CAPITULO VEINTICINCO

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Jasper caminaba con tranquilidad por los pasillos del hospital, era obvio decir que el ya sabía todo. Con las manos en los bolsillos se presentó frente a todos.

Hizo una mueca al ver lo demacrados que se veían todos, Hillary arrodillada en el suelo llorando, Ian con los brazos apoyados a cada lado de su cabeza, James tratando de consolar a su hermano cuando con suerte podía hacerlo con el mismo, Aaron estaba apoyado en la pared con sus manos tapando su rostro, pero no reconoció al último hombre, que estaba de piernas cruzadas en la silla, tratando de mantener la calma.

Al recorrer la mirada por cada uno de ellos, supuso lo peor.

-¿Quieren que pague el funeral?.-el primero en verlo fue Ian.- nuestras familias son amigas, y como al parecer ella no tiene a nadie...

-¡Eres un estúpido!.-le grito Hillary, el odio bailaba en sus ojos.

-El cajón creo que lo da el hospi.-no alcanzó a terminar su frase cuando el puño de Ian ya estaba contra su cara.

Retrocedió unos pasos, tocándose el labio, al ver sus dedos vio un poco de sangre.

James rápidamente se acercó al lado de Ian, sabía que el no podría mantener el control.

-Vete de aquí.-trató de hablar entre algunas lágrimas que aún bajaban.- si tienes un poco de humanidad dentro de ti, sabrás que es mejor que te vayas.

El rubio soltó una risa que hizo que a todos les diera un escalofrío, en unos segundos Tyler, que se mantenía al margen, ató cabos.

-¡Fuiste tu!.-me grito, los sollozos no le dejaban hablan con normalidad, la única forma de hacerlo era hablar fuerte.- ¡Tu provocadores eso! ¡Todo es tu culpa!

Su hermano se giró a verlo.-¿De que hablas Ty?

-El sabía de todo, el provocó todo, no tengo dudas pero tampoco pruebas.

-Y eso es una completa pena.-hizo un falso puchero Jasper.- en fin, creo que tienen bastante con lidiar por la muer...

Una vez más fue interrumpido, pero esta vez por Hillary, que le dio el golpe mas fuerte que había dado en todo su vida, pero no se iba a mantener ahí, cuando iba a dar el segundo golpe, el doctor apareció.

-Ella está bien.-sonaba agitado.-por un momento casi se va, pero logramos parar la hemorragia, si todo sigue su curso, se pondrá bien.

Un sentimiento de alivio recorrió el cuerpo de todos, excepto el de Jasper, que sólo hizo una mueca.

-Quiero verla.-Aaron se acercó al hombre.- por favor.

-Aún no se puede, esta en cuidados intensivos, por suerte logramos sacar la bala, y gracias a Dios no perforó ningún órgano.- dando un asentimiento de cabeza el doctor desapareció. Al igual que Jasper, que se perdió entre los pasillos.

Debía salir rápido de ahí.

-Son todos unos idiotas.-dijo cuando le contestaron el teléfono.- ella todavía está viva.

***

Pasaron casi 12 horas cuando Brooklyn recién empezó a abrir los ojos, la anestesia estaba bajando.

Vio todo a su alrededor, las paredes blancas, al igual que la cama, le aviso que estaba en un hospital. Hace sólo una hora la habían transportado a una habitación.

Recorrió toda la habitación hasta toparse con una persona, que dormía en un sillón al lado de ella.

-¿Ian?.- su voz salió grave, su garganta estaba completamente seca. Pero sólo con un leve llamado, el de ojos grises despertó, quien al verla una sonrisa brotó de sus labios.

-Me asustaste.-dijo acercándose para envolverla en sus brazos.-Nos asustaste a todos.

Brooklyn respiro el familiar olor de Ian, era de esos que cuando pasa por tu lado se queda impregnado en todo el lugar.

Deben haber pasado minutos cuando seguían en la misma posición, él no la quería soltar, el sólo recordar que pudo haberla perdido para siempre le aterra, pasó mucho tiempo sin ella y ya no quería más, esos siete meses bastaron y sobraron.

-¿Despertó?.-una voz hizo que ambos giraran la cabeza, James tenía dos cafés en sus manos, pero los dejo sobre una mesa para acercarse a ella.

Ian rápidamente se separó, aunque no quisiera, debía aceptar que ellos eran novios, y las palabras que el le dijo todavía rondaban en su cabeza, Haré lo que tu nunca hiciste, hacerla feliz.

Las manos de James tomaron el rostro de Brooklyn, luego unió sus frentes y ambos cerraron los ojos. El olor del castaño era diferente, te hacía sentir en casa.

-Pudiste haber muerto.-susurro.

Una lágrima corrió por el rostro de ella, al darse cuenta del riesgo que corrió, todo lo que pudo haber perdido.

Los tres estuvieron en la habitación por casi media hora más, un silencio incómodo se instalaba cada vez que alguno dejaba de hablar. Luego que ellos se fueron, entraron Tyler y Hillary, quienes no se querían despegar de ella, a la hora después entró Aaron, pidiéndole disculpas por haberse distanciado tanto.

Miles de cosas pasaban por la mente de Brooklyn, el ver el cuerpo de Marta y el señor Gocks serían una de las cosas que jamás podría olvidar.

Pero el estar al borde de la muerte, le hizo entender muchas cosas. Desde ahora viviría como si todos los días fueran el último, porque podrían serlo, les diría a las personas que lo rodean cuanto las quiere, pero antes tenía que aclararse ella misma.

En estos momentos no sabía que era lo que quería, por una parte le gustaba Ian, se sentía a salvo con el, se sentía en paz, protegida, sabía que con el nada malo le sucedería. Pero por otro lado estaba James, el era atento y cariñoso con ella, la mimaba y eso le gustaba.

Por todas las historias que había leído, sabía que cuando sucedía algo así, alguien salía dañado, era imposible que no sucediera, pero prefería mil veces ser ella quien saliera lastimada que alguno de ellos dos.

N/A

Sip, lo se, se que es corto peeeero es necesario hacerlo así, además ustedes querían capítulo, pues aquí está su capítulo.

Estoy algo molesta por decirlo así...vieron el nuevo logo de wattpad? Yo quede así ira :0, además de que cambiar varias cosas, ¿Tener que pagar para leer algunas historia? ¿Qué es esto? No me agrada para nada esa idea, se supone que este es un lugar gratuito, pero bueno, ojalá que las nuevas cosas si valgan la pena.

Espero que el capítulo les haya gustado, si es así pueden darle clic a la estrellita y votar si lo desean.

Los quierooo

-Doble S

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