Perversa Situación

14

Draco, y yo nos dirigiamos a su habitación para poder tener un poco de privacidad, ya que todo Howgarts se encontraban en aquella fiesta, y mi estado de ebriedad no serviria de mucho, aún me sorprende como es que draco nisiquiera provó una pizca de alcohol.

—Te he dicho, que estas realmente atractivo esta noche, Malfoy.—sonreí coquetamente, sugetandome de su cuello y poder besarlo.

—Estas ebria,¿seguro dices la verdad?.—

—Piensas que miento, a tí siempre te dire la verdad amor.—

——Me has llamado amor.—— sonreí

—¿Y no lo eres?—

—Solo si tú quieres que lo sea.—sujeto mi cuerpo

—Pense que desde aquel día habiamos dejado en claro lo que teniamos.— susurré mientras le quitaba su sudadera para poder dejarla aún lado

—Ahora seras mía, de todas las maneras posibles mi novia.—y después de aquello se vino una noche muy descontrolada para ambos.

Gemidos, y más gemidos en aquella habitación.

Draco, no paraba de entras y salir lo más rápido que se le permitía sin contar como estaba en esos momentos, mientras Mikaela parecía querer estallar del orgasmo en el cuál los dos parecían encontrarse.

—Mía.— y después de aquello los dos soltarón grandes suspiros para poder terminar rendidos en la cama de aquel rubio, no sin antes draco tapar a su ahora novia Mikaela.

Draco miraba, a la chica la cuál se encontraba recostada en su pecho ¿quien podia imaginarlo? Hace unos años, ella ni sabía de su existencia o simplemente le daba igual quien fuera, y ahora estaba aún lado de el descansando después de tener una de las mejores noches de su vida, y sin olvidar que era su novia.

A la mañana siguiente|

Movia mi cuerpo, por toda la cama antes de poder chocar con un cuerpo lo cuál hizo que abriera mis ojos en un instante y poder observar al rubio con más claridad.

Y recordó todo lo que hace unas horas habia ocurrido, podría haber estado ebría pero no pensaba permitir que aquello se le olvidara por completo.

Draco, siempre habia tenido la fama de mujeriego al tener a tantas chicas detrás de el y en su cama, a lo que dephora me decía una vez astoría termino en su cama y al día siguiente la ignoro como si de un muggle se tratará, pero conmigo no iba ser así.

—Buenos días, rubio.—sonreí, observando como despertaba y suspiraba aquello habia sido tan gratificante de ver, que solo suspire de la felicidad antes de darle un merecido beso, lo cuál parecio agradarle ya que me tomo de la cintura atrayendome a él.

—Estuve pensando hace unos días, sobre las vacaciones y que no te quiero dejar ir por esos largos meses. Te apetecería, ir a mi Mansión?—

Mi madre adoraba a la familia Malfoy, era como un ejemplo para ella de admiración. Y el estar ahí, seguro conoceria aún más a sus padres, no solo por ser conocida de draco, si no por ser su novia.

—Sabes que sí.—sonreí

—Mi madre estará feliz por esto, no pensara dejarte ir, ni yo. —dijo aquello con una gran sonrisa burlesca

Tomé suavemente la mano de draco, para poder unirla a la mía. Sin duda eran demasiado distintas, pero encajaban. La conexión que estabamos llevando en estas semanas, me sorprendía. No era una persona muy abierta en estos temas, ni com Cedric llegue a serlo apesar de quererlo tanto.

Estaba contenta, lo estaba con él.

—Tengo que volver, necesito saber como termino dephora. —sonreí, mientras tomaba las sabanas para cubrirme

—Tan rápido. Deberias dormir aqui, desde ahora en adelante.—aquello me hizo sonreír

—Sabes que diría que sí, pero no queremos que snape este merodeando por toda tú habitación. —reímos, una vez que me acomodaba mi ropa, sin embargo draco se levanto de golpe para dirigirse sin ninguna verguenza a su ropero.

—Ten, no dejaré que uses tu vestido delante de todo Howgarts de nuevo.—me lanzo ropa que debía ser suya.

Y claro que lo era, tenia una sudadera de Slytherin, junto con unos pantalones de deporte. Me sorprendía que hasta su ropa tuviera un olor tan al estilo de él, y eso me agradaba aún más.

—Asi estas mucho mejor, cariño. ¿Quieres que te acompañe?.—susurró cerca de mi oido

—Tranquilo, yo ire sola. No es como si quedara a tres cudras, te veo luego.—bese una vez sus labios para poder dirigirme a lo que dejaria de ser mi habitación por unos meses

Para mi suerte, no habia rastro de nadie. No era que me agradara que estuviera circulando mi vida personal por todo Howgarts, pero sabia exactamente que no tardarían en deducirlo. Y más llevando la ropa puesta de draco, aún con más razón.

Toqué un par de veces, ya que no queria entrar y encontrarme alguna escena que me provocará nauseas o risa, pero no hubo respuesta ni un grito desesperado de mi prima, asi que entre esperando no ver algo.

Sin embargo, no estaba nadie en él.

Tenia muchas teorias de donde se encontraría mi prima en estos momentos, pero sabía que se encontraría bien, y no le preste demasiada atención. Lo bueno, era que no teniamos clases hoy, por ser domingo si no seguramente todos llegariamos tarde hoy.

Toda la mañana me entretuve acomodando mis cosas, y terminando los trabajos que me hacian falta para las materias, y no obstante de limpiar la jaula de mi fiel amiga ginebra. No se cuanto tiempo estuve tan entretenida, que no noté cuando mi prima habia entrado a la alcoba, con las mismas pintas de ayer solo que ahora lucía más cansada de lo normal.

—Veo que has llegado de tú escondite, dephora.—sonreí burlescamente, antes de poder escuchar sus quejas se lanzo directamente a la cama.

—No tienes ni una idea de lo que acaba de pasar.—

—Quiero imaginarme,pero prefiero que me lo cuentes.—sonreí mientras tomaba asiento alado de ella

—Me he acostado con Potter.—dijo entrecortada

Y después de aquello, la habitación quedo en completo silencio.