◟²²◝ (( s.v. ♡ ))

799 108 167
                                    

—¡Hola! —saludó la animada Eun Bi, colocando su brazo inmediatamente alrededor de la chica de cabello corto.

—Hola —respondió Jung, en un tono apagado, cosa que, al menos a Eun Bi, le extrañaba bastante.

—¿Estás bien? —preguntó, dirigiendo su mirada directamente a ella.

Eun Ha se mantuvo en silencio algunos segundos, luchando por mantenerse fuerte. Sin embargo, le fue imposible; por más que le fuera difícil confiar en las personas, necesitaba hablar con alguien, y su única opción era Eun Bi.

—Anoche mi padre se fue de casa —confesó, finalmente, junto con un pesado suspiro—, y mi madre no perdió tiempo en culparme por ello.

—Espera, ¿por qué culparte a ti? —interrogó curiosa la menor.

—Por nacer —habló la baja, como si la respuesta fuera obvia—, cosa que ni siquiera tendría que haber pasado, en primer lugar.

—¡No digas esas cosas! —protestó Hwang, dando un golpe al brazo de la contraria—. En serio, dudo mucho que te echen la culpa "por nacer". Es decir, son tus padres...

—... los cuales me odian —completó la mayor—. Quisiera solo desaparecer por un momento.

—Podemos hacerlo —propuso Eun Bi, ganándose una confundida mirada por parte de su acompañante—. No vayamos a la escuela.

—No quiero que te metas en problemas por mi culpa.

—Oh, ¡por favor! —insistió, tirando de su ropa—. Primero, fue mi idea, y, segundo, no me meterás en problemas.

—Está bien, está bien —accedió, finalmente, Eun Ha—. ¿En dónde está tu hermana?

—De seguro ya entró, no te preocupes por ella.

Entonces, con el mayor disimulo posible, ambas chicas se desviaron del camino de aquel mar de estudiantes, para luego alejarse corriendo.

—¿Cuáles son tus planes? —preguntó, curiosa, la de cabello corto, una vez sen encontraron en un parque lo suficientemente alejado.

—Pues, disfrutar, ¿no te parece? —La menor rió un poco—. Adoro salir en la mañana.

Comenzaron a caminar, por las calles cada vez más llenas, pues las tiendas estaban a punto de abrir.

Entonces, una de ellas llamó la atención de Eun Bi; en ésta se vendían todo tipo de cosas, con la temática de San Valentín.

—¡Entremos a esta! —habló, justo antes de arrastrar a Eun Ha dentro de la tienda.

Animada, comenzó a recorrer los extensos pasillos, hasta que una cosa le llamó la atención, por lo que se acercó para tomarla.

Era una corona, decorada con rosas rojas.

Inmediatamente, se la colocó la chica a su lado.

—Una completa princesa —dijo, haciendo de sus labios una sonrisa—. Te queda muy bonita.

—No es cierto —negó la más baja, con un leve sonrojo.

—Síp, lo es.

Continuaron caminando por el lugar algunos minutos más, simplemente riendo y jugando, aumentando las ganas de los empleados de sacarlas a la calle.

—¡Adoro esas máquinas! —exclamó Eun Bi, señalando una de las máquinas fuera de la tienda, que consistía de una sola oportunidad de intentar sacar un peluche por medio de una gran pinza.

Sin más, pagó con algunas monedas, para comenzar a jugar, siendo su principal objetivo sacar un conejo de peluche.

Casi de milagro, finalmente logró conseguir el peluche.

❝ nosey ❞ 2eunbi g!pUnde poveștirile trăiesc. Descoperă acum