El Corazón Nunca Se Equívoca. [Aristemo].

Capítulo 3.

POV. Temo.

Ya paso una semana desde el accidente del pastel que tumbe a causa de mi descuido por estar como un bobo viendo a Aristóteles, a desir verdad desde que lo ví me resultó atractivo he interesante, pero aún así he tratado de contenerme, aún no se si sea gay, bisexual o hetero, aún que me rompería el corazón saber que es hetero y tener que conformarme con ser solo su amigo eso me terminaría matando.

Aún no habló de ese tema con mi mejor amigo Diego, me quiero evitar los sermones que se que me dará por enamorarme de alguien que aún no se sobre sus preferencias sexuales, pero que más le voy hacer, el corazón es el que manda aquí y no puedo evitar sentir atracción hacia Aris.

Mi padre nos inscribió a mis hermanos y a mi al colegio a dónde asisten Aris y Frida, estoy feliz por ello ya que me he hecho amigo de Aris casi desde que llegue al edificio de los Córcega. Su familia es muy amable y las personas de los alrededores también.

Llevo apenas unos días en Oaxaca y sin duda alguna la noche es hermosa aquí. Era cierto lo que Frida dijo esta mañana. Sentarme en una banca del parque por la noche es lo más lindo que puedo hacer para pensar.

—hola temo que haces?. —  Aris se aparece saludando con su típica sonrisa hermosa que tiene.

Sonreí de verle. —nada, solo pensando.—dije sin más rodeos tratando de no ponerme nervioso. —¿y tu?. — tenía curiosidad que hacía en el parque a estas horas de la noche.

—vine a verme con una chica. —mi corazón se partido en mil pedazos.

— ¿con....con una chica?. —tenía ganas de llorar pero no lo haría frente a él.

Su suave mano paso por mi hombro.—si, realmente es una ex novia mía, pero las cosas no funcionaron, al parecer solo me quería para presumir que tenía de novio al modelo de cklass...... además creo que jamás sentí amor por ella.

Tome su mano con delicadeza. —lo lamento, ¿todas tus relaciones son así debido a tu trabajo?. —quería respuesta aunque me doliera hablar de ello.

—no claro que no, jamás tuve alguna atracción hacia una chica, inclusive jamás he tenido novia aparte de ella. —mi mente divago ante tal respuesta.

Eso me dejaba un poco de cancha para poder intentar algo con él. De eso estaba seguro.

—¿enserio?. —el asintió levemente y sonrió.

Aris se sentó a mi lado.—¿y que hay de ti? Dejaste alguna novia en tu antigua ciudad?. —su pregunta me dejó desconcertado, no sabía que decir, obvio que no le diría que era gay, que tal si se asusta y me deja de hablar.

Me encogí de hombros restándole interés a su pregunta. —no, realmente jamás he tenido novia y creo que jamás la tendré.

—¿y porque no?. —me quedé mirando al suelo esperando una respuesta conbinsente que decir.

Mire a Aris de reojo. —pues no soy tan apuesto como los demás, las chicas  buscan a alguien lindo. — Aris soltó una risilla y menio su cabeza de un lado a otro.

—pero si tu eres lindo y tierno, dime ¿que chica no se fijaría en ti?. — me sonroje ante sus palabras y desvíe la vista hacia otro lado.

—yo no soy lindo y mucho menos tierno, además las chicas no se fijan en mi porque...... —me quedé en silencio casi le digo que soy gay y eso sería un grave error.

—porque están ciegas y no ven lo lindo y tierno que eres. —Aris acaricio mi cabello. — estas bien tal y como eres, tienes tantas cualidades, te gusta el básquet, eres inteligente, amable, tierno, atento, tu sonrisa es hermosa, tienes unos bellos ojos, un lindo cuerpo, todo en ti es bello, solo tienes que valorarte más.