Lazo inquebrantable

214 27 1
                                    

Una vida llena de farsas, creciendo y siendo moldeado para continuar con el trabajo de otros, esa es mi vida...

- ¿Mudarnos? ¿Por qué? -Mi madre poca atención me prestó
- Mañana partimos, no te vayas a retrasar
- Pero, ya me había acostumbrado al lugar...
-No de nuevo, te he dicho que no hagas amigos

Debido a cada negocio sucio que hacia mi familia, nos veíamos envueltos en serios problemas y debíamos mudarnos con mucha frecuencia, todo aquello me empujó a volverme frío y reservado

- Adivina qué cariño, tu padre es socio de un gran negocio. ¡Nos volveremos millonarios! -Sólo en ocasiones como esa, mi madre me trataba de forma amorosa -¡Oh sí!, recuerdo que ese sujeto mencionó que tenía un hijo, parece que es de tu edad... Bueno, tal vez un poco más joven. ¿No es grandioso?

El negocio fue prospero, y pronto nuestra mala situación económica mejoró.
Nos presentamos formalmente ante la familia que había sacado de las alcantarillas a la mía. Nada era realmente interesante exceptuándolo a él
- ¡¿Cómo estás?! -Se acercó sonriente y emocionado -¿Eh? ¿Por qué me miras así? ¿Acaso eres tímido?
- Yo...  -Tomó mi mano y se presentó
- Soy Patrick, ¿Cual es tu nombre?
- Thomas... -Era sólo un poco más bajo que yo, sus ropas eran bastante alegres combinando muy bien con su personalidad despreocupada
- Bien -En su chaleco tenía algunos broches llamativos, desenganchó uno y me lo entregó -Esto, para que cambies esa cara -Era un broche sencillo, con una sonrisa dibujada
-Gracias...
- No lo veas así, no es nada realmente caro -Lo miré curioso
-¿Qué edad tienes?
- Nueve ¿Y tú?
- Diez -Su rostro se apagó un poco
- Entonces eres mayor que yo... -La luz volvió a sus ojos en un instante -Bueno, ¿Quieres jugar conmigo?
- ...¿Donde?
- Atrás de la casa hay un parque, aunque los toboganes son muy altos...
-¿Está bien eso? ¿No es peligroso? -Me tomó de la mano para guiarme
- Eso no importa, tú me vas a cuidar ¿Verdad?

Situaciones tan rutinarias, alguien tan ordinario, todo aquello era mi tesoro

- ¡Hey Thomas, por acá!
- ¿Patrick?
- Genial, ¡Ahora estaremos en el mismo curso en la escuela!
- Sí... Supongo...
- ¿Por qué dudas? ¡Soy alguien agradable!
- (...)
- Oye, tus padres dijeron que eras muy bueno hablando inglés, yo soy realmente lento para eso ¿Podrías ayudarme?
- ...Claro
- ¡Genial! Me quitas un peso de encima, a cambio puedes decirme hermanito
- No te diré así
- Eso es algo rudo

Un completo idiota, bastante torpe y escandaloso. Todo lo que me molestaba...

- Supongo que está bien, él dijo que podía venir  sin avisar -Dentro de la casa se escuchaba un gran alboroto, me asomé por unas de las ventanas para ver que sucedía
- ¡Eres un inútil! ¡Ese mocoso te sigue superando en todo! -Patrick estaba en el suelo, lloriqueando -¿Piensas ser el heredero de la familia con esa actitud?
- Lo siento papá
- Entonces demuestralo, no saldrás de aquí hasta que puedas leer esta lección con fluidez -Trancó de un portazo

La habitación en la que habíamos jugado tantas veces ahora parecía oscura y sombría... ¿Cuantas veces habría soportado eso?
No estoy seguro de cuanto tiempo estuve allí, mirándolo llorar pero ya la noche había caído sobre ambos.

- ¡Thomas! Conseguí una mesa -Patrick se mostraba alegre como de costumbre -Estos hambrientos, parecen animales tomando las mesas
- ¿Qué te pasó en la cara? -Tenía una banda sobre la herida en su mejilla
- Ah, esto... Sabes que soy demasiado torpe, me golpee con la rueda del parque
- Ya... -Me sentía impotente
- ¿Qué te pasa? Tu cara se ve rara... Y no de buena manera
- Patrick, ¿Nosotros somos amigos? -Me miró confundido
- ¿Qué si lo somos? Pues... Claro, así lo creo yo. Aunque hemos compartido como hermanos, ¿No?
- Entonces no tienes que mentirme -Su expresión se volvió seria y tras un suspiro dijo...
- Vale, tú ganas. Yo me comí tu postre la otra vez, no había ninguna rata
- ¿Qué...?
- ¡No podía resistirme! ¡Era flan de chocolate! La excusa de la rata me pareció buena... Aunque ahora que lo pienso, no puede llevarse una rata eso en la boca ¿Cierto? Entonces se desparramaría... Aaaah, que excusa tan mala
Un completo idiota...
______________________________________

