𝟏𝟎. 𝐄𝐥 𝐚𝐦𝐨𝐫 𝐧𝐨 𝐞𝐱𝐢𝐬𝐭𝐞... ➹

8.4K 832 1.2K
                                    

Azuma Noriko

Después de ese día, los profesores llegaron a la conclusión de que el origen de mi poder es gracias a mi mamá, básicamente soy una evolución de su poder.

Recuerdo haber visto la cara del profesor Aizawa cuando la mencionaron, justo después de eso dejó de hablar mucho, creo que aún era complicado esto para él.

Endeavor fue un poco más amable elogiando a mi madre y a mí, después de ello me ofreció la pasantía ese año en su agencia y que era impresionante como manejaba mi poder con tan poca experiencia.

Fue un poco extraño no verlo molestó porque Shoto no me ganó, pero preguntarle estaba totalmente de más, también le pidió que me ayudara –cosa que no era necesario que le pidiera ya que él siempre lo hacía–.

La verdad aún era complicado terminar de dominar mi don a veces, constantemente podía hacer cosas nuevas y eso me lo ponía más difícil, pero Shoto se mantuvo a mi lado ayudándome, intentamos entender que había sobre mi don y realmente no había mucho, no era un don medianamente común. Midoriya también nos ayudó un poco más, ya saben, con su super análisis y esas cosas de él, aunque solo terminé por darme cuenta de su secreto, el que ya sabía Shoto y Bakugo.

—No te molestes que no te lo haya dicho, es un secreto importante y no debería ser revelado —Midoriya jugó con sus manos intentando intervenir por Shoto.

—No me molesto, yo también tengo secretos —le dediqué una sonrisa que hizo que dejara de avergonzarse y continuamos entrenando.

Ahora lo sabía yo también, me sorprendía que Bakugo pese a su manera de ser con él había guardado su secreto, también me dijeron que dejó de ser tan odioso con respecto a Midoriya, aunque no entiendo como podía serlo más de lo que es ahora.

Hablando de él.

Fui ignorada por Bakugo toda la semana, me interesó muy poco ya que las notas seguían llegando y eso me animaba un poco más entre las horas. Él estaba molesto, pero yo no sé por qué.

Shoto me insistió en hablar con él sobre por qué corrí cuando hablamos lo de Bakugo, si él me gustaba, pero claramente lo evadí, no podía estar segura de ello, no podía pensar en contárselo a alguien.

Busqué en internet qué es el amor y cómo se manifiesta. No ayudó en nada.

Si decidía hablarlo con mis amigas, ellas al instante lo traducirían a que estoy perdidamente enamorada de él. Si lo hablaba con Shoto, bueno, no es que él sea la persona con mayor interacción femenina que conozca e igual sería raro para mí. Y ahí llegaban mis opciones, no había muchas personas a las cuales acudir.

Suspiré cansada por el dilema que tenía en la mente, abrí los ojos encontrándome con el cielo azul y unas nubes regordetas en él.

Cuando era pequeña, Tadashi me despertaba por las mañanas para que viéramos el cielo juntos, el amanecer, el atardecer, la lluvia o la nieve.

Él solía decir que mis ojos eran el cielo y el más al mismo tiempo, aunque yo nunca conocí el mar.

Tadashi.

¿Qué abrá sucedido con él?

La última vez que escuché a mi padre hablar sobre él, entendí que manejaba la compañía de nuestros abuelos paternos, claramente lo obligaron para el beneficio de mi padre. A decir verdad, sigue siendo una gran empresa bastante famosa, seguro él lo está haciendo bien.

Últimamente había soñado con él y con mamá, sueños bastante extraños que no parecían sueños en realidad, y siempre el mismo árbol que cambiaba constantemente junto con el paisaje y luego, todo se desvanecía.

¡𝑺𝒉𝒊𝒏𝒆! [Vol.1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora