"Y entonces, después de casi 100 años en este mundo, reconozco que no se nada aún de la vida, porque no había tenido el placer de coincidir contigo."
"A veces solo tienes que sostenerte a una fantasía para mantenerte en la realidad."
"Mi bajo autoes...
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Regresamos a mi casa en mi auto.
Y cuando llegamos no había nadie.
Entramos y lo dirigí a la sala. Nos sentamos en el gran sillón frente al televisor.
En el camino le había hecho prometerme que me contaría su historia y ahora que estábamos aquí, sin interrupciones, tendría que hacerlo.
—Estoy esperando que cumplas tu promesa.
—Sé que eso esperas—contestó— pero aún tengo miedo de que te arrepientas y te espantes.
—Eso no pasara, créeme que no es nada fácil asimilar algo como lo que acabo de ver. Pero te creo, confío en ti y... no te voy a dejar. Ahora cuéntame.
Dudó un poco. Tomó mi mano izquierda entre las suyas, y comenzó a hablar.
No pude evitar sentir electricidad ante su tacto. Era algo casi mágico. No quería que me soltara.
—Está bien, mira, en 1935 mi padre.... Me hizo esto—musitó con tristeza. —1935... Tienes... —20 años... Literalmente... pero mi verdadera edad sería 92, nací en 1922. Asentí, pero tardé un par de minutos en asimilarlo.
El esperó hasta saber si yo estaba lista para lo que seguía y cuando lo miré, comprendió.
—Mi padre era psicólogo. Cuando mi madre murió, él... Tuvo una fuerte depresión, a tal punto que se adentró en miles de temas fantasiosos, comenzó a informarse sobre la parapsicología, se cree que es la ciencia que estudia los fenómenos naturales. Tenía el fin de revivirla. Yo sabía que eso no pasaría y odiaba verlo así, a veces no lo reconocía, ya no parecía mi padre.... Pero por más intentos de crear un "antídoto" contra la muerte, ya era demasiado tarde para mi madre.... después fui yo, tuve una enfermedad que me provocó la muerte.
Me estremecí al imaginarlo muerto, me era demasiado difícil imaginarme una vida sin ver esos ojos juguetones que siempre que me veían tenían un brillo sin explicación.
—Cuando yo acababa de morir el me.... Me dio de esa "cosa" que él pensaba, me iba a revivir, pero no me revivió, me convirtió en "esto"—dijo casi con odio. — ¿Te enojaste con él? —No, sabía que él ya no estaba consciente de sus actos y no tenía por qué culparlo por algo que hizo para mi "supuesto" bienestar.... Pero algunos años después el murió y me dejó así para siempre. — ¿Tú no lo reviviste? — ¿Y condenarlo a vivir con su dolor por siempre? No, eso sería egoísta de mi parte, además, yo no quería esta vida para él, a pesar de que yo ya era "inmortal" él seguía mal, necesitaba ayuda que no quería aceptar y era preferible que fuera con mi madre...Pero Stefan, un gran hombre, me salvó la vida Mackenzie, me topé con él y me ofreció su ayuda, me mostró todo lo que necesitaba saber y me integró a Inferian con personas como yo... pero eso fue hasta después de salir del orfanato.
