Segundas oportunidades

Capitulo diez

Seth y yo estábamos en silencio, un silencio incomodo que no me gusta para nada, quería decir algo pero después de que Sebastián salió de su oficina no tenía idea de que decir, habíamos hablado sobre esto la noche anterior y podía sentir que Seth sentía por lo menos un poco de cariño hacia mi pero cada vez que mencionan ese nombre "Helen" es como si todo se le olvidara aunque tratara de ocultarlo.

Lo estaba mirando y el alzó la mirada para encontrarse con la mía, no la aparte porque quería saber que era lo que estaba pensando pero era imposible, no estaba mostrando algún sentimiento en su cara.

- ¿Podrías ayudarme ahora? - dijo de repente.

Yo me levante del sillón y fui hasta su escritorio.

- Hare lo que sea con tal de no morir del aburrimiento.

- Solo tienes que ordenar estas hojas, parece que a Becca se le cayeron, están en completo desorden, están numeradas así que será mucho mas fácil.

Cuándo escuché eso pensé en negarme, haría el trabajo de alguien más y ella recibiría la paga, pero no dije nada y empecé a ordenarlas, prefería eso que estar sentada en el sillón. Con forme acomodaba las hojas me di cuenta de que eran más de quinientas, dios, no acabaría hasta dentro de unas horas, así que ne senté en la silla frente a Seth para estar mas cómoda. Cuando apenas llevaba una cuarta parte una ligera música inundó mis oídos, mire a Seth quien en seguida me miro también.

- ¿En serio trabajas con esa música? - le dije ya que yo me dormiria trabajando así, era música clásica y no es que la odie pero preferiría escuchar otro tipo de música en estos momentos.

-Necesito concentrarme. - Respondió el mirando la pantalla de su computadora.

No dije nada más porque era su oficina y  podía hacer lo que quisiera aunque diez minutos después comencé a cabecear, por eso no escuchaba música clásica, me relaja muchísimo y no puedo controlarlo, trate de mantener los ojos abiertos pero me era imposible hasta que sentí algo rozar mi pierna, mire a Seth adormilada y el sonrió un poco, yo desvíe la mirada, se estaba riendo de mi. Parpadee un par de veces y me concentre en ordenar las hojas cuando volví a sentir algo rozar mi pierna pero esta vez se quedo ahí, sabia que era él.

- Puedes descansar un poco si quieres. - Yo me negué. - La verdad es que me estas desconcentrando estando ahí.

¿Que? Como podía hacer eso, estaba casi detrás de su computadora.

- No puedo dejar de mirarte.

Vale, eso no lo esperaba, abrí la boca pero no dije nada más, entonces él se levantó, rodeo el escritorio y se puso justo al lado de mi, dios, teniendo tanto espacio aquí viene a invadirme. Alce la mirada para mirarlo, el giro la silla en la que estaba sentada y se recargo en el escritorio, se veía demasiado bien.

- ¿Que haces? - pregunte para romper un poco la tensión pero él solo se inclino hasta quedar a solo unos centímetros de mi rostro.

- No me gusto la forma en que Sebastián te miro. - eso que tenía que ver ahora. - Parecía que quería comerte.

Me reí un poco, el frunció el ceño y se acerco más, deje de reír, me ponía nerviosa tenerlo tan cerca y sabía lo que quería hacer porque yo también lo quería, quería besarlo justo ahora, pero entonces tocaron la puerta y en ella entró Becca, yo puse los ojos en blanco y Seth se alejo de mi, Becca parecía un poco incomoda.

- Perdón por interrumpirte Seth pero tienes una llamada, dijeron que es importante.

- Gracias Becca. - dijo él y tomó el teléfono de su escritorio.

El contestó y escucho lo que le decían del otro lado del celular mientras me miraba y tocaba su mentón.

- Gracias por avisar, estaremos ahí lo antes posible. - añadió y colgó.

-¿Pasa algo malo? - Esta vez me levante de la silla, tenía un mal presentimiento, él volvió a acercarse a mi.

- Es tu padre.

Sentí que mi corazón se detuvo un segundo y después empezó a latir con fuerza.

- Tuvo un infarto, al parecer quiere verte.

No pude contener las ganas de querer llorar, tomé mis cosas, tenía que ir lo antes ahora.

- Tranquilizante Connie, yo iré contigo.

- Tenemos que ir ahora. - Como podría tranquilizarme después de que a mi padre le dio un infarto.

Unos minutos después ya estábamos yendo a mi casa, tardariamos un poco ya que era en otra ciudad y esperaba ver a mi hermana Marcie también. Seth tocaba mi pierna en algunas ocasiones, sentía que esa era su forma de decirme que todo estaría bien.

Llegamos una hora y media después y si, como lo había pensado también estaba mi hermana, la abrace en cuanto la vi y ella a mi, no tenia idea de cuanto la extrañaba.

- ¿Ya viste a papá? - Le pregunté y ella asintió.

- Él estará bien Connie. - Me dijo pero no sabía si creerle del todo.

Entre en la casa, dios, extraño mucho estar aquí, subí a la habitación de mi padre y entre, él estaba acostado en su cama y en cuanto le vio me tendió su mano.

-Connie cariño, por fin llegas. - Yo tome se mano y me senté al lado de él. - ¿Donde esta Seth?

- Se quedo abajo.

-Bien.

¿Bien? No me dijo nada más.

-¿Cómo te sientes? - Le pregunté.

- Mejor que antes.

No entendía nada.

- Quiero descansar, podrías dejarme dormir.

Yo asentí, le di un beso en la mejilla y salí, estaba más confundida que antes, necesitaba hablar con el doctor. Antes de ir con Seth fui a mi antigua habitación, aún estaba tal y como recordaba, quiza ahora me parecía un poco aniñada a comparación con la habitación que tengo con Seth, mire algunas fotos con antiguas amigas que no tenia idea de porque conserve si nunca más volví a hablar con ellas, mire mi tocador y mi mesa de noche, había dejado mi vida aquí, quizá hace unas semanas estaría deseando volver aquí pero ahora me sentía cómoda con Seth aunque me hubieran obligado a estar con él, me sentía diferente de alguna forma, aquí siempre había sido la concentida de la familia y con Seth no es así.

Baje para reunirme con Marcie, su esposo Leo y Seth, estaban en la cocina y parecían mantener una conversación en secreto ya que cuando aparecí guardaron silencio un momento.

- Connie, no te escuchamos bajar- dijo Marcie.

- Papá quería descansar. - respondí haciendo notar que sabía que algo me estaban ocultando, mire a Seth pero el estaba mirando su celular.

- Será genial estar aquí estos días ¿no crees? Será cómo antes. - La mire confundida. - Oh, supongo que papá no te dijo - Yo negué. - Quiere que todos estemos aquí por una semana.

Me senté en una silla junto a Seth, no entendía que tenían planeado, bueno, no entendía completamente nada.

- También Seth se quedara. - Yo lo mire y el aparato la vista de su celular.

- Pero él tiene que trabajar. - Dije rápidamente.

- No importa Connie, puedo adelantar cosas aquí.

Dios, odiaba esto y no podía esperar para estar a solas con Seth y preguntarle a que se debía todo esto.

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HOLA! Espero les guste este nuevo capítulo y no olviden dejar sus votos y comentarios. ¿Que creen que traman la familia de Connie? Comenten!!

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Gaby.