Eigtheen [MA20]

21

Ha pasado una semana desde que le dije a Marco que ya no lo amaba, todos me dicen que el esta realmente mal, que ha mandado a la mierda  todo pues llega tarde a sus entrenamientos y ha perdido su titularidad.

Me sentía en cierta parte culpable pues tal vez fui muy dura con él pero al menos yo no fui la que lo engañó. Todos dicen que aún ven a la rubia yendo a los entrenamientos pero él la manda a la mierda. Yo quería una explicación, pues quiero saber de dónde salió y en que momento pudieron involucrarse pues pasaba la mayor parte del día con Marco.

¿Kepa? No me ha llamado y mucho menos escrito, le he dejado algunos mensajes que ni se molesta en leer y esta en todo su derecho al no querer involucrarse con una chica que tiene al ex novio aún defendiendola por asi decirlo.

¿Mi trabajo? Pues no me han llamado, supongo que lo harán de improviso como normalmente lo hacen.

Ahora estaba con Álvaro sentada viendo una película mientras comíamos palomitas cuando llamaron a la puerta.

- Ponle pausa.- dije levantandome y yendo a abrir. Mi cara cambio por completo cuando vi a Marco fuera y con aliento a Alcohol.

- ¡Ahora vengo!- grite a Álvaro ya que sabía que esto sería una plática larga.

- Perdóname, he sido un completo idiota.- dijo intentando abrazarme y yo puse mis manos haciéndolo para atrás.

- Explícame todo, de dónde salió ella, cuando se veían y cuanto llevan juntos.- dije.

- Vale, cuando llegue a Madrid un mes después la conocí a ella en un bar al que fui con Isco, ella gustaba de mi y yo no pero quería olvidarte,  nunca fuimos algo sólo era sexo.- dijo e hice una cara de asco.- cuándo me enteré que Álvaro ficharía termine todo con ella, al enterarse de nuestra relación me llamaba para que volviera a liarme con ella y yo se lo rechazaba. Diario me llamaba amenazandome con decirte lo que sucedió entre nosotros y yo tenía miedo de tu reacción por eso intenté ocultartelo.- dijo con una lágrima.

- ¿Y la foto?- pregunte arqueando una ceja.

- Esa foto es vieja, puedes buscarlo en Internet, fue noticia que "Marco Asensio saliera con una chica".- dijo con una media sonrisa.

- Álvaro me ha dicho que ella ha estado en tus entrenamientos.- dije aún sin creerle.

- Parece que no te ha dicho que la mando a la mierda siempre que va.- dijo y recordé lo que me dijeron.

- Solo apenas lo hiciste.- dije.

- No, siempre lo he  hecho, ella de entero de que lo dejamos y creyó tener posibilidades y diario la mandaba a la mierda.- dijo seguro.

- No se si creerte Marco, algo me dice que si, pero igual algo me dice que no.- dije.

- ¿Tú corazón que te dice?- pregunto y pude notar como una lágrima se asomada por sus ojos.

- Que si.- dije mirándole.

- Te amo _____, y enserio que si lo oculte fue para protegernos pero parece que tome una mala decisión.- dijo y finalmente una lágrima cayó de su rostro.

- Te amo marco.- dije llorando.

- Mira.- dijo metiendo su mano en su bolsa del pantalón.- el 31 te lo iba a dar y ya no de pudo, supongo que ahora es buen momento para hacerlo.- dijo sacando un añillo.- me has hecho el hombre más feliz del mundo con sólo estar a mi lado, y a pesar de tener mis errores me amas como soy, juro que no me cabe la mejor duda de que eres la mujer de mi vida, así que te doy este añillo en promesa de que algún día te lo cambiaré por uno de compromiso real e igual como promesa de estar siempre a tú lado, _____ ¿Quieres intentarlo una última vez?- dijo y yo simplemente no podía dejar de llorar de felicidad.

No pude y me solté a besarlo, necesitaba sus labios desde hace mucho, lo extrañaba, extrañaba el contacto con él, extrañaba poder compartir momentos mágicos con él.

El se separó un momento de mi y me puso el añillo, me tomo por la cintura y se acercó a mi oído para susurrar:

- Eres el amor de mi vida.-

Volví a unir nuestros labios, era simplemente mágico todo esto, me sentía afortunada de tener a Marco en mi vida.

Si, tiene sus errores, como todo ser humano, e igual tenemos nuestros fallos al llevar la relación, pero juntos podíamos sacar esto adelante, para algún día caminar juntos al altar y saber que ambos escogimos bien a nuestra compañía eterna.