Puros de Espíritu

Capítulo III

No al plagio

Capítulo tres: Pequeña Delphini

Miércoles 15 de enero de 1997

A primera hora de la mañana, antes de entrar a clases, una lechuza llega volando a mí justo cuando atravieso el cuadro de la sala común de Slytherin. Me sorprende un poco, ya que a nosotros nos llegan a la hora del desayuno. La recibo en mi antebrazo y la reconozco:

—Algo me dice que no traes buenas noticias, Star. Si te han mandado mis padres quiere decir que necesitaban que su mensaje llegara con rapidez e intimidad.

La lechuza canta en afirmación.

No demoro en tomar la carta de su pata y abrirla. Poco a poco mi semblante se queda sin emoción alguna, ya veía que esto pasaría pero no pensé que fuera tan pronto:

Querido Draco:

Sé que estás en plenas clases y lamento mucho tener que molestarte por este motivo. Sin embargo, somos Malfoy y debemos hacer frente a todo lo que se pone en nuestro camino.

Nos quieren quitar a mi sobrina a menos de que tengamos a alguien que sea capaz de acogerla en su familia y responsabilizarse de ella.

Tu padre estuvo revisando todo esto con sus abogados y tenemos una ficha a nuestro favor… si es que la señorita Granger, tu esposa, acepta. Tanto tú como nosotros sabemos que no podemos adoptarla, pero Hermione sí puede hacerlo; la niña tendría nuestra protección oficial por ser una Malfoy legítima.

También confirmamos que tu matrimonio está registrado en la Legislación de Criaturas Mágicas en el Ministerio. Por eso es que mi sobrina, al ser adoptada por Granger, automáticamente pasará a ser tuya también.

No obstante, tu padre y yo sabemos la aberración que tu esposa tiene por la niña. Sabes, hijo mío, que nunca te pediría algo de este tamaño, algo que te provoque problemas… En esta ocasión, hijo, necesito que me ayudes a que Delphini se quede con nosotros. Es lo único que me queda de mi hermana cuerda, porque sé con certeza que esta niña hizo que mi hermana tuviera un poco de cordura en medio de tanta demencia.

Sino aceptas hacerlo como un favor. Entonces lo diré: TE LO ORDENO, DRACO LUCIUS MALFOY BLACK.

En tus manos está la obligación de que Delphini se quede definitivamente con nosotros. Sólo ocupamos que Granger haga lo formal, la fachada y nosotros nos encargaremos de darle un hogar.

Tu amada madre.

Estoy maravillado. Leer esta cara es como tener a mi madre frente a mí a mis ocho años de edad, hasta puedo asegurar cuáles fueron sus gestos al escribirla.

Me permito bufar con diversión un momento.

La cuestión ahora es ¿cómo haré que Granger acepte? A pesar de que ya está un poco tranquila por lo que hablamos de Potter, no puedo negar que hemos estado evitando justamente el tema de la niña. Granger es un espíritu libre. No nació para estar esclavizada en los bajo los regimientos clasistas de los magos ricos.

Yo fui criado para ser un hombre que llevará el control de su Casa, de sus negocios heredados por sus padres y para darse a respetar ante la sociedad llena de burócratas y corruptos. Para que la Familia Malfoy fuera temida. Darle el heredero que necesita es mi obligación y estilo de vida. No el de ella.