- ¡También te inscribieron en el campamento! -Patrick se acercó sonriente -¡Que suerte! Estaba tan nervioso, no soy bueno socializando
- ¿Es broma? -Nuestra atención se desvío en conjunto hacia otro estudiante
- ¡Pero que aura! A penas el primer día destacó bastante, voy a hablarle... -Lo sostuve por la manga
- ¿Qué crees que haces?
- ¿Eh? Ya dije que quiero hablarle, me gusta su cara, parece buen tipo
- ¿Solo por su cara? En serio eres estúpido
- Disculpen -Aquel estudiante estaba justo en frente -¿Saben donde quedan los dormitorios?
- ¡Claro! Mi nombre es Patrick, y aquél es mi secuaz Thom
- Soy Louis, es un placer Thom
- Me llamo Thomas y no soy su... -Patrick lo rodeó su brazo con el suyo y comenzaron a andar
- Te daré un tour del lugar, tú sigueme
- ¡Tú no conoces este lugar! ¡Y no me dejes atrás!

Patrick era fácil de impresionar, por un tiempo fui el principal punto de atención en su vida pero después esa línea que dibujaba nuestra relación se empezó a hacer más estrecha. Sentía que lo único que compartíamos ahora eran discusiones
______________________________________

- Hasta arrastraron a Tony en esto -Patrick y yo nos habíamos reunido en la mansión. Nuestros padres habían sido socios desde que nos conocíamos y ahora unían lazos con la familia de Louis y también con la de Antonio
- Ya había hecho su vida, la señorita Ann debió ser presionada -Asentí
- No tenemos opción ¿Verdad? -Se recostó sobre el sofá -Yo en realidad me siento algo tranquilo
- ¿Como te puedes sentir tranquilo en un momento así?
- No te pongas intenso tan rápido. Piensalo, desde ahora seremos moldeados estrictamente para ser los sucesores de toda esta mierda, solo viviremos para eso...¿No es bueno que pasemos este infierno juntos?
- Si lo pones así...
- Además, estoy feliz de estar lejos de casa -Añadió sonriente
Patrick no había cambiado nada desde el primer día. Nunca mencionó ningún detalle de lo terrible que era su casa sin visitas, en cambio continuaba sonriente y despreocupado. Yo en cambio llegué a cambiar tanto que ahora no podríamos mantener una conversación prolongada

- ¿Eh? ¿Por qué estás llorado? -Patrick abrió un poco la puerta de mi habitación
- ¡Vete de aquí! -Traté de cerrar la puerta pero puso su cabeza en medio
- ¡AAAAAH! ¿PIENSAS DECAPITARME?
- Diablos, eso ha sido tú culpa -Lo dejé pasar a regañadientes. Él comenzó a examinar el lugar, desde que empezamos a vivir allí no habíamos entrado a la habitación del otro
- Siempre pensé que el día en que entrara en tu habitación pasaría una desgracia, como que me matarás para evitar esparcir los rumores de tus extraños gustos y eso...
- ¿Qué coño dices? -Detuvo su mirada sobre la cómoda
- ¿Ah? ¿Qué es esto?
- ¡Deja de hurgar en mis cosas! -Se giró sonriente
- ¿Aún conservas esto? -En sus manos tenía aquel broche con cara sonriente -No te ayudó en nada... Pero aún la conservas
- Deja de burlarte -Aparté la mirada avergonzado
- No me burlo, estoy impresionado. ¿Cuántos años pasaron... Ocho?
- No llevo la cuenta... -Se mantuvo en silenció un rato, devolviendo el broche a su lugar
- ¿Qué pasó? Debe ser serio para que alguien tan frío esté así -Le di la espalda
- Leila...
- ¿Todavía seguían juntos?
-Ella...ha eliminado el contacto...
- Vaya... Ese tipo de cosas pasan cuando no sabes nada del amor, los romances a larga distancia nunca funcionan
- ¡¿Tú que sabes del amor?!
- Pues... Realmente nada... ¡Pero! Si estuviera con una chica me iría mejor que a ti
- ¡¿Te parece el momento para hacerme molestar?!
- Es mejor que verte llorar
- (¡!)
- Bueno, no soy bueno animando así que te dejaré inundar el cuarto -Abrió la puerta y la mantuvo un momento -Cuando termines, puede que quieras acompañarme en una partida de ajedrez
- ...Bien

Ya todo eso ha pasado, no sé por que lo recuerdo justo ahora...

- Todo el día has estado pensativo -Patrick me miraba curioso -No es normal, pensar te hará mal
- Deja de molestar, no sé por que te acompañé...
- Es porque soy encantador -Golpee su cabeza -¡Oye!
- Tenemos que ir a estas conferencias pero... Podíamos ir cada quien en su auto
- Eso es cruel... ¿Acaso no somos amigos?, sabes que detesto estar con mi instructor
- No hagas que vuelva a golpearte
- Bah, eres un caso perdido -Se recostó sobre el tablero del auto y me miró fastidiado -Hey, para, tengo que ir al baño
- ¡Otra vez no! Es la tercera vez desde que salimos ¿Acaso tienes vejiga?
- Mi organismo es delicado, ¡Tengo que mear!
- ¡No! Ahora, esperas a que lleguemos
- Hmmm, ¿Donde está la botella de la que estabas bebiendo?
- ¡NI SE TE OCURRA!






















Gran idiota

Amor destrozadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora