Hechizo de amor - JiHan

Fifteen💜

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Después de una tarde llena de comida y anécdotas por parte de todos los chicos la hora de irse llegó. Todos a excepción de Woozi y Jeonghan se dispersaron por las calles con destino a sus casas. Jihoon se ofreció a acompañar a su amigo y éste aceptó gustoso. 
Caminaban por el bulevar un poco juntos para generar más calor debido al frío que se avecinaba. 

Y como siempre, JiHoon no podía aceptar que el CheolSoo siguiera junto, necesitaba sacar su jugada para sentirse mejor.

—Ahh Hannie, ¿Ya has pensado entregar tu carta de amor a Joshua?

—No, he querido hacerlo pero me da miedo

—Hazlo pronto antes de que te lo ganen

—¿De que me lo ganen? ¿Usas Internet Explorer o qué? Ya me lo ganaron—simuló limpiarse las lágrimas—   

—Ay, no quería hacerte sentir mal. Me refería a que tus sentimientos no deben estar ocultos, dale esa carta, quedó muy linda; y además, si yo fuera Joshua me sentiría halagado de gustarle a alguien como tú, Jeonghan. Hasta seguramente quedaría enamorado de tu carta.

—Bien lo dijiste, de mi carta, no de mí.

—¡Hey! ¿Qué pasó con esos ánimos? Confía en ti y en tus encantos—Se acurrucó en el hombro de Jeonghan dándole unas palmadas en su espalda mientras seguían recorriendo su travesía.

—Tal vez lo haga dentro de una semana. Quiero ver cuál es la reacción de Shua—tenía un hermoso colorete rosa suave dándole vida a su rostro, que no sabía si era por pensar en el chico amado o el frío quemando su cara—¿Sabes? Si por lo menos logro sacarle una sonrisa o un suspiro cuando lea la carta seré el chico más afortunado. ¡Ahh Woozi! siento algo muy lindo. Es perfecto

—Hannie, me gusta verte así, hasta siento que me contagias tu felicidad —rió —Pareces un niño chiquito con juguete nuevo

—Algo así se siente

Continuaron conversando por las calles de las dudas que tenían con respecto a la tarea, abrazados y con una imagen muy linda de Jeonghan proporcionándole calor a los fríos y entumidos dedos de JiHoon. 
Después de largos minutos su travesía por la ciudad acabó y llegaron a la casa de Jeonghan. Cuando JiHoon estaba por irse Han lo paró y le ofreció un abrigo para que no muriera a medio camino por la temperatura tan baja. Agradecía que fuera bajo de estatura porque sólo así lo cubría hasta la pantorrilla.

Después de eso el apuesto chico fue emocionado a su habitación y abrió con prisa su cajón. Tomó la carta y la pegó a su pecho, mientras cerraba sus ojos.

Fue a la ventana y la abrió sin importar el increíble frío; miró al cielo.
—Papá... en una semana le diré a Joshua que me gusta. ¿Crees que le guste la carta?...—quedó unos segundos en silencio imaginando la voz de su padre —Cielos Santos, estoy asustado, no quiero tener el corazón roto... no otra vez. Sigo preguntándome cómo le hiciste para que mamá aceptara ser tu novia por segunda vez, es decir... ya sabes... es algo complicada—Rió recordando las anécdotas que su madre contaba sobre el gran proceso que tuvo su padre al querer recuperarla por una tontería—¿Cómo la enamoraste?—volvió a quedar en silencio—Tus encantos—esbozó una sonrisa—Papá, gracias por escucharme. Me has hecho bien. Te amo. Tengo que hacer los deberes—Lanzó un beso al aire con dirección al cielo. Cuando estaba por cerrar la ventana una pizca de nieve cayó en su mejilla—Gracias papá.