido.- se que a James le molesta que este cerca tuyo, y a mi me molesta que el este cerca de ti, pero no puedo hacer nada, nada más que alejarme, y está vez Brooklyn, Me iré definitivamente.

Salí rápido de la habitación, mientras sentía las primeras lágrimas caer. ¿Porque duele? No debería.

Cuando estuve en las escaleras del sótano, me seque las lágrimas y las cambie por una sonrisa completamente falsa.

-Pensé que tu traerias la pistola.-comentó Tyler cuando me vio.

-No...No estaba.-me aclare la garganta para hablar.-me tope con Ian en las escaleras y dijo que el la buscaría.

-No será necesaria.-se encogió de hombros el castaño menor.- él busco el expediente completo de Jasper, y está bastante jodido de la salud la verdad, así que no estará aquí por mucho tiempo.

Eso me tomo un poco por sorpresa, quizás esa sea la razón de porque hacía todo esto, no le importaba nada.

Pero eso ya no me interesa ahora, sólo quiero irme de aquí, y estar en mi departamento.

Necesito dormir, dormir y no despertar, es la única forma de que todo desaparezca.

Respiro con tranquilidad cuando Hillary me deja en mi departamento, por suerte James se fue con Tyler.

-Aprovecharé de buscar algunas cosas que se me quedaron.-me habla, yo sólo asiento con la cabeza.

Subimos por el ascensor hasta llegar a mi hogar.

Deje las llaves sobre el recibidor apenas entre detrás de mi hermana, cerrando la puerta a mis espaldas.

Hillary se giró para estar frente a frente.

-¿Estas bien?.-me pregunto preocupada, yo sólo hice un asentimiento de cabeza con una sonrisa sin mostrar los dientes, pero nuevamente las lágrimas reclamaban salir.- no estás bien.

Esta vez negué con la cabeza mientras ella caminaba hacia mi y me abrazaba. No pude evitar desahogarme y comenzar a llorar a mares.

-Ian se va.-dije entre sollozos.- Pero no se porque me duele tanto.

-Porque aún lo quieres.-fue lo único que ella dijo en los minutos que tenía sus brazos alrededor de mi.

N/A

Holaaaa, perdón por tardar pero no estaba en mi hause y ni tenía Internet:((

Espero que el capítulo les haya gustado, si es así pueden darle a la estrellita y comentar si lo desean.

Los quieroooo

-Doble S

Pd: se nos acerca el finaaal.

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