Mi luz eres tú // ALBALIA // NATALBA // ALBEILAN

Capítulo 12 - VeranOT Parte 4

ALBA
En el coche, volviendo a la casa.

¡Qué casualidad que hayamos acabado en el mismo coche! pensé abriendo la puerta del seat. La noche se había tornado algo extraña por culpa de la conversación con Natalia.
¿Acaso había olvidado algo importante?
¿O estaría quedándose conmigo?
Maldita Natalia, seguro que estaba jugando a volverme loca. Seguro que quería colármela para que me rallara hasta la saciedad, hasta que a ella le diera por contarme la verdad. Se va a cagar. Voy a seguirle el juego para desconcertarla.

—¿Sigues picada conmigo Albi? — Natalia me habló en el momento oportuno, como intentando joderme el plan.

—¿Eh? ¡Pero qué dices! — una sonrisa nerviosa intentó delatarme, así que hice un gran esfuerzo por mantenerle la mirada. No podía permitir que se saliera con la suya.

—Venga Albi, puedes cagarte en mí si quieres. Te doy permiso.

¿Pero quién coño se creía que era para vacilarme de esa forma? ¡Ah! Solté un gritito interno y cerré los puños.

—No te enfades—puso su mano sobre la mía y volvió a buscarme la mirada. —No me mandes a dormir al sofá, cariño.

—Estúpida — le solté mordiéndome la mejilla por dentro.

Natalia soltó una carcajada y seguidamente acarició mi mano. Me giré y le sonreí, no podía sobreactuar con ella, era imposible. Me quedé observando su tatuaje por unos instantes, pensando en el significado que podría tener para ella.

—Sabes que siempre estoy de broma, no quiero que te ralles por una tontería.

Soltó las palabras con delicadeza, buscando mi perdón con la mirada.

—No, no. Tranquila, es que últimamente estoy como muy "bum", que exploto por nada. La intensidad de estos días me ha sobrecargado los chakras —solté una risita para quitarle peso al asunto. —Además, ya sabes que me pico con facilidad. No es que me enfade, no sé.
Volví a bajar la cabeza, me costaba la vida mantenerle la mirada a Natalia. Siempre tenía la sensación de que sus ojos podían tragarme en cualquier momento.

Miki arrancó el coche y la primera canción en sonar fue "Antes de morirme" de C Tangana con Rosalía.

Miki comenzó a cantarla y Natalia y yo le seguimos con entusiasmo:

Yo no quiero hacer lo correcto
Pa' esa mierda ya no tengo tiempo
No vas a escucharme un lamento
Pa' esa puta mierda ya no tengo tiempo
Antes de morir, quiero el cielo
El ciento por ciento
Antes de morir, quiero el cielo
El ciento por ciento, por cierto.

Natalia acompañaba las palabrotas con un movimiento dejado de manos, mientras que yo movía el cuerpo siguiendo una curva.

Antes de que muera yo
Pienso follarte hasta borrar el límite entre los dos
Antes de que muera yo
Quiero jugar con mi vida hasta haberle perdío' el valor.

Nos partíamos el culo imitando los gestos de la otra, algo que me recordaba a cuando mi hermana y yo jugábamos de pequeña.

Cuando llegamos a la casa fui la primera en salir del coche, no podía aguantar las ganas de mear. Natalia salió por mi lado pero tropezó y tuve la suerte de cogerla a tiempo.