Cuándo llegué a la casa de Yoongi, en la tarde, sus padres nos dijeron que Yoongi había sufrido un accidente: Un coche se lo llevo por delante mientras pasaba la calle, justo el día de mi cumpleaños, cuando se dirigía hacía mi casa. Lo mas repugnante de todo fue que al conductor le pudo la cobardía y se escapo, dejando a Yoongi ahí tirado.

Tenía un maldito traumatismo en el cráneo.

-Yoongi...por favor hablame.-le pedí mientras apretaba su mano con fuerza.-No puedo vete de esa manera, no puedo ni siquiera penar en que puedes seguir de esa manera por mas tiempo.-hice una pausa para respirar profundamente.-Yo se que tú vas a salir bien de esto, que te vas a recuperar y vas a despertar dentro de poco. Solo sera un maldito recuerdo.-exhale, me sentía tan mareado.

Me quedé en silencio. Las palabras sencillamente no salían de mi boca. Deje caer mi cabeza encima del pecho de Yoongi, no podía dejar de llorar.

¿Y si no despertaba? ¿Y si no volvía a mirarme a los ojos así como siempre lo hacia? ¿Si no volvía a reclamarme? ¿Y si se moría?

-Yoongi, yo te amo, no puedes dejarme solo.-susurre, cerrando los ojos.-¿Sabes todo lo que quiero que hagamos? Siempre soñe con casarme contigo y tener muchos hijos. Y te juro que ahora no me importa lo de antes. Ahora eso no me preocupa en lo absoluto, porque yo te amo y te amo mas de lo que debería. No puedes quedarte ahí postrado.-abrí los ojos y deposite un pequeño beso en su mano derecha.-Te amo tanto, Yoongi.

No podía resignarme. No podía sentirme tranquio luego de ver su estado de salud. En cualquier momento las cosas podían complicarse más de lo que ya estaban. Yoongi estaba grave, sus padres me lo advirtieron.

Me sentía tan lleno de ira por dentro. Le tenía rabia al conductor que lo hizo, ¿como pudo dejarlo allí? Pensar que pudiese estar bien si el lo hubiese llevado al hospital a tiempo me estaba matando vivo. Pero lo cierto era que aquel golpe en la cabeza había sido fatal.

-Yoongi.-insistí, moviendo su mano.-Reacciona.-volvi a cerrar los ojos.

No sentí los minutos que pasaron, pues solo podía lamentarme y llorar. Yoongi no despertaba, ni siquiera movía un dedo. Era preocupante la situación.

Sentía que estaba en un estado de trance. No podía reaccionar. No podía moverme del lugar en el que estaba, solo podía descansar mi cabeza en el pecho de Yoongi. Escuchar sus latidos de su corazón me daba fuerzas.

-Yoongi, despierta.-susurre, volviendo a mover su mano.

La puerta se abrió, revelando a la enfermera grosera. Se alarmó en cuanto me vio en esa posición y camino hacia mí. Me tomo del brazo.

-No puedes hacer eso.-jalo de mi brazo.-Pones en riesgo al paciente, además que eso no esta permitido. Acompañame.-me jaló hacía la puerta.

-No, no me quiero ir.-me rehúse tratando se soltarme de su agarre. - ¡Suelteme!-exclamé.-Yoongi no me iré, yo estaré contigo.-algo se había apoderado de mí, tal vez era la angustia, pero necesitaba estar junto a Yoongi.

- ¡Tiene que acompañarme!-enterró sus uñas en mi piel y siguió jalandome hacía afuera.- ¡Venga!-me gritó intentando tomar mis brazos.

- ¡Que me suelte!-levante mi mano y le di una bofetada en un acto inconsciente.

Se quedo mirándome, pero no me soltó.

- ¡Seguridad!-gritó con todas sus fuerzas.- ¡Seguridad!-volvió a gritar.

Entonces Taehyung apareció justo en la puerta, miró a Yoongi y su cara se torno pálido.

- ¡Taehyung!-la llame.

Reaccionó, y se acerco a ambas y miro a la enfermera. Detrás de el aparecieron dos hombres de seguridad.

- ¡Sueltelo!-exigió Taehyung.

Los hombres se acercaron a mí. Taehyung se atravesó, así como una barrera. La enfermera volvió a tirar de mi brazo.

Sus uñas cada vez se enterraban más en mi piel.

- ¡Quiere estar con su novio! ¿Porque no lo entiende?-gritó Taehyung.

Mire a Yoongi. Seguía sin moverse, completamente igual a como estaba cuando entre. Verlo así estaba desesperandome, no podía ver las cosas con claridad.

Un guardia cogió a Taehyung de los brazos y la separo inmediatamente. El otro se acerco a mí y me tomo de la cintura, levantándome y poniéndome en uno de sus hombros. Pataleé.

- ¡Bajeme!-grité, mientras pataleaba.- ¡Yoongi!-me sacudí.

- ¡Sueltelo!-escuche la voz de Taehyung.

El guardia me saco de la habitación y comenzo a llevarme hacía otro lugar. Escuche que una de las enfermeras murmuró: Que espectáculo tan bochornoso.

Seguí llorando mientras el guardia me conducía a una lugar desconocido para mi. Sentía que mi corazón iba a dejar de latir en cualquier momento. Ver a Yoongi de esa manera fue como si mil cuchillos se clavaran en mi corazón. ¿Porque a el? ¿Porque?

Y de un momento a otro sentí que no podía mantener la vista en el suelo, estaba yendome, mi visión comenzando a volverse borrosa, hasta que perdí la cordura del momento.

Ex Novio Posesivo   |     YoonMin         |   ADAPTACIÓN       Donde viven las historias. Descúbrelo ahora