Capitulo 8.

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Capitulo 8.

"Sarcire"


Lo que paso después, fue un borrón para Lauren, solo recuerda mirar como sus "Hermanos" salían sin más, después de esas últimas palabras, no hubo reacción buena ni mala, solo silencio y miradas, lo cual, ahora tenían la cabeza de la licántropo dando vueltas, Dinah aseguró que eso era buena señal, que no tenia de que preocuparse y como le había dicho, las cosas irían lento, paso a paso, ella tenia que ser paciente, pero paciencia era lo que a Lauren siempre le faltaba.
Debía aceptar que confesar eso le había quitado un peso de encima, más que nada, por saber que ahora podían ayudarla, intentar que el caos de su interior pudiera remediarse un poco, ella confiaba en Dinah, siempre lo hizo, incluso en sus peores momentos ¿Por qué debía dudar ahora? Lo cierto era que lo hacía, pero la duda no era en aquella gran bruja, si no, en ella misma, ella dudaba que el desastre que era, no tuviese solución.

- ¿Estas bien? - Lauren saltó ante la repentina voz a su lado- Lo siento, no quise asustarte- La pequeña castaña se disculpó visiblemente apenada, la chica de ojos verdes le otorgó una suave sonrisa

-No pasa nada- Sus miradas se quedaron fijas la una de la otra, pero para sorpresa de las dos, no era incomodo

-Tú no te fuiste- Ella dijo, con la voz tan apagada, pero con una pizca de esperanza al ver a la castaña frente a ella, y por alguna razón ese comentario le dolió a una Camila que la miraba con tanta fragilidad

- Pensé que tú también te irías- Camila sonrió suavemente, sentándose con cuidado a lado de la chica, pero manteniendo la distancia para no incomodarse mutuamente

-Quería asegurarme que estuvieses bien- Ella exclamó, sus mejillas ruborizándose ligeramente y Lauren no pudo evitar sonreír sinceramente por primer vez en el día

- ¿Por qué eres tan buena conmigo aún con todo lo que les he hecho? Deberías estar molesta como ellos y sin embargo sigues aquí, preocupándote por mi- Sus miradas estaban fijas en la una y la otra, era tan fácil ver en ambos pares de ojos el dolor y la nostalgia, Camila solo suspiró, guardando silencio sin sabes que decir.

Por supuesto que para Camila era difícil estar ahí, por supuesto que estaba molesta con Lauren, pero más, con ella misma, no entendía muy bien las intenciones de esa idea repentina de Lauren de querer recuperar todo lo que ella deseó olvidar, no sabía con exactitud ese "Recuperar los lazos" del cual Dinah habló y sinceramente lo único que no quería, era hacerse esperanzas, no había tenido la oportunidad de hablar con Dinah, para que le explicara que demonios traía en mente, ya que al momento la joven bruja salió tras esos chicos, probablemente para tratar de convencerlos o incluso obligarlos a aceptar, la razón por la que se quedó, no fue necesariamente por Lauren, ella quería respuestas.

Pero simplemente ver a Lauren tan decaída, sentada en aquel sillón esperando alguna señal, le destrozaron el corazón, Diego y Lucia seguían ahí dentro, a todo momento con Lauren, mostrándole su fidelidad y sobre todo su cariño, ellos siempre se mantuvieron en silencio durante aquel discurso, pero Camila podía ver la preocupación en sus caras, aumentando su ansiedad, ella vio como Lauren se paró diciendo que necesitaba tomar aire fresco, ella la siguió, aún contra sus pensamientos, aún sabiendo que no debería hacerlo.

-Siempre me preocuparé por ti, Lauren- Camila confesó después de segundos de silencio, rápidamente grandes ojos verdes se posaron en ella- Estoy muy confundida con todo esto sinceramente, la mayor parte del tiempo no se que estoy sintiendo o que esperar... ¿Si me explico?- La mujer lobo asintió con la cabeza en modo de afirmación, volviendo su mirada hacia la calle desierta

-Me pasa todo el tiempo- Ella dijo- También se que es muy difícil que estés aquí, hablando conmigo sin saber mis intenciones o los fines de todo esto- Camila no pudo evitar fruncir el ceño y sorprenderse ante lo que Lauren le decía, pareciera que la chica había leído sus pensamientos

Eraser.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora