24.

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Jo

Apenas me enteré de que algunos residentes iban a venir a Inferno, decidí hacer algo para ayudar a Lena. Sé que tiene una relación especial con Kara, no fue difícil darme cuenta, a pesar de que tengo turnos distintos a los de ellas, es bastante evidente que se traen algo, o por lo menos así lo es para mí, es solo cosa de prestar atención a como se ven.

Me encargué de dar aviso a los guardias de seguridad de que Juliet, Lena y Kara tenían acceso gratuito a Inferno desde aquí en adelante, de la misma forma lo hice con los bármanes, ellas tenían barra libre a lo que quisieran.

A pesar de que estaba molesta con Juliet por lo ocurrido con Mark, necesitábamos hablar, y si Lena y Kara tenían una relación del mismo tipo que Juliet y yo, supongo que también necesitarían un espacio libre de gente, así que dejo para ellas libre el salón 3, con Juliet ocuparemos mi oficina.

Eran las 21.30 p.m. aún faltaba para que llegaran los demás, fui a la barra principal donde estaba Lukas. Decidí ayudarlo, no había tanta gente, pero pronto se empezaría a llenar. Trabajé en la barra de alguno que otro bar así que sabía sobre preparar cócteles. Luego de eso fui a mi oficina, necesitaba pensar.

Mientras estoy sentada en mi escritorio intentando ordenar mis pensamientos y sentimientos. Desde lo que ocurrió con la chica que se llamaba Rose, no he podido dejar de darle vueltas a como estarán mis hermanas, hace mucho tiempo que no las veo. Mientras estuve en Oxford intenté pensar lo menos posible en ellas y en cualquier cosa que me recordara a Washington D.C., y funcionó, pero ahora que estoy devuelta es mucho más complicado. Eso me hace recordar cuan complicado fue al principio, todo lo que tuve que trabajar para poder pagar todo, si bien me habían entregado un cheque con una cantidad de dinero, necesitaba más que eso, pero, en fin, de todo lo que trabajé nació este lugar, supongo que algo hice bien.

Me dedico a la revisar papeleo administrativo durante unos minutos y ya luego voy de nuevo a la barra, donde me encuentro con Alex

- ¡Jo! ¡Tanto tiempo! – dice mientras me abraza, tiene un fuerte olor a cerveza, ha estado bebiendo

- Alex, hola – la sostengo por la cintura y la ayudo a sentarse en uno de los asientos de la barra – Nos vimos en el hospital hace no mucho

- Eeh... no lo sé, no lo recuerdo... en este momento – arrastra un poco las palabras – ¿Sabes? Eres una chica un bonita

- Gracias Alex, también eres bonita – le digo riendo

- ¿Te puedo decir un secreto? – me pregunta

- Por supuesto – se me acerca y habla en voz baja pero lo suficientemente alto para que la escuche

- Te pareces un poco a una chica que me gusta

- ¿Ah sí?

- Sí – le hace una seña a Lukas para que le traiga otra cerveza

- ¿Y dónde está ella ahora?

- Pues no tengo idea – bebe de la cerveza – Pensé que iba a estar aquí... pero ya ves – bebe de nuevo – No está

- ¿Y le dijiste que viniera?

- Noo... no le dije. Verás – me hace señas para que me acerque – Es mi ex – susurra

- ¿La chica que te gusta es tu ex? – me tapa la boca

- Shh... silencio, que nadie sabe que es mi ex – saca su mano

- Pero si no dijiste su nombre

- Ahh, es Maggie

- Espera ¿Qué? – no puedo evitar reír, pero al ver el rostro serio de Alex me doy cuenta de que es cierto. Pero hay algo que no entiendo, si es así, ¿Por qué razón Maggie me dijo que esperaba que Alex no fuese heterosexual? Recuerdo que durante la primera semana la escuché hacerle varias bromas a Alex sobre salir con ella, pero ahora que lo pienso, hace ya un tiempo que no las he visto hablar -

Hospital Nacional (Supercorp AU)Where stories live. Discover now