"¿Realmente debo hacerlo?" preguntó Yukhei en el auto cuando se dirigían al Centro de Alojo de Esclavos.
"Sabes que sí." respondió su madre con un suspiro amargo. "Sabes que a los tres meses levantan una investigación a las personas que no se han hecho poseedoras."
Yukhei no respondió, solo volteó su rostro y fijó su mirada en la ventana del auto.
A los pocos minutos llegaron al gran edificio con las siglas "C.A.E" grabadas en la fachada.
"Mamá, por favor no me hagas hacerlo." suplicó Yukhei cuando su madre estacionó el auto frente al edificio.
Se sentía como un pequeño niño rogándole a su mami que no lo llevara al doctor, pero no lo podía evitar, realmente no quería entrar a ese lugar.
"Lo siento, Xuxi." respondió su madre con amargura y se bajó del auto.
Después de tomar un par de respiros profundos, Yukhei bajó del auto y siguió a su madre tras la puerta del edificio.
El interior era gris y aburrido. Hacía tanto frío allí dentro que Yukhei tuvo que jalar las mangas de su camisa para abrigar sus dedos.
"¿En qué los puedo ayudar?" dijo la mujer que ocupaba el escritorio que se ubicaba frente a la entrada. Yukhei y su madre se acercaron a ella.
"Mi hijo viene a hacerse poseedor."
"Nombre completo, por favor." dijo la mujer, clickeando sin parar en su computadora.
"Wong Yukhei." respondió el alto chico sin muchas ganas.
Yukhei vio a la mujer teclear su nombre y luego fruncir el ceño.
"¿Porqué ha esperado tanto tiempo?" preguntó la mujer viéndolo directo a los ojos.
"No habíamos tenido tiempo." la madre de Yukhei respondió rápido con una sonrisa.
La mujer los miró a ambos sin creerse mucho la mentira, pero luego siguió tecleando en su computadora. Después de unos minutos, se escuchó el sonido de una impresora.
"Llene este formulario y tráigalo cuando termine." dijo la mujer entregándole a Yukhei los papeles que acababa de imprimir.
El formulario era algo sencillo de llenar, así que en pocos minutos ya el alto estaba siendo dirigido a los pasillos donde tenían a los esclavos.
Yukhei sabía que aquellos centros no eran amables con los esclavos, pero el ojinegro no se esperaba entrar al primer pasillo y ver celdas pequeñas y frías, cada una con un esclavo semidesnudo arrodillado dentro de ella.
Con solo poner un pie allí, el cuerpo de Yukhei se estremeció y deseó dar la vuelta y huír de aquel lugar, pero la mano de su madre en su espalda se lo impidió.
"Estos son los esclavos que han sido devueltos." dijo el hombre encargado de guiar a las personas por los pasillos. "Será mejor que vayamos a los nuevos ingresos. Por ser un nuevo poseedor, tienes derecho a escoger los nuevos paquetes."
Yukhei no pudo articular ninguna palabra. Odiaba escuchar al hombre hablar de los esclavos como si fueran objetos. Y ni siquiera sabía que las personas devolvían esclavos.
Él y su madre empezaron a seguir al hombre, pero cuando llegaron a la puerta del siguiente pasillo, la puerta a sus espaldas se abrió de golpe.
Instintivamente Yukhei volteó su rostro y sintió como si toda la sangre de su cuerpo se congelara.
Allí en la puerta estaba un hombre con el mismo uniforme que el hombre que los estaba guiando. Pero a diferencia del guía, este hombre tenía a un esclavo agarrado del pelo. Yukhei lo vio como le susurró algunas palabras al esclavo y luego lo lanzó al suelo.
El esclavo era tan delgado y pequeño que cuando cayó al suelo, Yukhei sintió que se rompería en mil pedazos. El esclavo no parecía tener más de 15 años y tenía su espalda desnuda totalmente llena de moretones.
Sin percatarse de lo que estaba haciendo, Yukhei caminó hacia el par y se quedó viendo al esclavo tendido en el piso.
Con dificultad, el esclavo levantó su cabeza y miró hacia Yukhei. Rápidamente bajó su mirada y se movió hasta quedar arrodillado frente al más alto. Yukhei pudo ver que sus movimientos eran pesados, como si le costara mover cada centímetro de su cuerpo.
Yukhei había visto aquellos pequeños ojos por solo un instante, pero había sido suficiente.
"Quiero a este."
YOU ARE READING
「libérame」 「luwoo」 「terminada」
FanfictionUn mundo en el que todos los seres humanos libres deben por ley ser poseedores de esclavo. Yukhei desearía no tener que vivir en este mundo.
